Bueno, pues llegó el momento de decir "adiós" a las giras de los diputados. Después de casi tres años recorriendo el país, el Poder Legislativo puso el clavo definitivo este lunes en Puntarenas, en una sesión solemne que sirvió también para conmemorar los aniversarios de Juan Rafael Mora y José María Cañas. Parece mentira, ¿verdad? Que se les olvidaba visitar las provincias mientras estaban ahí afuera trabajando.
Desde que asumieron la curul en mayo del 2022, los legisladores decidieron cambiarle el chip a la costumbre de quedarse encerrados en San José. Se lanzaron a recorrer cantones, buscando estar más cerca de la gente y, supuestamente, entender sus problemas de primera mano. Ya anduvieron varias veces por Nicoya, Limón y Puntarenas – parece que a esos lugares sí que les echaban ganas –, además de pasar por Turrialba, Alajuela y San Carlos. Un buen brete de kilometraje acumularon, díganlo.
Este lunes en Puntarenas cerraron el telón de esa etapa, sabiendo que el 30 de abril de 2026 tendrán que entregar el puesto. En medio del olor a mar y con alrededor de 40 legisladores presentes, liderados por la diputada Vanessa Castro (quien reemplazó a Rodrigo Arias que estaba con unos compromisos), se dio espacio para un debate formal sobre los desafíos y las broncas de la provincia. Más allá de las fotos y los discursos bonitos, la neta es que hubo bastante queja contra el Gobierno de Rodrigo Chaves.
Y vaya que no faltaron las pullas. David Segura, el diputado neorepublicano electo por Puntarenas, soltó que el sector arrocero no aguanta ni un año más con las políticas del Gobierno. Según él, si no le ponen remedio pronto, el asunto se va al traste. Un comentario bastante duro, sobre todo considerando que el arroz es un pilar importante para muchos ticos.
Ariel Robles, del Frente Amplio, siguió la corriente criticando la falta de apoyo al Fonarroz, un proyecto que, según él, es la única esperanza para solucionar los problemas de los arroceros. Remarcó que estos agricultores forman parte del 50% de la población que sigue luchando, gracias a la resistencia frente a la oposición del oficialismo al mencionado proyecto. Poco a poco la cosa se pone más complicada para el gobierno, ¿no creen?
Pero no solo los diputados se dejaron llevar por las críticas. Kattia Cambronero, la diputada independiente, le lanzó un mensaje directo al Presidente Chaves, diciéndole que ya no se complique la vida y que trabaje duro durante los seis meses que le quedan. Una advertencia clara y concisa, directa al grano: "Déjese de matonismo, trabaje". Directa como un tiro de cañón.
Además de los problemas del sector agrícola, la sesión también tocó otros temas sensibles para Puntarenas, como la construcción del Hospital Monseñor Sanabria. La oposición no tardó en acusar al Gobierno de querer robarse todos los aplausos, insistiendo en que el verdadero responsable del hospital es la Caja Costarricense de Seguro Social. Solicitan, con urgencia, más especialistas para el centro médico, para que pueda ofrecer servicios de primer nivel. Algo elemental para toda comunidad.
En fin, los diputados cerraron su gira con una mezcla de balance, críticas y llamados a la acción. Una sesión llena de emociones encontradas y con mucho material para analizar. Ahora, me pregunto, ¿cree usted que estas giras realmente ayudaron a los diputados a entender las necesidades de la población, o fue simplemente una estrategia política para ganar popularidad?
Desde que asumieron la curul en mayo del 2022, los legisladores decidieron cambiarle el chip a la costumbre de quedarse encerrados en San José. Se lanzaron a recorrer cantones, buscando estar más cerca de la gente y, supuestamente, entender sus problemas de primera mano. Ya anduvieron varias veces por Nicoya, Limón y Puntarenas – parece que a esos lugares sí que les echaban ganas –, además de pasar por Turrialba, Alajuela y San Carlos. Un buen brete de kilometraje acumularon, díganlo.
Este lunes en Puntarenas cerraron el telón de esa etapa, sabiendo que el 30 de abril de 2026 tendrán que entregar el puesto. En medio del olor a mar y con alrededor de 40 legisladores presentes, liderados por la diputada Vanessa Castro (quien reemplazó a Rodrigo Arias que estaba con unos compromisos), se dio espacio para un debate formal sobre los desafíos y las broncas de la provincia. Más allá de las fotos y los discursos bonitos, la neta es que hubo bastante queja contra el Gobierno de Rodrigo Chaves.
Y vaya que no faltaron las pullas. David Segura, el diputado neorepublicano electo por Puntarenas, soltó que el sector arrocero no aguanta ni un año más con las políticas del Gobierno. Según él, si no le ponen remedio pronto, el asunto se va al traste. Un comentario bastante duro, sobre todo considerando que el arroz es un pilar importante para muchos ticos.
Ariel Robles, del Frente Amplio, siguió la corriente criticando la falta de apoyo al Fonarroz, un proyecto que, según él, es la única esperanza para solucionar los problemas de los arroceros. Remarcó que estos agricultores forman parte del 50% de la población que sigue luchando, gracias a la resistencia frente a la oposición del oficialismo al mencionado proyecto. Poco a poco la cosa se pone más complicada para el gobierno, ¿no creen?
Pero no solo los diputados se dejaron llevar por las críticas. Kattia Cambronero, la diputada independiente, le lanzó un mensaje directo al Presidente Chaves, diciéndole que ya no se complique la vida y que trabaje duro durante los seis meses que le quedan. Una advertencia clara y concisa, directa al grano: "Déjese de matonismo, trabaje". Directa como un tiro de cañón.
Además de los problemas del sector agrícola, la sesión también tocó otros temas sensibles para Puntarenas, como la construcción del Hospital Monseñor Sanabria. La oposición no tardó en acusar al Gobierno de querer robarse todos los aplausos, insistiendo en que el verdadero responsable del hospital es la Caja Costarricense de Seguro Social. Solicitan, con urgencia, más especialistas para el centro médico, para que pueda ofrecer servicios de primer nivel. Algo elemental para toda comunidad.
En fin, los diputados cerraron su gira con una mezcla de balance, críticas y llamados a la acción. Una sesión llena de emociones encontradas y con mucho material para analizar. Ahora, me pregunto, ¿cree usted que estas giras realmente ayudaron a los diputados a entender las necesidades de la población, o fue simplemente una estrategia política para ganar popularidad?
