Tengo varios días de estar sola en mi casa. Así que coordiné con mi ligue para vernos en esos días. Decidimos que iba a ser el viernes, dado que hay menos cosas que hacer el sábado. Él llegó tipo 9. Aprovechamos para comer y hablar.
Unas noches atrás, él había venido y dejó un cigarro, así que aprovechó para fumarselo. Fuimos a un pasillo, tipo balcón, para que el humo no quedara dentro de la casa. Ese pasillo, da a la calle principal y tiene ventanas con celosías. Ambos estábamos ahí hablando mientras él fumaba. Al otro lado de la calle, hay otra casa con balcón y había una pareja tomando birra.
Una vez que se fumó el cigarro, me jaló de la cintura hacia él para besarme, ambos estábamos de pie y nuestros cuerpos estaban pegaditos. Ambos sabíamos lo que iba a suceder, así que nos besamos apasionadamente, él me agarraba de las nalgas y me empujaba hacia él, mientras yo le metía mis manos debajo de su camisa y tocaba su pene sobre su pantalón. Estuvimos como 3-4 minutos así y yo no sabía si él iba a hacer algo, así que empecé a soltarle la faja y desabrochar el pantalón. Ahí sí se motivó e hizo lo mismo. Ambos nos tocábamos uno al otro. Él tenía su pene húmedo, yo estaba súper mojada. Aproveché para bajarle su pantalón y boxer, para poder masturbarlo mejor.
Él me quitó la blusa y mi brasier, me besó mis pezones, mientras yo seguía estimulandolo. Posteriormente me bajó el pantalón y mi hilo, se puso de rodillas y me empezó a dar aquel sexo oral. Yo tenía una de mis piernas encima de sus hombros, él me agarraba mis senos, yo lo sujetaba de su cabeza. Era inevitable gemir de lo rico que lo hacía y en cuestión de minutos me vine en su boca. Él siguió chupandome. Luego se levantó, me puso contra la pared donde están las ventanas y me penetró completamente.
Me cogió súper fuerte, creo que perfectamente los vecinos del frente podían escucharnos, pero nada de eso importó. Luego me puso de frente, subí una de mis piernas a la altura de su cintura y otra vez me penetró fuertemente, sin embargo no tuvimos tanto éxito porque se salía constantemente. Así que él paró, yo me agache y me comí su delicioso pene, él me agarraba del pelo e incluso hacía movimientos de cadera. Luego me levanté, me dio la vuelta y me volvió a penetrar de espaldas. En un momento paró y me agarró del brazo para llevarme a mi cuarto.
Me puso a un costado de la cama, de pie pero apoyada sobre la cama (similar a estar de 4) me penetró profundamente, no sé cuánto tiempo duramos, quizás 30-40 pero hicimos varias posiciones, ambos sudamos chorros. Extrañamente él puede aguantar un montón y a mí me excita tanto que no dejo de lubricar, cosa muy poco común en mí. Estando en posición de misionero, yo me auto estimulé mi clítoris mientras me penetraba y tuve otro orgasmo. Él nada. Incluso ya estaba un poco cansada.
Cada vez que tengo un orgasmo, él me chupa la vulva, así fue esta vez y luego me dio vuelta, porque quería chupar mi culo. Así que lo hizo aproximadamente por 5 minutos, luego se puso encima de mí y empezó a pasarme su pene entre las nalgas. Humedecía su pene en mi vagina y lo deslizaba en mis nalgas, incluso hacia intentos de penetrarme analmente, pero ya habíamos hablado de ese tema.
Luego me puso de lado, él estaba detrás de mí, tipo cucharita. Me penetraba vaginalmente y metía uno de sus dedos en mi culo. Poco a poco me fui excitando más y me movía de atrás hacia adelante para mayor y mejor placer. Él gemía y me decía que estaba moviéndome muy rico. Luego, volvía a pasar su pene entre mis nalgas, buscando mi culito, sólo que no lo encontraba.
Así que a como pude, se lo agarré de su base y lo coloqué justamente en el lugar que tanto estaba buscando, mientras hacía movimientos lentos para que entrara poco a poco. La primera vez se quitó. Supongo que tenía miedo por nuestra conversación en la que teníamos un “acuerdo" sobre eso, pero la verdad es que yo también quería intentarlo con él, tenía mucho tiempo sin hacerlo; así que volví a agarrar su pene y lo fui metiendo poco a poco, conforme él entraba en “confianza”, empezó a moverse, hasta que lo tenía todo completamente adentro, una vez sucedido eso, me embistió tan rico, ni lento ni rápido y en cuestión de 3 min o menos, se regó. Fue tan espectacular, que él tembló, como si tuviera un calambre o no sé, mientras gemía tan rico.
Fue una noche tan placentera, que solo recordarlo y escribirlo me hizo mojarme toda
Mensaje que me envió luego:
Uuuuyyyy mamacita. ¿Qué no me hizo? Primero me puso como loco en ese pasillo, fue algo emocionante. Ummm me chupó riiiico Casi me vengo ahí mismo, sólo que quería cogerte más. Y luego todo lo que me puso hacer con ese culito mío 
Me excitó demasiado y me sacó la leche rico. Así lo sentí, usted vio la forma como me puse... Como si me electrocutara... 
Unas noches atrás, él había venido y dejó un cigarro, así que aprovechó para fumarselo. Fuimos a un pasillo, tipo balcón, para que el humo no quedara dentro de la casa. Ese pasillo, da a la calle principal y tiene ventanas con celosías. Ambos estábamos ahí hablando mientras él fumaba. Al otro lado de la calle, hay otra casa con balcón y había una pareja tomando birra.
Una vez que se fumó el cigarro, me jaló de la cintura hacia él para besarme, ambos estábamos de pie y nuestros cuerpos estaban pegaditos. Ambos sabíamos lo que iba a suceder, así que nos besamos apasionadamente, él me agarraba de las nalgas y me empujaba hacia él, mientras yo le metía mis manos debajo de su camisa y tocaba su pene sobre su pantalón. Estuvimos como 3-4 minutos así y yo no sabía si él iba a hacer algo, así que empecé a soltarle la faja y desabrochar el pantalón. Ahí sí se motivó e hizo lo mismo. Ambos nos tocábamos uno al otro. Él tenía su pene húmedo, yo estaba súper mojada. Aproveché para bajarle su pantalón y boxer, para poder masturbarlo mejor.
Él me quitó la blusa y mi brasier, me besó mis pezones, mientras yo seguía estimulandolo. Posteriormente me bajó el pantalón y mi hilo, se puso de rodillas y me empezó a dar aquel sexo oral. Yo tenía una de mis piernas encima de sus hombros, él me agarraba mis senos, yo lo sujetaba de su cabeza. Era inevitable gemir de lo rico que lo hacía y en cuestión de minutos me vine en su boca. Él siguió chupandome. Luego se levantó, me puso contra la pared donde están las ventanas y me penetró completamente.
Me cogió súper fuerte, creo que perfectamente los vecinos del frente podían escucharnos, pero nada de eso importó. Luego me puso de frente, subí una de mis piernas a la altura de su cintura y otra vez me penetró fuertemente, sin embargo no tuvimos tanto éxito porque se salía constantemente. Así que él paró, yo me agache y me comí su delicioso pene, él me agarraba del pelo e incluso hacía movimientos de cadera. Luego me levanté, me dio la vuelta y me volvió a penetrar de espaldas. En un momento paró y me agarró del brazo para llevarme a mi cuarto.
Me puso a un costado de la cama, de pie pero apoyada sobre la cama (similar a estar de 4) me penetró profundamente, no sé cuánto tiempo duramos, quizás 30-40 pero hicimos varias posiciones, ambos sudamos chorros. Extrañamente él puede aguantar un montón y a mí me excita tanto que no dejo de lubricar, cosa muy poco común en mí. Estando en posición de misionero, yo me auto estimulé mi clítoris mientras me penetraba y tuve otro orgasmo. Él nada. Incluso ya estaba un poco cansada.
Cada vez que tengo un orgasmo, él me chupa la vulva, así fue esta vez y luego me dio vuelta, porque quería chupar mi culo. Así que lo hizo aproximadamente por 5 minutos, luego se puso encima de mí y empezó a pasarme su pene entre las nalgas. Humedecía su pene en mi vagina y lo deslizaba en mis nalgas, incluso hacia intentos de penetrarme analmente, pero ya habíamos hablado de ese tema.
Luego me puso de lado, él estaba detrás de mí, tipo cucharita. Me penetraba vaginalmente y metía uno de sus dedos en mi culo. Poco a poco me fui excitando más y me movía de atrás hacia adelante para mayor y mejor placer. Él gemía y me decía que estaba moviéndome muy rico. Luego, volvía a pasar su pene entre mis nalgas, buscando mi culito, sólo que no lo encontraba.
Así que a como pude, se lo agarré de su base y lo coloqué justamente en el lugar que tanto estaba buscando, mientras hacía movimientos lentos para que entrara poco a poco. La primera vez se quitó. Supongo que tenía miedo por nuestra conversación en la que teníamos un “acuerdo" sobre eso, pero la verdad es que yo también quería intentarlo con él, tenía mucho tiempo sin hacerlo; así que volví a agarrar su pene y lo fui metiendo poco a poco, conforme él entraba en “confianza”, empezó a moverse, hasta que lo tenía todo completamente adentro, una vez sucedido eso, me embistió tan rico, ni lento ni rápido y en cuestión de 3 min o menos, se regó. Fue tan espectacular, que él tembló, como si tuviera un calambre o no sé, mientras gemía tan rico.
Fue una noche tan placentera, que solo recordarlo y escribirlo me hizo mojarme toda
Mensaje que me envió luego:
Uuuuyyyy mamacita. ¿Qué no me hizo? Primero me puso como loco en ese pasillo, fue algo emocionante. Ummm me chupó riiiico
Casi me vengo ahí mismo, sólo que quería cogerte más. Y luego todo lo que me puso hacer con ese culito mío Me excitó demasiado y me sacó la leche rico. Así lo sentí, usted vio la forma como me puse... Como si me electrocutara... 
