¡Ay, Dios mío! Este caso del bebé encontrado en Hatillo sigue dando que hablar y nos pone el alma en vilo. El pequeño, que salió adelante gracias a la rápida respuesta de nuestros oficiales de la Fuerza Pública, sigue internado en el Hospital Nacional de Niños, pero parece que va agarrándole ritmo, dicen los médicos.
Según Carlos Jiménez, el director del hospital, el bebé está evolucionando de maravilla, aunque todavía no tienen claro cuándo podrá salir del hospi. No se trata tanto de un problema médico grave, sino más bien de definir cómo va a seguir su vida, qué le toca ahora. La vara social es la que está complicada, porque encontrarle un hogar seguro y estable es primordial.
Y es que, díganlo conmigo, esto es triste a pedir gritos. Imagínense dejar a un bebé indefenso así, en medio de un basurero… ¡Qué torta! La policía que lo rescató, según cuentan, hasta se le rompió el corazón. Se sintió muy afectado viendo la situación tan desesperada en la que estaba el nene, necesitando cariño y alimento urgente. Ese oficial, con toda la razón del mundo, se puso a calentarlo contra su pecho hasta llegar al hospital, ¡ese mae hizo historia!
Pero no es el único caso que nos preocupa. El PANI (Patronato Nacional de la Infancia), ya lleva dos casos más de bebés abandonados este año. Ahí tenemos a la bebita que encontraron metida en una bolsa plástica en Heredia, quien afortunadamente está en un hogar familiar temporal, y al niño de Liberia, que también está bajo cuidado protector y esperando a que se declare formalmente su abandono. ¡Qué pena ajena!
Estos casos nos obligan a reflexionar sobre la responsabilidad parental y las redes de apoyo disponibles para las mamás que atraviesan dificultades. Hay programas sociales, hay organizaciones que ofrecen ayuda, pero muchas veces las personas no saben dónde recurrir o se sienten avergonzadas de pedirla. Necesitamos crear una cultura donde buscar ayuda no sea visto como un fracaso, sino como una muestra de valentía.
Desde el PANI aseguran que cuentan con recursos de acogimiento familiar listos para recibir al bebé de Hatillo en cuanto reciba el alta médica y el informe de Trabajo Social del hospital. Está abierto el Proceso Especial de Protección, investigando con lupa el entorno familiar y trabajando codo a codo con el OIJ y la Fiscalía para identificar a los padres y esclarecer las causas que llevaron a este terrible abandono. ¡Vamos a ver si logran resolver este brete!
Este incidente, además de conmovernos profundamente, nos recuerda la importancia de estar atentos a nuestro alrededor. Vecinos vigilantes, comunidades solidarias… todos podemos contribuir a proteger a los niños más vulnerables de nuestra sociedad. Un abrazo a esos funcionarios públicos que trabajan incansablemente por el bienestar de nuestros pequeños; ¡ustedes son unos cargas!
Y ahora la pregunta para el foro: ¿Qué medidas creen ustedes que debería tomar el gobierno para prevenir estos casos de abandono infantil y fortalecer el apoyo a las familias en riesgo? ¿Ustedes se animarían a acoger a un niño en situación vulnerable?
Según Carlos Jiménez, el director del hospital, el bebé está evolucionando de maravilla, aunque todavía no tienen claro cuándo podrá salir del hospi. No se trata tanto de un problema médico grave, sino más bien de definir cómo va a seguir su vida, qué le toca ahora. La vara social es la que está complicada, porque encontrarle un hogar seguro y estable es primordial.
Y es que, díganlo conmigo, esto es triste a pedir gritos. Imagínense dejar a un bebé indefenso así, en medio de un basurero… ¡Qué torta! La policía que lo rescató, según cuentan, hasta se le rompió el corazón. Se sintió muy afectado viendo la situación tan desesperada en la que estaba el nene, necesitando cariño y alimento urgente. Ese oficial, con toda la razón del mundo, se puso a calentarlo contra su pecho hasta llegar al hospital, ¡ese mae hizo historia!
Pero no es el único caso que nos preocupa. El PANI (Patronato Nacional de la Infancia), ya lleva dos casos más de bebés abandonados este año. Ahí tenemos a la bebita que encontraron metida en una bolsa plástica en Heredia, quien afortunadamente está en un hogar familiar temporal, y al niño de Liberia, que también está bajo cuidado protector y esperando a que se declare formalmente su abandono. ¡Qué pena ajena!
Estos casos nos obligan a reflexionar sobre la responsabilidad parental y las redes de apoyo disponibles para las mamás que atraviesan dificultades. Hay programas sociales, hay organizaciones que ofrecen ayuda, pero muchas veces las personas no saben dónde recurrir o se sienten avergonzadas de pedirla. Necesitamos crear una cultura donde buscar ayuda no sea visto como un fracaso, sino como una muestra de valentía.
Desde el PANI aseguran que cuentan con recursos de acogimiento familiar listos para recibir al bebé de Hatillo en cuanto reciba el alta médica y el informe de Trabajo Social del hospital. Está abierto el Proceso Especial de Protección, investigando con lupa el entorno familiar y trabajando codo a codo con el OIJ y la Fiscalía para identificar a los padres y esclarecer las causas que llevaron a este terrible abandono. ¡Vamos a ver si logran resolver este brete!
Este incidente, además de conmovernos profundamente, nos recuerda la importancia de estar atentos a nuestro alrededor. Vecinos vigilantes, comunidades solidarias… todos podemos contribuir a proteger a los niños más vulnerables de nuestra sociedad. Un abrazo a esos funcionarios públicos que trabajan incansablemente por el bienestar de nuestros pequeños; ¡ustedes son unos cargas!
Y ahora la pregunta para el foro: ¿Qué medidas creen ustedes que debería tomar el gobierno para prevenir estos casos de abandono infantil y fortalecer el apoyo a las familias en riesgo? ¿Ustedes se animarían a acoger a un niño en situación vulnerable?
