Nunca hay que buscar la persona que nos haga feliz. Primero debemos buscar nosotros mismos nuestra propia felicidad y luego buscar y encontrar a la persona con quien compartir esa felicidad y así, ambos pueden complementarse. Nadie lo va a hacer feliz, no le cargue a nadie la responsabilidad de hacerlo feliz. El pasado quedó ahí, lo que importa es lo que somos de hoy en adelante.