¡Ay, Dios mío! ¿Se imaginan tener que esperar casi medio año para un examen que podría salvarles la vida? Pues eso le está pasando a miles de mujeres acá en Costa Rica. La CCSS, bendita sea, anda con tiempos demorados que dan qué pensar, y la verdad es que esto del cáncer de mama no tiene juego. Con más de 58 mil mujeres esperando turno para una mamografía, la cosa se pone fea rapidito.
Según datos frescos de la Caja, el tiempo promedio de espera para hacerse este examen crucial es de 140 días, ¡cuatro meses y medio! Eso es un montón de tiempo, brete que puede marcar la diferencia entre detectar la enfermedad temprano y enfrentarla en etapas avanzadas. Y hablando de etapas, la Organización Mundial de la Salud nos recuerda que cada año se diagnostican millones de casos de cáncer de mama en el mundo, y muchos desarrollan metástasis incluso con un diagnóstico precoz. ¡Qué sal!
Un especialista, el doctor Fabio Matamoros Córdoba, nos echó la data diciendo que “cada minuto cuenta” cuando se trata de salvar vidas. Él enfatizó que los avances tecnológicos ofrecen esperanza, permitiendo ganar tiempo de calidad para las pacientes. Pero a ver, Doctor, con estos tiempos, ¿qué esperanzas nos da?
Y ni hablar de las mujeres jóvenes. Las guías de tamizaje se enfocan principalmente en pacientes mayores de 40 años, dejando a muchas menores desprotegidas. Esto significa que algunas no se realizan mamografías o ultrasonidos de forma rutinaria, retrasando el diagnóstico. ¡Una torta! Porque estas jovencitas también pueden padecer la enfermedad, y ahí es donde entra la necesidad de crear conciencia y cambiar esos protocolos.
Ahora bien, recordemos que el cáncer de mama es la principal causa de enfermedad oncológica en nosotras, las mujeres costarricenses. A pesar de que tenemos una tasa de sobrevida bastante alta, alrededor del 87%, la detección tardía sigue siendo un problemón. Y eso, amigos, es culpa nuestra también. No esperar al aviso del médico y hacernos chequeos preventivos es fundamental.
Para intentar solucionar esto, se reforzaron los lineamientos de atención, estableciendo plazos máximos de 60 días para la cirugía luego de un diagnóstico positivo, e ideales de 30 días. Además, el Ministerio de Salud sacó una nueva norma, fijando plazos obligatorios para mamografías, diagnósticos y procedimientos. Según la ley, una mamografía debería hacerse en 30 días como máximo, y el informe en 30 días más, ¡pero estamos superando esos plazos a lo loco!
El oncólogo radioterapeuta Rolando Loría nos comentó que, si bien la enfermedad afecta tradicionalmente a mujeres mayores de 50 años, cada vez vemos más casos en edades tempranas. En Latinoamérica, el 31% de los casos corresponden a mujeres menores de 50 años, lo que implica nuevos retos para nuestro sistema de salud. ¿Será que estamos perdiendo la batalla contra el cáncer de mama en Costa Rica?
En fin, la situación es preocupante y exige soluciones urgentes. Mientras tanto, ¿ustedes qué opinan? ¿Creen que el Estado está haciendo lo suficiente para combatir esta enfermedad? ¿Deberíamos exigir más controles y sanciones a la CCSS por incumplir los plazos establecidos? Compartan sus ideas en el foro, porque este es un tema que nos concierne a todas.
Según datos frescos de la Caja, el tiempo promedio de espera para hacerse este examen crucial es de 140 días, ¡cuatro meses y medio! Eso es un montón de tiempo, brete que puede marcar la diferencia entre detectar la enfermedad temprano y enfrentarla en etapas avanzadas. Y hablando de etapas, la Organización Mundial de la Salud nos recuerda que cada año se diagnostican millones de casos de cáncer de mama en el mundo, y muchos desarrollan metástasis incluso con un diagnóstico precoz. ¡Qué sal!
Un especialista, el doctor Fabio Matamoros Córdoba, nos echó la data diciendo que “cada minuto cuenta” cuando se trata de salvar vidas. Él enfatizó que los avances tecnológicos ofrecen esperanza, permitiendo ganar tiempo de calidad para las pacientes. Pero a ver, Doctor, con estos tiempos, ¿qué esperanzas nos da?
Y ni hablar de las mujeres jóvenes. Las guías de tamizaje se enfocan principalmente en pacientes mayores de 40 años, dejando a muchas menores desprotegidas. Esto significa que algunas no se realizan mamografías o ultrasonidos de forma rutinaria, retrasando el diagnóstico. ¡Una torta! Porque estas jovencitas también pueden padecer la enfermedad, y ahí es donde entra la necesidad de crear conciencia y cambiar esos protocolos.
Ahora bien, recordemos que el cáncer de mama es la principal causa de enfermedad oncológica en nosotras, las mujeres costarricenses. A pesar de que tenemos una tasa de sobrevida bastante alta, alrededor del 87%, la detección tardía sigue siendo un problemón. Y eso, amigos, es culpa nuestra también. No esperar al aviso del médico y hacernos chequeos preventivos es fundamental.
Para intentar solucionar esto, se reforzaron los lineamientos de atención, estableciendo plazos máximos de 60 días para la cirugía luego de un diagnóstico positivo, e ideales de 30 días. Además, el Ministerio de Salud sacó una nueva norma, fijando plazos obligatorios para mamografías, diagnósticos y procedimientos. Según la ley, una mamografía debería hacerse en 30 días como máximo, y el informe en 30 días más, ¡pero estamos superando esos plazos a lo loco!
El oncólogo radioterapeuta Rolando Loría nos comentó que, si bien la enfermedad afecta tradicionalmente a mujeres mayores de 50 años, cada vez vemos más casos en edades tempranas. En Latinoamérica, el 31% de los casos corresponden a mujeres menores de 50 años, lo que implica nuevos retos para nuestro sistema de salud. ¿Será que estamos perdiendo la batalla contra el cáncer de mama en Costa Rica?
En fin, la situación es preocupante y exige soluciones urgentes. Mientras tanto, ¿ustedes qué opinan? ¿Creen que el Estado está haciendo lo suficiente para combatir esta enfermedad? ¿Deberíamos exigir más controles y sanciones a la CCSS por incumplir los plazos establecidos? Compartan sus ideas en el foro, porque este es un tema que nos concierne a todas.