¡Aguántense!, porque esto sí que es chiva. Más de medio centenar de mentes creativas del mundo de la arquitectura se juntaron este viernes en Café Mundo para un encuentro que promete sacudirle el polvo a la tradición. Se trata del primer Encuentro de Arquitectos/as – Vivencias, Cambio e Integración, organizado por el colectivo Aula Abierta, y créanme, la vibra era distinta a cualquier otro evento formal que hayamos visto por estos lados.
Durante años, los eventos de arquitectura han sido, digámoslo así, un poquito aburridos. Largas conferencias llenas de tecnicismos incomprensibles para el plebeyo, café aguado y sandwiches secos… ¡ufff! Pero Aula Abierta llegó para cambiar eso, buscando un espacio donde los arquitectos pudieran conectar de manera genuina, intercambiar ideas y construir relaciones que vayan más allá de la planilla y los planos.
En el encuentro, figuras veteranas como el reconocido Hernán Jiménez Fonseca, creador del icónico CFIA, compartieron anécdotas y aprendizajes con profesionales de mediana trayectoria y jóvenes promesas. También tuvimos la presencia de Víctor Cañas, un nombre que resuena con fuerza en la arquitectura latinoamericana, y de Edgar Brenes, pionero en la formación de arquitectos en la UCR. Imagínense la riqueza de conocimientos que debió haber fluido entre esos tres colosos.
Pero no todo fue charla de viejos. El evento también sirvió para presentar oficialmente a Aula Abierta, un colectivo que nace con la firme intención de darle visibilidad a la arquitectura en Costa Rica. Buscan mostrar cómo la arquitectura impacta directamente en nuestras vidas, desde el diseño de nuestros hogares hasta la planificación de nuestras ciudades. ¡Y vaya que necesitamos más gente que le ponga atención a eso!
Uno de los puntos álgidos del encuentro fue la exhibición de nuevos materiales, proyectos innovadores y propuestas vanguardistas. Se habló de sostenibilidad, de eficiencia energética, de cómo integrar la naturaleza en el entorno urbano. Hubo ideas frescas que denotan un cambio importante en la mentalidad de muchos arquitectos, enfocándose en soluciones prácticas y adaptadas a la realidad costarricense, lejos de imitar ciegamente tendencias extranjeras.
La elección de Café Mundo como sede no fue casualidad. Además de ser un lugar emblemático por su valor patrimonial, el restaurante pertenece a un arquitecto apasionado por la conservación del legado cultural de nuestro país. Esa conexión con la historia y la identidad nacional añadió un toque especial a la jornada, demostrando que la arquitectura va mucho más allá de levantar paredes y techos.
La colaboración de Unicom Starker también fue clave para el éxito del evento. Su apoyo no solo facilitó la organización, sino que reafirma su compromiso con la cultura arquitectónica de Costa Rica. Unicom ha entendido que invertir en la creatividad y la innovación es fundamental para construir un futuro más próspero y sostenible para todos nosotros, dejando atrás la idea de ser solamente proveedores de materiales.
Con este encuentro, Aula Abierta sentó las bases para convertirse en un punto de referencia para profesionales y amantes del diseño en Costa Rica. Pero me pregunto, ¿cree usted que esta iniciativa marcará el inicio de una nueva era en la arquitectura nacional, una era más colaborativa, inclusiva y comprometida con el bienestar social?, ¡Déjeme sus opiniones en el foro!
Durante años, los eventos de arquitectura han sido, digámoslo así, un poquito aburridos. Largas conferencias llenas de tecnicismos incomprensibles para el plebeyo, café aguado y sandwiches secos… ¡ufff! Pero Aula Abierta llegó para cambiar eso, buscando un espacio donde los arquitectos pudieran conectar de manera genuina, intercambiar ideas y construir relaciones que vayan más allá de la planilla y los planos.
En el encuentro, figuras veteranas como el reconocido Hernán Jiménez Fonseca, creador del icónico CFIA, compartieron anécdotas y aprendizajes con profesionales de mediana trayectoria y jóvenes promesas. También tuvimos la presencia de Víctor Cañas, un nombre que resuena con fuerza en la arquitectura latinoamericana, y de Edgar Brenes, pionero en la formación de arquitectos en la UCR. Imagínense la riqueza de conocimientos que debió haber fluido entre esos tres colosos.
Pero no todo fue charla de viejos. El evento también sirvió para presentar oficialmente a Aula Abierta, un colectivo que nace con la firme intención de darle visibilidad a la arquitectura en Costa Rica. Buscan mostrar cómo la arquitectura impacta directamente en nuestras vidas, desde el diseño de nuestros hogares hasta la planificación de nuestras ciudades. ¡Y vaya que necesitamos más gente que le ponga atención a eso!
Uno de los puntos álgidos del encuentro fue la exhibición de nuevos materiales, proyectos innovadores y propuestas vanguardistas. Se habló de sostenibilidad, de eficiencia energética, de cómo integrar la naturaleza en el entorno urbano. Hubo ideas frescas que denotan un cambio importante en la mentalidad de muchos arquitectos, enfocándose en soluciones prácticas y adaptadas a la realidad costarricense, lejos de imitar ciegamente tendencias extranjeras.
La elección de Café Mundo como sede no fue casualidad. Además de ser un lugar emblemático por su valor patrimonial, el restaurante pertenece a un arquitecto apasionado por la conservación del legado cultural de nuestro país. Esa conexión con la historia y la identidad nacional añadió un toque especial a la jornada, demostrando que la arquitectura va mucho más allá de levantar paredes y techos.
La colaboración de Unicom Starker también fue clave para el éxito del evento. Su apoyo no solo facilitó la organización, sino que reafirma su compromiso con la cultura arquitectónica de Costa Rica. Unicom ha entendido que invertir en la creatividad y la innovación es fundamental para construir un futuro más próspero y sostenible para todos nosotros, dejando atrás la idea de ser solamente proveedores de materiales.
Con este encuentro, Aula Abierta sentó las bases para convertirse en un punto de referencia para profesionales y amantes del diseño en Costa Rica. Pero me pregunto, ¿cree usted que esta iniciativa marcará el inicio de una nueva era en la arquitectura nacional, una era más colaborativa, inclusiva y comprometida con el bienestar social?, ¡Déjeme sus opiniones en el foro!