¡Ay, Dios mío! Aquí seguimos con cosas que dan qué pensar... Anoche, el sector de Sagrada Familia en Hatillo amaneció sacudido por una balacera que dejó tres personas heridas y a toda la comunidad en vilo. Parece que ya nos estamos acostumbrando a estas situaciones, pero la verdad, da mucho coraje ver cómo la violencia se mete hasta en los rincones más tranquilos de nuestro país.
Según el reporte del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), la bronca comenzó pasadas las ocho de la noche. Dos tipos, encima, a toda velocidad en una moto, empezaron a dispararle a un carro donde iban dos señores. Pero la cosa no quedó ahí, porque una bala rebotó y terminó dando en una pulpería cercana, heriendo a un pobre hombre que andaba comprándole unos chunches. Una verdadera torta, ¿eh?
Las víctimas, identificadas como Jiménez, de 27 años; Morales, de 22; y Castro, de 36, recibieron atención médica de inmediato. Se sabe que Jiménez y Morales estaban dentro del vehículo cuando les tocaron la bala, mientras que Castro recibió el impacto mientras estaba adentro de la pulpería, buscando algún diay pa’ llevar a casa. Por suerte, todos están estables, aunque imagínate el susto que se pegaron estos mae…¡Uf!
Los judiciales llegaron al lugar y recogieron, ni más ni menos, ¡19 casquillos de nueve milímetros! Diecinueve, mi clave, eso indica que hubo una pelea bien intensa. Ahora están haciendo todas las investigaciones necesarias para tratar de identificar a los responsables y aclarar cuál fue el motivo detrás de este ataque tan violento. Dicen que podrían tener que ver con viejas rencillas, pero aún es muy pronto para afirmarlo, brete.
Lo que preocupa a la gente de Hatillo es que esto ha sido el tercer incidente similar en los últimos seis meses. Antes tuvieron problemas con robos a mano armada y ahora esto. Hay quienes dicen que falta presencia policial en la zona, otros culpan a la influencia de las pandillas. Lo cierto es que la tranquilidad del pueblo se ha visto seriamente afectada y los vecinos están asustados, pensando quién será el próximo en caer víctima de la delincuencia.
Algunos lugareños comentan que hace tiempo que ven actividad sospechosa en la zona, como reuniones nocturnas y vehículos extraños merodeando por las calles. Otros, más optimistas, confían en que las autoridades harán lo posible por recuperar la paz. “Esperamos que agarren a estos delincuentes y que les caiga todo lo que merecen”, dice Doña Rosa, dueña de una tienda en el barrio. “Pero también necesitamos que haya más seguridad, que patrullen más seguido para sentirnos seguros”.
La fiscalía ha abierto una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos y determinar si existe una conexión entre este ataque y otros incidentes similares ocurridos en la zona. Han solicitado información a las compañías telefónicas y están revisando cámaras de seguridad de negocios cercanos para obtener pistas que puedan ayudar a identificar a los atacantes. Además, están entrevistando a testigos para recabar testimonios que aporten a la investigación. Este caso es una vara importante que debe resolverse pronto para darle certeza a la población de Hatillo.
Y ahora dime tú, ¿qué crees que se necesita hacer para frenar la ola de violencia que está afectando a nuestras comunidades? ¿Más policía en las calles? ¿Programas sociales para los jóvenes? ¿O simplemente hemos perdido el rumbo como sociedad? Déjame leer tus comentarios abajo... ¡A ver qué opinas, maé!
Según el reporte del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), la bronca comenzó pasadas las ocho de la noche. Dos tipos, encima, a toda velocidad en una moto, empezaron a dispararle a un carro donde iban dos señores. Pero la cosa no quedó ahí, porque una bala rebotó y terminó dando en una pulpería cercana, heriendo a un pobre hombre que andaba comprándole unos chunches. Una verdadera torta, ¿eh?
Las víctimas, identificadas como Jiménez, de 27 años; Morales, de 22; y Castro, de 36, recibieron atención médica de inmediato. Se sabe que Jiménez y Morales estaban dentro del vehículo cuando les tocaron la bala, mientras que Castro recibió el impacto mientras estaba adentro de la pulpería, buscando algún diay pa’ llevar a casa. Por suerte, todos están estables, aunque imagínate el susto que se pegaron estos mae…¡Uf!
Los judiciales llegaron al lugar y recogieron, ni más ni menos, ¡19 casquillos de nueve milímetros! Diecinueve, mi clave, eso indica que hubo una pelea bien intensa. Ahora están haciendo todas las investigaciones necesarias para tratar de identificar a los responsables y aclarar cuál fue el motivo detrás de este ataque tan violento. Dicen que podrían tener que ver con viejas rencillas, pero aún es muy pronto para afirmarlo, brete.
Lo que preocupa a la gente de Hatillo es que esto ha sido el tercer incidente similar en los últimos seis meses. Antes tuvieron problemas con robos a mano armada y ahora esto. Hay quienes dicen que falta presencia policial en la zona, otros culpan a la influencia de las pandillas. Lo cierto es que la tranquilidad del pueblo se ha visto seriamente afectada y los vecinos están asustados, pensando quién será el próximo en caer víctima de la delincuencia.
Algunos lugareños comentan que hace tiempo que ven actividad sospechosa en la zona, como reuniones nocturnas y vehículos extraños merodeando por las calles. Otros, más optimistas, confían en que las autoridades harán lo posible por recuperar la paz. “Esperamos que agarren a estos delincuentes y que les caiga todo lo que merecen”, dice Doña Rosa, dueña de una tienda en el barrio. “Pero también necesitamos que haya más seguridad, que patrullen más seguido para sentirnos seguros”.
La fiscalía ha abierto una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos y determinar si existe una conexión entre este ataque y otros incidentes similares ocurridos en la zona. Han solicitado información a las compañías telefónicas y están revisando cámaras de seguridad de negocios cercanos para obtener pistas que puedan ayudar a identificar a los atacantes. Además, están entrevistando a testigos para recabar testimonios que aporten a la investigación. Este caso es una vara importante que debe resolverse pronto para darle certeza a la población de Hatillo.
Y ahora dime tú, ¿qué crees que se necesita hacer para frenar la ola de violencia que está afectando a nuestras comunidades? ¿Más policía en las calles? ¿Programas sociales para los jóvenes? ¿O simplemente hemos perdido el rumbo como sociedad? Déjame leer tus comentarios abajo... ¡A ver qué opinas, maé!