¡Aguante! Resulta que la Reserva Federal de Estados Unidos, la Fed pa' ponerlo sencillo, decidió bajar las tasas de interés. Después de un buen rato aguantándose firme, ¡le dieron un quiebre! Lo hicieron por un cuarto de punto, dejándolas en un rango entre 4% y 4.25%, según reportan los gringos. Pero bueno, ¿qué significa eso pa’ nosotros, los que vivimos acá en Costa Rica?
La cosa es que Donald Trump, ese mae que anda siempre dando lata, le había estado haciendo bolas pidiendo que bajaran las tasas. Él cree que así la economía de Estados Unidos se pone más contenta, y eso indirectamente nos beneficia a nosotros. Aunque, claro, también dicen que hay mucha incertidumbre en el panorama económico de los yanquis, así que no es tan simple como decir 'todo está bien'. Parece que la Fed está tratando de encontrar un balance entre mantener el empleo alto y evitar que los precios se disparen, un brete complicado, ¿verdad?
Jerome Powell, el jefe de la Fed, salió a decir que están enfocados en cumplir su trabajo, que quieren que haya empleos y que los precios estén controlados. Dijo que sí, el desempleo sigue siendo bajo, pero poquito a poco se ha ido subiendo. Además, la gente que está buscando trabajo no es tanta como antes, y eso preocupa un poco. Hay quien dice que la culpa es de que menos personas están llegando al país, tanto por temas de inmigración como por otras cosas.
Pero ahí no quedó la cosa, porque la Fed también avisó que podrían bajar las tasas otras dos veces este año. Eso, si las cosas siguen yendo bien, claro. Esta bajada de tasas y las futuras podrian aliviar un poquito a los que tenemos deudas en tarjetas de crédito, y a las empresas que andan con problemas para pagar sus préstamos. Imagínate, más plata disponible, aunque también hay que cuidarse de no irnos de compras como locos, ¿eh?
Ahora, lo importante es entender que lo que pasa en la economía grande de Estados Unidos nos afecta directamente a nosotros. No es cualquier vaina, es como si fuera un río que arrastra todo a su paso. Cuando ellos mueven las tasas, nosotros sentimos el tirón. Un dólar más débil, cambios en las exportaciones, incluso más o menos turistas... ¡Todo conectado!
Y hablando de dólar, uno de los primeros efectos que podríamos ver es que se debilite. Según Gabriela Siller, economista, es casi seguro que pasará. Si el dólar baja, nuestras monedas latinoamericanas podrían subir un poquito, lo cual sería un respiro para nuestros bolsillos. También podría impulsarse las exportaciones, porque nuestros productos serían más baratos para los americanos. Pero ojo, que también podría haber un pequeño problema: las cosas que importamos podrían volverse más caras. Diego Mora, analista, también comentó que, dependiendo de las políticas migratorias de Trump, esto podría afectar el envío de remesas a la región, que es una fuente importante de ingresos para muchas familias ticas.
Además, resulta que la Fed también juega un papel importantísimo en cómo pedimos prestado dinero a nivel mundial. Cuando las tasas bajan allí, generalmente también bajan las tasas aquí, lo que facilita que el gobierno y las empresas puedan obtener créditos. Claro, hay que saber aprovechar la oportunidad y pedir prestado inteligentemente, para no meternos en un lío peor. Y ni hablar de los inversionistas; si ven que el riesgo en Estados Unidos baja, podrían empezar a meterle plata a países como el nuestro, buscando mejores ganancias. Eso podría ayudar a crecer nuestra economía, pero hay que tener cuidado de no crear una burbuja que luego explote.
Entonces, ¿pa' qué todo esto? Pues pa’ que sepamos que lo que pasa allá, nos pasa a nosotros. Todo está conectado. La Fed está tratando de mantener a flote la economía americana, y eso tiene consecuencias directas para nosotros, los ticos. Ahora, la gran pregunta es: ¿Cómo podemos aprovechar esta situación para fortalecer nuestra propia economía y asegurarnos de que sigamos creciendo, a pesar de los altibajos globales? ¿Será suficiente esta leve bajada de tasas para reactivar la economía local, o necesitamos medidas más contundentes?
La cosa es que Donald Trump, ese mae que anda siempre dando lata, le había estado haciendo bolas pidiendo que bajaran las tasas. Él cree que así la economía de Estados Unidos se pone más contenta, y eso indirectamente nos beneficia a nosotros. Aunque, claro, también dicen que hay mucha incertidumbre en el panorama económico de los yanquis, así que no es tan simple como decir 'todo está bien'. Parece que la Fed está tratando de encontrar un balance entre mantener el empleo alto y evitar que los precios se disparen, un brete complicado, ¿verdad?
Jerome Powell, el jefe de la Fed, salió a decir que están enfocados en cumplir su trabajo, que quieren que haya empleos y que los precios estén controlados. Dijo que sí, el desempleo sigue siendo bajo, pero poquito a poco se ha ido subiendo. Además, la gente que está buscando trabajo no es tanta como antes, y eso preocupa un poco. Hay quien dice que la culpa es de que menos personas están llegando al país, tanto por temas de inmigración como por otras cosas.
Pero ahí no quedó la cosa, porque la Fed también avisó que podrían bajar las tasas otras dos veces este año. Eso, si las cosas siguen yendo bien, claro. Esta bajada de tasas y las futuras podrian aliviar un poquito a los que tenemos deudas en tarjetas de crédito, y a las empresas que andan con problemas para pagar sus préstamos. Imagínate, más plata disponible, aunque también hay que cuidarse de no irnos de compras como locos, ¿eh?
Ahora, lo importante es entender que lo que pasa en la economía grande de Estados Unidos nos afecta directamente a nosotros. No es cualquier vaina, es como si fuera un río que arrastra todo a su paso. Cuando ellos mueven las tasas, nosotros sentimos el tirón. Un dólar más débil, cambios en las exportaciones, incluso más o menos turistas... ¡Todo conectado!
Y hablando de dólar, uno de los primeros efectos que podríamos ver es que se debilite. Según Gabriela Siller, economista, es casi seguro que pasará. Si el dólar baja, nuestras monedas latinoamericanas podrían subir un poquito, lo cual sería un respiro para nuestros bolsillos. También podría impulsarse las exportaciones, porque nuestros productos serían más baratos para los americanos. Pero ojo, que también podría haber un pequeño problema: las cosas que importamos podrían volverse más caras. Diego Mora, analista, también comentó que, dependiendo de las políticas migratorias de Trump, esto podría afectar el envío de remesas a la región, que es una fuente importante de ingresos para muchas familias ticas.
Además, resulta que la Fed también juega un papel importantísimo en cómo pedimos prestado dinero a nivel mundial. Cuando las tasas bajan allí, generalmente también bajan las tasas aquí, lo que facilita que el gobierno y las empresas puedan obtener créditos. Claro, hay que saber aprovechar la oportunidad y pedir prestado inteligentemente, para no meternos en un lío peor. Y ni hablar de los inversionistas; si ven que el riesgo en Estados Unidos baja, podrían empezar a meterle plata a países como el nuestro, buscando mejores ganancias. Eso podría ayudar a crecer nuestra economía, pero hay que tener cuidado de no crear una burbuja que luego explote.
Entonces, ¿pa' qué todo esto? Pues pa’ que sepamos que lo que pasa allá, nos pasa a nosotros. Todo está conectado. La Fed está tratando de mantener a flote la economía americana, y eso tiene consecuencias directas para nosotros, los ticos. Ahora, la gran pregunta es: ¿Cómo podemos aprovechar esta situación para fortalecer nuestra propia economía y asegurarnos de que sigamos creciendo, a pesar de los altibajos globales? ¿Será suficiente esta leve bajada de tasas para reactivar la economía local, o necesitamos medidas más contundentes?
