¡Ay, Dios mío! La temporada de aguaceros nos está jugando una mala pasada, ¿eh? Resulta que ni los chamacos ni los profes pueden ir a las escuelas en Guanacaste y Puntarenas. El MEP tuvo que suspender las clases este martes y miércoles porque las cosas andan feas, con inundaciones, deslizamientos y caminos intransitables. Ya saben, la combinación perfecta para quedarse en casa viendo teleseries.
Y no es que llueva poquito, chunches. Estamos hablando de las consecuencias del huracán Melissa, aunque haya pasado lejos, sus achaques todavía se sienten por acá. Según el Ministerio de Educación, la situación está tan complicada que hasta los colegios técnicos profesionales tuvieron que parar. Imagínate la bronca, ¡los estudiantes que quieren aprender un oficio ahora tienen que esperar!
La lista de escuelas afectadas es larguísima, pura vara para leer. Desde Santa Cruz hasta Osa, pasando por Nicoya y toda la zona peninsular. Hay circulos enteros donde todos los colegios están cerrados. Les dejo la lista completa para que se hagan una idea: Dirección Regional de Santa Cruz – Circuito 02, 03, 05; Dirección Regional de Nicoya – Circuito 02, 06, 07; Dirección Regional Grande de Peninsular – Circuito 02, 04; Dirección Regional Grande de Térraba – Circuito 08, 06, 07, 03; y Dirección Regional de Aguirre – Circuito 06. ¡Un brete nomás!
Lo bueno es que el MEP no anda dormido, mae. Están revisando la situación día a día para ver si pueden levantar las restricciones pronto. Pero también advierten que, si sigue lloviendo así, la suspensión podría extenderse. Vamos a tener que estar atentos a las actualizaciones, porque nadie quiere que los niños pierdan más tiempo de estudio. Aunque, sinceramente, un día extra en casa no viene mal, ¿verdad?
Ahora, pensando en lo académico, la cosa se complica con las Pruebas Nacionales Estandarizadas Sumativas. Tenían programadas para esta semana en algunos colegios, pero ya se tocará reprogramarlas para el 10 al 14 de noviembre. Dice el MEP que esto es para asegurar que las pruebas se apliquen correctamente, sin prisas ni problemas. A ver si para entonces el clima se calma un poco, porque sino vamos a seguir con esta chinchorrada.
Las direcciones regionales y los comités locales de emergencia están trabajando a marchas forzadas para evaluar los daños y coordinar la respuesta. Se habla de limpiar ríos, reparar calles y habilitar refugios temporales para las familias que fueron evacuadas. Una pena lo que está pasando, pero hay que darle duro para salir adelante. ¡Aguante Costa Rica!
Hay que reconocer que esta situación pone de manifiesto la vulnerabilidad de nuestras comunidades costeras frente a los fenómenos naturales. Es un llamado a tomar medidas preventivas, a mejorar la infraestructura y a fortalecer la capacidad de respuesta ante emergencias. No podemos seguir improvisando cada vez que llega un huracán o unas lluvias intensas. Necesitamos soluciones a largo plazo para proteger a nuestros ciudadanos y a nuestro patrimonio.
En fin, la escuela está cerrada, el clima está feo y la incertidumbre reina. Pero los ticos somos fieros y sabemos cómo enfrentar los desafíos. Esperemos que pronto podamos volver a la normalidad y que nuestros hijos puedan retomar sus estudios. ¿Ustedes creen que el gobierno debería invertir más en obras de mitigación de riesgos para evitar estas situaciones recurrentes en zonas vulnerables como Guanacaste y Puntarenas? Compartan sus ideas en el foro, ¡me interesa mucho saber qué piensan!
Y no es que llueva poquito, chunches. Estamos hablando de las consecuencias del huracán Melissa, aunque haya pasado lejos, sus achaques todavía se sienten por acá. Según el Ministerio de Educación, la situación está tan complicada que hasta los colegios técnicos profesionales tuvieron que parar. Imagínate la bronca, ¡los estudiantes que quieren aprender un oficio ahora tienen que esperar!
La lista de escuelas afectadas es larguísima, pura vara para leer. Desde Santa Cruz hasta Osa, pasando por Nicoya y toda la zona peninsular. Hay circulos enteros donde todos los colegios están cerrados. Les dejo la lista completa para que se hagan una idea: Dirección Regional de Santa Cruz – Circuito 02, 03, 05; Dirección Regional de Nicoya – Circuito 02, 06, 07; Dirección Regional Grande de Peninsular – Circuito 02, 04; Dirección Regional Grande de Térraba – Circuito 08, 06, 07, 03; y Dirección Regional de Aguirre – Circuito 06. ¡Un brete nomás!
Lo bueno es que el MEP no anda dormido, mae. Están revisando la situación día a día para ver si pueden levantar las restricciones pronto. Pero también advierten que, si sigue lloviendo así, la suspensión podría extenderse. Vamos a tener que estar atentos a las actualizaciones, porque nadie quiere que los niños pierdan más tiempo de estudio. Aunque, sinceramente, un día extra en casa no viene mal, ¿verdad?
Ahora, pensando en lo académico, la cosa se complica con las Pruebas Nacionales Estandarizadas Sumativas. Tenían programadas para esta semana en algunos colegios, pero ya se tocará reprogramarlas para el 10 al 14 de noviembre. Dice el MEP que esto es para asegurar que las pruebas se apliquen correctamente, sin prisas ni problemas. A ver si para entonces el clima se calma un poco, porque sino vamos a seguir con esta chinchorrada.
Las direcciones regionales y los comités locales de emergencia están trabajando a marchas forzadas para evaluar los daños y coordinar la respuesta. Se habla de limpiar ríos, reparar calles y habilitar refugios temporales para las familias que fueron evacuadas. Una pena lo que está pasando, pero hay que darle duro para salir adelante. ¡Aguante Costa Rica!
Hay que reconocer que esta situación pone de manifiesto la vulnerabilidad de nuestras comunidades costeras frente a los fenómenos naturales. Es un llamado a tomar medidas preventivas, a mejorar la infraestructura y a fortalecer la capacidad de respuesta ante emergencias. No podemos seguir improvisando cada vez que llega un huracán o unas lluvias intensas. Necesitamos soluciones a largo plazo para proteger a nuestros ciudadanos y a nuestro patrimonio.
En fin, la escuela está cerrada, el clima está feo y la incertidumbre reina. Pero los ticos somos fieros y sabemos cómo enfrentar los desafíos. Esperemos que pronto podamos volver a la normalidad y que nuestros hijos puedan retomar sus estudios. ¿Ustedes creen que el gobierno debería invertir más en obras de mitigación de riesgos para evitar estas situaciones recurrentes en zonas vulnerables como Guanacaste y Puntarenas? Compartan sus ideas en el foro, ¡me interesa mucho saber qué piensan!
