¡Duro, duro! El panorama político sigue moviéndose a toda máquina, y esta vez la bomba llegó desde el bufete Mora Tumminelli. Resulta que don Óscar Campos, aquel que andaba buscando chamba en el 2022 con Encuentro Nacional, le echó el agua al mate a Fernando Zamora, el candidato del Partido Nueva Generación (PNG). Esto ya pinta interesante, porque Campos no es mermelada, ha andado en esto de la política –diputado con el PLN, viceministro de Agricultura– y que él dé su apoyo a alguien, pues eso dice bastante.
En medio de la conferencia de prensa de este lunes, Campos soltó unas cuantas verdades que pusieron a temblar a algunos. Según él, Zamora es “el único candidato que derrota el oficialismo en la segunda ronda”. ¡Tremenda afirmación!, y ahí no paró. Argumentó que se ha convencido de que Zamora, que es abogado constitucionalista, tiene propuestas sólidas y entiende bien los problemas del sector agrícola y pesquero. Parece que el exdiputado vio en Zamora una oportunidad para revancha política y tal vez, ayudar a resolver algunos de los males que aquejan al país.
Pero no todo fue elogios para el candidato del PNG. Campos aprovechó la ocasión para lanzar fuertes críticas contra el gobierno actual, acusándolo de favorecer a los importadores en detrimento de los productores nacionales. Dijo que esto ha generado una situación injusta para quienes trabajan la tierra, y que es hora de darle un respiro a estos campesinos que tanto sudan para alimentar al país. Es evidente que hay hartura con la forma en que se han manejado algunas cosas, y Campos no dudó en decirlo abiertamente, con todo respeto, claro.
Además, Campos destacó que el sector agroalimentario está más unido que nunca. Ya no hay tantas divisiones ni peleas internas, sino una verdadera voluntad de trabajar juntos para defender sus intereses. Esta unidad podría ser clave para presionar al gobierno y exigir cambios en las políticas agrícolas. ¡Un frente común es poderoso, mae!
Y hablando de cambios, la campaña de Zamora también anunció una propuesta innovadora para reformar el sistema crediticio. Se llama “Nuevo Chance”, y busca aliviar la carga de miles de costarricenses que tienen manchas crediticias en el Sugef. Paola Mora, candidata a diputada, explicó que la idea es permitir que las personas paguen sus deudas originales sin tener que cargar con recargos abusivos, esos famosos “cláusulas leoninas” que ponen a la gente contra la pared.
Zamora, por su parte, enfatizó que esta iniciativa pretende facilitar el acceso al crédito para aquellos que necesitan salir adelante. Quieren otorgar facilidades para que la gente pueda regularizar su situación financiera y volver a construir su historial crediticio. No se trata de una condonación, insistieron ambos, sino de brindar herramientas para que las personas puedan cumplir con sus obligaciones y recuperar su estabilidad económica. Piensen en todas esas familias que llevan años sufriendo por culpa de una pequeña deuda… ¡esta puede ser una luz al final del túnel!
Según estimaciones, alrededor de 850.000 personas en Costa Rica tienen expedientes judiciales por cobro administrativo. Esta iniciativa podría beneficiar a muchísimas familias, permitiéndoles acceder a créditos hipotecarios, automotrices o incluso personales. Sería un golpe significativo a la pobreza y la desigualdad, y una muestra de que el gobierno puede estar al servicio de la gente, en lugar de privilegiar a unos pocos. Y ojo, que esto no es magia; requiere voluntad política y una gestión transparente.
Definitivamente, el respaldo de Campos a Zamora y la propuesta del “Nuevo Chance” abren un nuevo capítulo en la contienda electoral. Pero me pregunto... ¿realmente estas promesas llegarán a buen término, o caeremos en otro ciclo de falsas expectativas y decepciones? ¿Creen que esta unión entre Campos y Zamora realmente representa un cambio genuino, o es simplemente una estrategia política más para ganar votos?
En medio de la conferencia de prensa de este lunes, Campos soltó unas cuantas verdades que pusieron a temblar a algunos. Según él, Zamora es “el único candidato que derrota el oficialismo en la segunda ronda”. ¡Tremenda afirmación!, y ahí no paró. Argumentó que se ha convencido de que Zamora, que es abogado constitucionalista, tiene propuestas sólidas y entiende bien los problemas del sector agrícola y pesquero. Parece que el exdiputado vio en Zamora una oportunidad para revancha política y tal vez, ayudar a resolver algunos de los males que aquejan al país.
Pero no todo fue elogios para el candidato del PNG. Campos aprovechó la ocasión para lanzar fuertes críticas contra el gobierno actual, acusándolo de favorecer a los importadores en detrimento de los productores nacionales. Dijo que esto ha generado una situación injusta para quienes trabajan la tierra, y que es hora de darle un respiro a estos campesinos que tanto sudan para alimentar al país. Es evidente que hay hartura con la forma en que se han manejado algunas cosas, y Campos no dudó en decirlo abiertamente, con todo respeto, claro.
Además, Campos destacó que el sector agroalimentario está más unido que nunca. Ya no hay tantas divisiones ni peleas internas, sino una verdadera voluntad de trabajar juntos para defender sus intereses. Esta unidad podría ser clave para presionar al gobierno y exigir cambios en las políticas agrícolas. ¡Un frente común es poderoso, mae!
Y hablando de cambios, la campaña de Zamora también anunció una propuesta innovadora para reformar el sistema crediticio. Se llama “Nuevo Chance”, y busca aliviar la carga de miles de costarricenses que tienen manchas crediticias en el Sugef. Paola Mora, candidata a diputada, explicó que la idea es permitir que las personas paguen sus deudas originales sin tener que cargar con recargos abusivos, esos famosos “cláusulas leoninas” que ponen a la gente contra la pared.
Zamora, por su parte, enfatizó que esta iniciativa pretende facilitar el acceso al crédito para aquellos que necesitan salir adelante. Quieren otorgar facilidades para que la gente pueda regularizar su situación financiera y volver a construir su historial crediticio. No se trata de una condonación, insistieron ambos, sino de brindar herramientas para que las personas puedan cumplir con sus obligaciones y recuperar su estabilidad económica. Piensen en todas esas familias que llevan años sufriendo por culpa de una pequeña deuda… ¡esta puede ser una luz al final del túnel!
Según estimaciones, alrededor de 850.000 personas en Costa Rica tienen expedientes judiciales por cobro administrativo. Esta iniciativa podría beneficiar a muchísimas familias, permitiéndoles acceder a créditos hipotecarios, automotrices o incluso personales. Sería un golpe significativo a la pobreza y la desigualdad, y una muestra de que el gobierno puede estar al servicio de la gente, en lugar de privilegiar a unos pocos. Y ojo, que esto no es magia; requiere voluntad política y una gestión transparente.
Definitivamente, el respaldo de Campos a Zamora y la propuesta del “Nuevo Chance” abren un nuevo capítulo en la contienda electoral. Pero me pregunto... ¿realmente estas promesas llegarán a buen término, o caeremos en otro ciclo de falsas expectativas y decepciones? ¿Creen que esta unión entre Campos y Zamora realmente representa un cambio genuino, o es simplemente una estrategia política más para ganar votos?