¡Ay, Dios mío, qué bronca! Parece que estamos metidos en un buen aprieto aquí en Costa Rica. Los hospitales, especialmente el Rafael Ángel Calderón Guardia, andan patéticos buscando sangre como loco. La situación ya no da más pa’regodearse y desde la CCSS nos están echando la mano, pidiendo a todos los ticos que donemos este líquido vital. Ya saben, si no hacemos algo pronto, esto podría irse al traste.
Tania Jiménez Umaña, la directora del Calderón, está desesperada, la muchacha parece que no duerme. Ha lanzado un llamado urgente a la solidaridad nacional, porque la reserva de sangre está peligrosamente baja. Según ella, esto pone en peligro las cirugías programadas, los casos de emergencia que aparecen de repente y hasta los trasplantes, que son cosas muy serias, imagínense. ¡Qué vara tan pesada!
Pero no todo está perdido, mae. Aquí viene la buena noticia: un solo donante puede ayudar hasta a tres personas con una sola donación. Sí, así es. De cada bolsa, sacan cuatro componentes diferentes: glóbulos rojos, plasma, plaquetas y crioprecipitados. ¡Imagínate el impacto! Estos componentes se usan para tratar a gente con problemas graves, desde accidentes terribles hasta pacientes con cáncer o quemaduras complicadas. Es como si dieras vida a varias personas con un simple gesto.
Y para que nadie tenga excusa, la CCSS ha puesto todas las cartas sobre la mesa con los requisitos básicos. Necesitas tener entre 18 y 65 años, estar saludable, pesar más de 52 kilos y medir al menos 1 metro 50. Llévale tu cédula, asegúrate de estar bien hidratado y no te bebas ni una cervecita en las últimas 24 horas. Si tienes tatuajes recientes o has salido del dentista, hay que esperar un poquito también. Lo importante es llegar con el estómago lleno, con frutas, galletas, o pan con mermelada – un desayunito ligero, ¡pero sabroso!
Ahora sí, fíjense los horarios. En el Calderón, puedes ir de lunes a jueves de 6:30 am a 5:30 pm, los viernes hasta las 4:30 pm y los fines de semana hasta las 5:30 pm. El Hospital San Juan de Dios abre de 7:00 am a 4:00 pm de lunes a viernes y los sábados hasta las 3:00 pm. También tienen WhatsApp para cualquier consulta: 8803-4245. El Hospital México es aún más accesible, abierto incluso los feriados, de 7:00 am a 12:30 pm. Y si prefieres el Banco Nacional de Sangre, ellos atienden de lunes a jueves de 7:00 am a 3:30 pm.
«La donación de sangre es un acto voluntario, seguro y solidario», recalcó la directora Jiménez. “Invitamos a toda la población a acercarse al banco de sangre y convertirse en héroes anónimos para quienes hoy más lo necesitan”. ¡Digo, amén! Es verdad, a veces olvidamos el poder que tenemos de hacer el bien, simplemente compartiendo un poco de nosotros mismos. No cuesta nada y puede significar la diferencia entre la vida y la muerte para alguien. Que chévere sería que todos nos animáramos a aportar nuestro granito de arena.
Además, piensen en esto: la tecnología avanza, la medicina mejora, pero algunas cosas siguen siendo esenciales, como la sangre. No podemos depender solamente de avances científicos; necesitamos la colaboración de todos. La solidaridad es nuestra mayor fortaleza, y ahora toca demostrarla ante esta emergencia. Venga, ticos, ¡a poner manos a la obra y llenar esos bancos de sangre!
Con tantas urgencias médicas y la creciente demanda de transfusiones, ¿cree usted que debería implementarse algún incentivo para fomentar la donación regular de sangre, como días libres pagados o descuentos en servicios públicos? Déjeme saber su opinión en los comentarios.
Tania Jiménez Umaña, la directora del Calderón, está desesperada, la muchacha parece que no duerme. Ha lanzado un llamado urgente a la solidaridad nacional, porque la reserva de sangre está peligrosamente baja. Según ella, esto pone en peligro las cirugías programadas, los casos de emergencia que aparecen de repente y hasta los trasplantes, que son cosas muy serias, imagínense. ¡Qué vara tan pesada!
Pero no todo está perdido, mae. Aquí viene la buena noticia: un solo donante puede ayudar hasta a tres personas con una sola donación. Sí, así es. De cada bolsa, sacan cuatro componentes diferentes: glóbulos rojos, plasma, plaquetas y crioprecipitados. ¡Imagínate el impacto! Estos componentes se usan para tratar a gente con problemas graves, desde accidentes terribles hasta pacientes con cáncer o quemaduras complicadas. Es como si dieras vida a varias personas con un simple gesto.
Y para que nadie tenga excusa, la CCSS ha puesto todas las cartas sobre la mesa con los requisitos básicos. Necesitas tener entre 18 y 65 años, estar saludable, pesar más de 52 kilos y medir al menos 1 metro 50. Llévale tu cédula, asegúrate de estar bien hidratado y no te bebas ni una cervecita en las últimas 24 horas. Si tienes tatuajes recientes o has salido del dentista, hay que esperar un poquito también. Lo importante es llegar con el estómago lleno, con frutas, galletas, o pan con mermelada – un desayunito ligero, ¡pero sabroso!
Ahora sí, fíjense los horarios. En el Calderón, puedes ir de lunes a jueves de 6:30 am a 5:30 pm, los viernes hasta las 4:30 pm y los fines de semana hasta las 5:30 pm. El Hospital San Juan de Dios abre de 7:00 am a 4:00 pm de lunes a viernes y los sábados hasta las 3:00 pm. También tienen WhatsApp para cualquier consulta: 8803-4245. El Hospital México es aún más accesible, abierto incluso los feriados, de 7:00 am a 12:30 pm. Y si prefieres el Banco Nacional de Sangre, ellos atienden de lunes a jueves de 7:00 am a 3:30 pm.
«La donación de sangre es un acto voluntario, seguro y solidario», recalcó la directora Jiménez. “Invitamos a toda la población a acercarse al banco de sangre y convertirse en héroes anónimos para quienes hoy más lo necesitan”. ¡Digo, amén! Es verdad, a veces olvidamos el poder que tenemos de hacer el bien, simplemente compartiendo un poco de nosotros mismos. No cuesta nada y puede significar la diferencia entre la vida y la muerte para alguien. Que chévere sería que todos nos animáramos a aportar nuestro granito de arena.
Además, piensen en esto: la tecnología avanza, la medicina mejora, pero algunas cosas siguen siendo esenciales, como la sangre. No podemos depender solamente de avances científicos; necesitamos la colaboración de todos. La solidaridad es nuestra mayor fortaleza, y ahora toca demostrarla ante esta emergencia. Venga, ticos, ¡a poner manos a la obra y llenar esos bancos de sangre!
Con tantas urgencias médicas y la creciente demanda de transfusiones, ¿cree usted que debería implementarse algún incentivo para fomentar la donación regular de sangre, como días libres pagados o descuentos en servicios públicos? Déjeme saber su opinión en los comentarios.
