¡Pero qué vaina, raza! Resulta que la presidenta de la CCSS, Mónica Taylor, tuvo que irse a Malasia por casi dos semanas y parece que el coso le salió bastante caro: ¡casi trece mil dólares! Y eso sin contar que, según dicen, ni siquiera pidió permiso a la Junta Directiva. ¡Imagínate el brete!
Los diputados de la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea Legislativa ya pusieron el grito en el cielo y la llamaron a dar explicaciones. Fue gracias a una moción presentada por la diputada Andrea Álvarez del PLN que esto salió a la luz. Parece que el viaje, aunque aprobado por la Presidencia de la República, debió pasar primero por la Junta Directiva, como bien señaló la exdirectiva Martha Rodríguez; pues Mónica, siendo funcionaria de la CCSS, tenía que seguir los protocolos.
Y ojo, que no fue sola. La acompañó Juan Carlos Esquivel, jefe del Centro de Desarrollo Estratégico e Información en Salud y Seguridad Social (Cendeisss). Los boletos costaron la friolera de ocho mil setecientos cincuenta y nueve dólares, y además, a cada uno le dieron dos mil ciento veintinueve dólares en viáticos. ¡Un buen churro, vamos! Dicen que fue para participar en el Foro Mundial de Seguridad Social de la Asociación Internacional de Seguridad Social (AISS), una vara en la que Costa Rica participa desde hace más de setenta años.
Lo que realmente hizo ruido es que enviaron a Taylor, una señora que apenas hace unos meses dejó Casa Presidencial como asesora legal y que, según algunos, no tiene mucha experiencia en temas de salud y seguridad social. ¡Parece que le estaban dando la vara equivocada a quien hacía el trabajo! Algunos comentan que podría haber habido otras opciones más preparadas para representar al país en ese foro internacional, pero bueno, ahí les quedó a ellos.
Pero eso no es todo, porque también se niegan a transmitir las sesiones de la Junta Directiva. Precisamente, la semana pasada, Mónica se negó a mostrar por qué se había ido del país, generando aún más sospechas. Ahora tendrá que comparecer ante los legisladores y aclarar toda esta vaina, aunque todavía no saben cuándo será la cita.
Y como si fuera poco, los diputados también convocaron a la Ministra de Salud, Mary Munive, por la polémica derogatoria de la norma técnica sobre el aborto terapéutico. ¡Uf, vaya semana tienen nuestros representantes! Se ve que hay mucho quehacer y muchos temas espinosos que resolver. Esta va a estar interesante.
Muchos se preguntan si todo esto es simplemente un ajuste de cuentas políticos entre la Presidente y la Junta Directiva, o si realmente hay algo turbio detrás de este viaje. Las redes sociales están que arden con memes y comentarios sarcásticos, mientras que otros defienden a Taylor argumentando que solo estaba cumpliendo con su deber representando al país. ¡Esto ya es un circo mediático, diay!
Con tanto movimiento político y tantos cuestionamientos, me pregunto, ¿creen ustedes que la Presidenta Taylor debería renunciar a su puesto en la CCSS, o que deberían darle la oportunidad de demostrar su inocencia frente a los diputados? Déjenme saber su opinión en los comentarios, ¡quiero leerlos!
Los diputados de la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea Legislativa ya pusieron el grito en el cielo y la llamaron a dar explicaciones. Fue gracias a una moción presentada por la diputada Andrea Álvarez del PLN que esto salió a la luz. Parece que el viaje, aunque aprobado por la Presidencia de la República, debió pasar primero por la Junta Directiva, como bien señaló la exdirectiva Martha Rodríguez; pues Mónica, siendo funcionaria de la CCSS, tenía que seguir los protocolos.
Y ojo, que no fue sola. La acompañó Juan Carlos Esquivel, jefe del Centro de Desarrollo Estratégico e Información en Salud y Seguridad Social (Cendeisss). Los boletos costaron la friolera de ocho mil setecientos cincuenta y nueve dólares, y además, a cada uno le dieron dos mil ciento veintinueve dólares en viáticos. ¡Un buen churro, vamos! Dicen que fue para participar en el Foro Mundial de Seguridad Social de la Asociación Internacional de Seguridad Social (AISS), una vara en la que Costa Rica participa desde hace más de setenta años.
Lo que realmente hizo ruido es que enviaron a Taylor, una señora que apenas hace unos meses dejó Casa Presidencial como asesora legal y que, según algunos, no tiene mucha experiencia en temas de salud y seguridad social. ¡Parece que le estaban dando la vara equivocada a quien hacía el trabajo! Algunos comentan que podría haber habido otras opciones más preparadas para representar al país en ese foro internacional, pero bueno, ahí les quedó a ellos.
Pero eso no es todo, porque también se niegan a transmitir las sesiones de la Junta Directiva. Precisamente, la semana pasada, Mónica se negó a mostrar por qué se había ido del país, generando aún más sospechas. Ahora tendrá que comparecer ante los legisladores y aclarar toda esta vaina, aunque todavía no saben cuándo será la cita.
Y como si fuera poco, los diputados también convocaron a la Ministra de Salud, Mary Munive, por la polémica derogatoria de la norma técnica sobre el aborto terapéutico. ¡Uf, vaya semana tienen nuestros representantes! Se ve que hay mucho quehacer y muchos temas espinosos que resolver. Esta va a estar interesante.
Muchos se preguntan si todo esto es simplemente un ajuste de cuentas políticos entre la Presidente y la Junta Directiva, o si realmente hay algo turbio detrás de este viaje. Las redes sociales están que arden con memes y comentarios sarcásticos, mientras que otros defienden a Taylor argumentando que solo estaba cumpliendo con su deber representando al país. ¡Esto ya es un circo mediático, diay!
Con tanto movimiento político y tantos cuestionamientos, me pregunto, ¿creen ustedes que la Presidenta Taylor debería renunciar a su puesto en la CCSS, o que deberían darle la oportunidad de demostrar su inocencia frente a los diputados? Déjenme saber su opinión en los comentarios, ¡quiero leerlos!
