¡Ay, dios mío, qué brete nos cayó encima! El tema de la inmunidad del Presidente Rodrigo Chaves sigue dando para hablar, y pinta que este martes vamos a tener un buen meneo en la Asamblea Legislativa. Los rumores corren como reguero de pólvora: ¿tendrán la oposición los 38 votos necesarios para sacarle la inmunidad y ponerlo a disposición de la justicia? Parece que el juego está lejos de terminar, y la cosa se pone más picante cada día.
Para entender bien la movida, hay que recordar que al Presidente Chaves se le investiga por el asunto de la beligerancia política – vale, en cristiano, por usar los fondos públicos para hacer campaña electoral. El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) ha juntado hasta 15 denuncias sobre esto, y si le quitan la inmunidad, podrán seguir adelante con el caso. Si lo encuentran culpable, ¡aguántate! Podrían inhabilitarlo para ocupar cargos públicos durante cuatro años. Una verdadera descarga para el pobre.
Ahora, la inmunidad es como un escudo para los altos funcionarios; les da protección mientras están ejerciendo su cargo. Pero este escudo no es eterno, y la oposición ha venido buscando cómo quitárselo desde hace rato. Ya hubo un intento el 22 de septiembre pasado, pero ahí la oposición se quedó corta, faltándole unos cuantos votos. En aquel entonces, algunos diputados del PUSC decidieron irse contracorriente, y eso le salvó el pellejo al Presidente… por ahora.
Y hablando de los diputados del PUSC, ellos son clave en esta jugada. Son nueve en total, y si todos votaran a favor de levantar la inmunidad, la oposición llegaría a los 38 votos que necesita. Pero ahí está el problema: nadie sabe qué van a hacer. Se han encerrado en un silencio sepulcral, y los rumores son más abundantes que ranas en época de lluvia. Algunos dicen que están presionados, otros que están esperando a ver cómo se mueven las aguas... ¡Qué maraña!
Liberación Nacional, el Frente Amplio, el Partido Liberal Progresista y los diputados independientes parecen estar dispuestos a darle el visto bueno a la medida, sumando alrededor de 34 votos. Pero eso no es suficiente. Y los siete diputados de Nueva República ya dejaron claro que no van a apoyar, así que la balanza se balancea peligrosamente. Tampoco podemos contar con el voto de diputados oficialistas como Pilar Cisneros. La verdad, la cosa está más apretada que un chile serrano.
Pero lo más interesante de todo es la reacción del propio Presidente Chaves. El señor lanzó unas advertencias a los diputados que tengan que tomar la decisión: “Habrá consecuencias, habrá repudio para quienes respalden la medida”. ¡Uy, uy, uy! Esto suena a amenaza velada, y no sé ustedes, pero a mí me huele a gallina podrida. Hasta ahora, no está claro si el Presidente va a asistir a la sesión del martes, aunque seguramente tendrá asesores diciéndole que sea prudente y evite meterse en más líos.
El ambiente está cargado de tensión, y la incertidumbre reina entre la población. No sabemos qué va a pasar, pero estamos seguros de que será un día histórico para nuestra democracia. Muchos esperan que la justicia prevalezca, mientras que otros temen que la politiquería termine por torcer el rumbo de la historia. Esta vara es complicada, y no hay respuestas fáciles. Veremos cómo termina esta telenovela, porque vaya que nos tienen enganchados.
Con todo lo dicho, ¿creen que los diputados del PUSC cederán ante la presión y votarán a favor de levantar la inmunidad al Presidente Chaves, o se aferrarán a su postura actual y dejarán que siga gobernando sin mayores restricciones? Compartan sus opiniones en el foro, ¡me interesa saber qué piensan mis compas!
Para entender bien la movida, hay que recordar que al Presidente Chaves se le investiga por el asunto de la beligerancia política – vale, en cristiano, por usar los fondos públicos para hacer campaña electoral. El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) ha juntado hasta 15 denuncias sobre esto, y si le quitan la inmunidad, podrán seguir adelante con el caso. Si lo encuentran culpable, ¡aguántate! Podrían inhabilitarlo para ocupar cargos públicos durante cuatro años. Una verdadera descarga para el pobre.
Ahora, la inmunidad es como un escudo para los altos funcionarios; les da protección mientras están ejerciendo su cargo. Pero este escudo no es eterno, y la oposición ha venido buscando cómo quitárselo desde hace rato. Ya hubo un intento el 22 de septiembre pasado, pero ahí la oposición se quedó corta, faltándole unos cuantos votos. En aquel entonces, algunos diputados del PUSC decidieron irse contracorriente, y eso le salvó el pellejo al Presidente… por ahora.
Y hablando de los diputados del PUSC, ellos son clave en esta jugada. Son nueve en total, y si todos votaran a favor de levantar la inmunidad, la oposición llegaría a los 38 votos que necesita. Pero ahí está el problema: nadie sabe qué van a hacer. Se han encerrado en un silencio sepulcral, y los rumores son más abundantes que ranas en época de lluvia. Algunos dicen que están presionados, otros que están esperando a ver cómo se mueven las aguas... ¡Qué maraña!
Liberación Nacional, el Frente Amplio, el Partido Liberal Progresista y los diputados independientes parecen estar dispuestos a darle el visto bueno a la medida, sumando alrededor de 34 votos. Pero eso no es suficiente. Y los siete diputados de Nueva República ya dejaron claro que no van a apoyar, así que la balanza se balancea peligrosamente. Tampoco podemos contar con el voto de diputados oficialistas como Pilar Cisneros. La verdad, la cosa está más apretada que un chile serrano.
Pero lo más interesante de todo es la reacción del propio Presidente Chaves. El señor lanzó unas advertencias a los diputados que tengan que tomar la decisión: “Habrá consecuencias, habrá repudio para quienes respalden la medida”. ¡Uy, uy, uy! Esto suena a amenaza velada, y no sé ustedes, pero a mí me huele a gallina podrida. Hasta ahora, no está claro si el Presidente va a asistir a la sesión del martes, aunque seguramente tendrá asesores diciéndole que sea prudente y evite meterse en más líos.
El ambiente está cargado de tensión, y la incertidumbre reina entre la población. No sabemos qué va a pasar, pero estamos seguros de que será un día histórico para nuestra democracia. Muchos esperan que la justicia prevalezca, mientras que otros temen que la politiquería termine por torcer el rumbo de la historia. Esta vara es complicada, y no hay respuestas fáciles. Veremos cómo termina esta telenovela, porque vaya que nos tienen enganchados.
Con todo lo dicho, ¿creen que los diputados del PUSC cederán ante la presión y votarán a favor de levantar la inmunidad al Presidente Chaves, o se aferrarán a su postura actual y dejarán que siga gobernando sin mayores restricciones? Compartan sus opiniones en el foro, ¡me interesa saber qué piensan mis compas!