¡Ay, pata negra! Aquí seguimos viendo cómo algunos mae se creen la mosca y andan haciendo de las suyas en nuestros territorios marinos. Esta vez, los compañeros del Servicio Nacional de Guardacostas (SINAC) le dieron duro a unos pescadores ilegales en dos operativos diferentes, demostrando que la ley es pa' todos, diay.
La movida comenzó en el Humedal Térraba-Sierpe, una zona sur que ustedes saben, llena de vida y super importante para nuestro ecosistema. Resulta que unos señores de apellido Calvo y Badilla estaban ahí echando la red en la desembocadura de Coronado, usando trasmallos de esos de 250 metros cada uno – ¡una barbaridad! Como si fueran dueños del río, ¿verdad?
Y ni hablar de los papeles. Cuando les pidieron la documentación del bote, ¡bingo!, nada de nada. Ni ellos tenían licencias de pesca. Varios se preguntarán qué onda los trasmallos. Pues miren, la ley es clara: no se pueden usar esas redes ni otras similares en zonas protegidas como ríos, lagunas y humedales. Lo hacen porque dañan un montón de especies y rompen el equilibrio natural, ¿entienden?
Entonces, después de contactar a la Fiscalía, ya saben cuál fue el resultado: decomiso total. Se llevaron el barco, el motor, las redes y hasta el pescado que habían atrapado. Un botín considerable: 168 peces de diferentes tipos, desde tiburones hasta pargos, corvinas y atéms. ¡Imagínense la cantina que pudieron haber hecho con eso!
Pero eso no es todo, mae. En el Caribe Norte, específicamente en Barra del Colorado, también hubo acción. Ahí encontraron cuatro trasmallos abandonados en la Bocana de Samay. Dicen que juntos sumaban cerca de 300 metros de red. ¡Qué barbaridad! Afortunadamente, los guardacostas llegaron a tiempo de retirar las redes antes de que causaran mucho daño.
Lo que pasa es que estas bocanas son lugares súper delicados, habitualmente llenas de pecesitos y criaturitas que se reproducen y transitan por ahí. Con los trasmallos adentro, eso se convierte en una verdadera trampa mortal para toda esa fauna marina. Por eso, los SINAC siempre enfatizan la importancia de proteger estos espacios.
Estos operativos demuestran que el SINAC sí está trabajando para cuidar nuestros recursos naturales. Claro que siempre hay espacio para mejorar, ¿no? Pero es bueno ver que ponen empeño en frenar a estos aprovechados que no respetan las leyes ni el medio ambiente. Al final, esto nos afecta a todos, ¿verdad? Nos va en la olla, como dicen por acá.
Con todas estas acciones, uno se pregunta: ¿Será que realmente estamos tomando conciencia de la importancia de proteger nuestros ecosistemas costeros, o seguiremos viendo a personas que prefieren lucrar a costa de la naturaleza? ¿Creen que las penas actuales son suficientes para disuadir a quienes infringen las leyes de pesca, o necesitamos medidas más severas para ponerle fin a esta práctica destructiva? Déjenme sus opiniones en el foro, quiero saber qué piensan al respecto.
La movida comenzó en el Humedal Térraba-Sierpe, una zona sur que ustedes saben, llena de vida y super importante para nuestro ecosistema. Resulta que unos señores de apellido Calvo y Badilla estaban ahí echando la red en la desembocadura de Coronado, usando trasmallos de esos de 250 metros cada uno – ¡una barbaridad! Como si fueran dueños del río, ¿verdad?
Y ni hablar de los papeles. Cuando les pidieron la documentación del bote, ¡bingo!, nada de nada. Ni ellos tenían licencias de pesca. Varios se preguntarán qué onda los trasmallos. Pues miren, la ley es clara: no se pueden usar esas redes ni otras similares en zonas protegidas como ríos, lagunas y humedales. Lo hacen porque dañan un montón de especies y rompen el equilibrio natural, ¿entienden?
Entonces, después de contactar a la Fiscalía, ya saben cuál fue el resultado: decomiso total. Se llevaron el barco, el motor, las redes y hasta el pescado que habían atrapado. Un botín considerable: 168 peces de diferentes tipos, desde tiburones hasta pargos, corvinas y atéms. ¡Imagínense la cantina que pudieron haber hecho con eso!
Pero eso no es todo, mae. En el Caribe Norte, específicamente en Barra del Colorado, también hubo acción. Ahí encontraron cuatro trasmallos abandonados en la Bocana de Samay. Dicen que juntos sumaban cerca de 300 metros de red. ¡Qué barbaridad! Afortunadamente, los guardacostas llegaron a tiempo de retirar las redes antes de que causaran mucho daño.
Lo que pasa es que estas bocanas son lugares súper delicados, habitualmente llenas de pecesitos y criaturitas que se reproducen y transitan por ahí. Con los trasmallos adentro, eso se convierte en una verdadera trampa mortal para toda esa fauna marina. Por eso, los SINAC siempre enfatizan la importancia de proteger estos espacios.
Estos operativos demuestran que el SINAC sí está trabajando para cuidar nuestros recursos naturales. Claro que siempre hay espacio para mejorar, ¿no? Pero es bueno ver que ponen empeño en frenar a estos aprovechados que no respetan las leyes ni el medio ambiente. Al final, esto nos afecta a todos, ¿verdad? Nos va en la olla, como dicen por acá.
Con todas estas acciones, uno se pregunta: ¿Será que realmente estamos tomando conciencia de la importancia de proteger nuestros ecosistemas costeros, o seguiremos viendo a personas que prefieren lucrar a costa de la naturaleza? ¿Creen que las penas actuales son suficientes para disuadir a quienes infringen las leyes de pesca, o necesitamos medidas más severas para ponerle fin a esta práctica destructiva? Déjenme sus opiniones en el foro, quiero saber qué piensan al respecto.