¡Ay, Dios mío! Esto sí que está feo, parce. La Fiscalía contra la Ciberdelincuencia ha lanzado una alerta que nos debería hacer sudar frío a todos los que tenemos cuenta en el banco. Resulta que hay unos pillos muy listos aprovechándose de que dejamos números de teléfono olvidados ahí dando vueltas, y los están usando para robarle directamente a la gente.
Parece mentira, pero es verdad. Según explican los expertos, estos tipos buscan números que ya no usamos, pero que siguen pegados a nuestras cuentas bancarias. Con eso, le dan un manotazo al SINPE comando PASE, ¿se imaginan? Y listo, empiezan a transferir varitas de plata a sus propias cuentas. Qué poca vergüenza, diay. Menos mal que nos avisan antes de que nos agarren con las manos en la miel.
Y ni hablar de los descuidos que cometemos, parce. Uno piensa “ah, este número ya no lo necesito”, lo deja botado y ¡zas!, llega un vándalo y se lo aprovecha. El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) ya había dado la lata hace semanas sobre esto mismo, advirtiendo que estas prácticas eran un peligro latente. Pero parece que algunos no le prestamos atención, y ahora estamos pagando las consecuencias, ¿no?
Recientemente agarraron a una familia entera, ¡una torta! Al parecer, estaban dedicados a robarle a la gente de esta forma, moviendo unos 15 millones de colones entre todos. Que les den duro, díganles a estos pillos que en Costa Rica no somos tan bobos como para dejarnos timar así. El OIJ andaba rastreando los movimientos y pincharon a estos señores justo a tiempo.
Lo peor de todo es que la Fiscalía recalca que el problema no es solo de las empresas de telefonía, sino también nuestro. Si no actualizamos nuestros datos en el banco, estamos facilitándole el brete a los delincuentes. Vamos, que si dejas un chunche viejo asociado a tu cuenta, estás prácticamente regalándole la llave a cualquier ladrón cibernético que pase por allá.
Entonces, ¿qué deberíamos estar haciendo nosotros? Pues revisar urgentemente qué números de teléfono tenemos asociados a nuestras cuentas bancarias, desconectarlos si ya no los necesitamos, y reportar cualquier transacción sospechosa a nuestro banco y al Ministerio Público. ¡No nos hagamos los dormidos, parce! Más vale prevenir que lamentar, como dice mi abuita.
Este tema nos demuestra que la seguridad digital es algo serio y que no podemos tomarlo a broma. El Ministerio Público promete seguir combatiendo la ciberdelincuencia con uñas y dientes, pero también nos recuerdan que nuestra primera línea de defensa somos nosotros mismos. Tenemos que ser responsables y proactivos en proteger nuestros ahorros y datos personales.
Ahora bien, me pregunto… ¿cree usted que los bancos deberían tener la obligación legal de contactar activamente a los clientes cuyos números de teléfono estén asociados a cuentas inactivas, para confirmar si aún los están utilizando? ¿Sería una medida efectiva para evitar estos robos, o sería una invasión a nuestra privacidad? Dejenme saber su opinión en los comentarios!
Parece mentira, pero es verdad. Según explican los expertos, estos tipos buscan números que ya no usamos, pero que siguen pegados a nuestras cuentas bancarias. Con eso, le dan un manotazo al SINPE comando PASE, ¿se imaginan? Y listo, empiezan a transferir varitas de plata a sus propias cuentas. Qué poca vergüenza, diay. Menos mal que nos avisan antes de que nos agarren con las manos en la miel.
Y ni hablar de los descuidos que cometemos, parce. Uno piensa “ah, este número ya no lo necesito”, lo deja botado y ¡zas!, llega un vándalo y se lo aprovecha. El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) ya había dado la lata hace semanas sobre esto mismo, advirtiendo que estas prácticas eran un peligro latente. Pero parece que algunos no le prestamos atención, y ahora estamos pagando las consecuencias, ¿no?
Recientemente agarraron a una familia entera, ¡una torta! Al parecer, estaban dedicados a robarle a la gente de esta forma, moviendo unos 15 millones de colones entre todos. Que les den duro, díganles a estos pillos que en Costa Rica no somos tan bobos como para dejarnos timar así. El OIJ andaba rastreando los movimientos y pincharon a estos señores justo a tiempo.
Lo peor de todo es que la Fiscalía recalca que el problema no es solo de las empresas de telefonía, sino también nuestro. Si no actualizamos nuestros datos en el banco, estamos facilitándole el brete a los delincuentes. Vamos, que si dejas un chunche viejo asociado a tu cuenta, estás prácticamente regalándole la llave a cualquier ladrón cibernético que pase por allá.
Entonces, ¿qué deberíamos estar haciendo nosotros? Pues revisar urgentemente qué números de teléfono tenemos asociados a nuestras cuentas bancarias, desconectarlos si ya no los necesitamos, y reportar cualquier transacción sospechosa a nuestro banco y al Ministerio Público. ¡No nos hagamos los dormidos, parce! Más vale prevenir que lamentar, como dice mi abuita.
Este tema nos demuestra que la seguridad digital es algo serio y que no podemos tomarlo a broma. El Ministerio Público promete seguir combatiendo la ciberdelincuencia con uñas y dientes, pero también nos recuerdan que nuestra primera línea de defensa somos nosotros mismos. Tenemos que ser responsables y proactivos en proteger nuestros ahorros y datos personales.
Ahora bien, me pregunto… ¿cree usted que los bancos deberían tener la obligación legal de contactar activamente a los clientes cuyos números de teléfono estén asociados a cuentas inactivas, para confirmar si aún los están utilizando? ¿Sería una medida efectiva para evitar estos robos, o sería una invasión a nuestra privacidad? Dejenme saber su opinión en los comentarios!
