¡Ay, Dios mío! Esta vainera nos deja helaos a todos. Resulta que una familia en Inglaterra vivió una experiencia que te pone los pelos de punta. Una señora, pensando que se estaba poniendo morena con autobronceador, descubrió que tenía cáncer de páncreas. Pero eso no es todo, porque su mamá también tuvo que enfrentarlo… ¡qué sal!
Debra MacCuaig, una profesora de 38 tacos, se pintaba la cara para verse más linda en reuniones sociales. No se dio cuenta de nada raro, aparte de unas picazones que achacó al jabón. Como nos pasa a muchos, uno piensa 'esto es pendejada' y sigue adelante. Hasta que una noche, sentida como nunca, se miró al espejo y su esposo le dijo: 'pareces amarilla'. Ahí sí, la alarma debió sonar a todo volumen.
Imagínate el susto. La ictericia, la orina oscura, la piel con un tono raro... no eran cosas normales. Después de unos estudios, los médicos le dieron la bomba: niveles altísimos de bilirrubina y una obstrucción en el conducto biliar. Inicialmente pensaron que era otra cosa, pero luego llegó el diagnóstico duro: un tumor en la cabeza del páncreas. ¡Qué torta!
Le tuvieron que hacer una cirugía super complicada, llamada Whipple, donde le quitaron varios órganos. Después, seis meses de quimioterapia. Pensábamos que ya había salido del brete, pero la vida, a veces, te da cachetazos inesperados. Se imaginan que Debra, pensando que todo iba bien, recibe otro mazazo: su mamá, Pam Grindall, empieza a tener los mismos síntomas.
La historia se repetía. Ictericia, malestar, cambios en la piel… la mamá también tenía cáncer de páncreas. Qué pena, diay. Pam respondio al tratamiento al principio, pero el cáncer avanzó rápido, llegando hasta la columna y los pulmones. Falleció en mayo de 2023, a los 65 años. Ya verás qué tristeza se siente al perder a un ser querido por esta enfermedad...
Debra, que seguro todavía está procesando todo, dice que se siente culpable porque ella logró sobrevivir y su mamá no. La vida es injusta, ¿verdad? Pero ahora, usa su experiencia para crear conciencia. Ella nos anima a confiar en nuestro instinto. Si sientes que algo anda mal en tu cuerpo, ¡no lo ignores! Busca ayuda, hazte revisarte, no seas aguafiestas.
Y ahí es donde viene el mensaje importante para nosotros, los ticos. En Costa Rica somos súper tranquilos y a veces nos tardamos en ir al médico. Uno piensa 'ah, esto es pendejada, me pasará'. Pero este caso nos demuestra que hay que tomar cartas en el asunto. La detección temprana es clave para combatir muchas enfermedades, incluyendo el cáncer de páncreas, que es una verdadera pesadilla.
Entonces, mi gente, prestenle atención a su cuerpo. No ignoren las señales. Un cambio en el color de la piel, un cansancio inusual, cualquier síntoma que les parezca extraño, merece una visita al médico. ¡Confíen en ustedes mismos! Ahora dime, ¿cuáles son las medidas preventivas que ustedes toman para cuidar su salud y cuáles creen que deberían implementarse a nivel nacional para promover la detección temprana de enfermedades?
Debra MacCuaig, una profesora de 38 tacos, se pintaba la cara para verse más linda en reuniones sociales. No se dio cuenta de nada raro, aparte de unas picazones que achacó al jabón. Como nos pasa a muchos, uno piensa 'esto es pendejada' y sigue adelante. Hasta que una noche, sentida como nunca, se miró al espejo y su esposo le dijo: 'pareces amarilla'. Ahí sí, la alarma debió sonar a todo volumen.
Imagínate el susto. La ictericia, la orina oscura, la piel con un tono raro... no eran cosas normales. Después de unos estudios, los médicos le dieron la bomba: niveles altísimos de bilirrubina y una obstrucción en el conducto biliar. Inicialmente pensaron que era otra cosa, pero luego llegó el diagnóstico duro: un tumor en la cabeza del páncreas. ¡Qué torta!
Le tuvieron que hacer una cirugía super complicada, llamada Whipple, donde le quitaron varios órganos. Después, seis meses de quimioterapia. Pensábamos que ya había salido del brete, pero la vida, a veces, te da cachetazos inesperados. Se imaginan que Debra, pensando que todo iba bien, recibe otro mazazo: su mamá, Pam Grindall, empieza a tener los mismos síntomas.
La historia se repetía. Ictericia, malestar, cambios en la piel… la mamá también tenía cáncer de páncreas. Qué pena, diay. Pam respondio al tratamiento al principio, pero el cáncer avanzó rápido, llegando hasta la columna y los pulmones. Falleció en mayo de 2023, a los 65 años. Ya verás qué tristeza se siente al perder a un ser querido por esta enfermedad...
Debra, que seguro todavía está procesando todo, dice que se siente culpable porque ella logró sobrevivir y su mamá no. La vida es injusta, ¿verdad? Pero ahora, usa su experiencia para crear conciencia. Ella nos anima a confiar en nuestro instinto. Si sientes que algo anda mal en tu cuerpo, ¡no lo ignores! Busca ayuda, hazte revisarte, no seas aguafiestas.
Y ahí es donde viene el mensaje importante para nosotros, los ticos. En Costa Rica somos súper tranquilos y a veces nos tardamos en ir al médico. Uno piensa 'ah, esto es pendejada, me pasará'. Pero este caso nos demuestra que hay que tomar cartas en el asunto. La detección temprana es clave para combatir muchas enfermedades, incluyendo el cáncer de páncreas, que es una verdadera pesadilla.
Entonces, mi gente, prestenle atención a su cuerpo. No ignoren las señales. Un cambio en el color de la piel, un cansancio inusual, cualquier síntoma que les parezca extraño, merece una visita al médico. ¡Confíen en ustedes mismos! Ahora dime, ¿cuáles son las medidas preventivas que ustedes toman para cuidar su salud y cuáles creen que deberían implementarse a nivel nacional para promover la detección temprana de enfermedades?
