MANO DURA CONTRA RECEPTADORES
José Luis Vásquez Mora *
Una de las principales inquietudes con las que llegué a la Asamblea Legislativa, en mayo de 2006, fue trabajar para que se endurecieran las penas en contra de los receptadores, por la vil actividad a la que se dedican, haciendo negocios con lo robado y promoviendo la mayor ruina física y espiritual de muchos jóvenes víctimas de las drogas.
Con ese propósito, en octubre de ese mismo año presenté un proyecto para reformar el artículo 323 del Código Penal, partiendo de que la convicción de que en tanto no exista quien compre lo robado, se reducen los robos y se reduce el consumo de drogas.
La iniciativa fue retomada y enriquecida en la Comisión sobre Seguridad Ciudadana, en el marco del proyecto sobre Protección a Víctimas y Testigos, que a partir de este miércoles 04 de marzo, es Ley de la República.
De acuerdo al texto aprobado, será reprimido con prisión de seis meses a cinco años, y con veinte a 60 días multa, al que adquiera, reciba y oculte dinero, cosas o bienes provenientes de un delito.
También se castigará con prisión de seis meses a cuatro años al que reciba cosas o bienes que, de acuerdo a las circunstancias, se presuma son fruto de un delito, y se enviará a la cárcel por un período de tres meses a cuatro años, a quien desaparezca o ayude a desaparecer, rastros, pruebas o instrumentos de un delito, o el producto de éste.
En la misma dirección, se aprobó una reforma al Código Municipal para suspender la licencia de los negocios donde se encuentren objetos denunciados como robados.
De esta manera, se están creando instrumentos reales y eficaces para castigar como merecen a quienes se enriquecen comprando cable de vías públicas, celulares, electrodomésticos y otros bienes, producto de robos caseros o en la vía pública, causándole un gran daño al país y a muchas familias, además de contribuir a que muchos jóvenes se hundan más en la drogadicción.
Conozco muy bien esta realidad, porque la veo cotidianamente en mi provincia, Limón, y porque la viví dolorosamente en compañía de mi familia durante muchos años.
Me satisface haber contribuido con mis vivencias a sensibilizar el pleno legislativo, y agradezco la actitud resuelta de todas y todos los compañeros diputados para legislar sobre una materia de gran interés nacional y mucha preocupación para cientos de familias costarricenses.
* Diputado PUSC
