¡Aguante la medicina nacional, pura vida! Aquí les va la nota de cómo el Hospital Monseñor Sanabria en Puntarenas hizo historia ayer, realizando la primera laringectomía total con disección cervical radical en la región. Un procedimiento más complejo que buscar estacionamiento en el Walmart un día sábado, y vaya que salió redondo.
Para ponerles un poco de contexto, la laringectomía total es una cirugía de último recurso para pacientes con cáncer de laringe avanzado. Básicamente, se saca toda la laringe y los ganglios del cuello afectados. No es cositas, ¡es un brete! Don Orlando Jiménez, un buen señor de Orotina, estaba batallando contra un carcinoma epidermoide bien agresivo, que le dificultaba hasta respirar y hablar normal. Ya estaban pensando en mandarlo pa’l GAM (Gran Area Metropolitana), pero bueno… ¡qué chiva que pudieron resolverlo ahí mismo!
Según contaron los doctores, el caso de Don Orlando era un verdadero desafío. Lo primero que hicieron fue colocarle una traqueostomía para ayudarlo a respirar mientras preparaban la cirugía. Después, el equipo liderado por el Dr. Roberto Calzada Lang se puso manos a la obra durante unas ocho largas horas. Se sacaron la laringe entera, todos los ganglios sospechosos y reconstruyeron la faringe, todo eso con la precisión de un relojero suizo. "Estos procedimientos normalmente se manejan con quimio y radioterapia en etapas iniciales,” explicó el doctor, “pero en el caso de Don Orlando, la lesión ya era considerable, así que la cirugía era la mejor opción.”
Y hablando de opciones, la familia de Don Orlando no podía estar más agradecida. Su hija, Kenia Jiménez, me contó que llegaron al hospital en condiciones complicadas y recibieron un trato espectacular. “Estamos sumamente agradecidos con todo el personal,” dijo Kenia entre lágrimas de emoción. Esperan que la cirugía le devuelva a su papá la calidad de vida que tanto necesita. Imagínate, tener a tu padre luchando contra el cáncer... ¡qué carga! Pero al final, la fe y el talento médico dieron frutos.
Pero esto no es solo una victoria individual; también representa un paso gigante para la salud pública en nuestras provincias. Como bien recalcó el Dr. Randall Álvarez Juárez, el director del hospital, antes tendrían que transferir estos casos al GAM, pero ahora tienen la capacidad de atenderlos directamente en Puntarenas. “Es una muestra más de las grandes cosas que vamos a seguir haciendo para mejorar la calidad de vida de nuestra gente,” afirmó. Esto significa acceso a servicios especializados para más personas, ¡y eso siempre es motivo para celebrar!
Este tipo de avances demuestran que no hay que irnos lejos para recibir atención médica de primer mundo. Con inversión, capacitación y compromiso, nuestros hospitales regionales pueden ofrecer tratamientos complejos y salvar vidas. Es importante reconocer el esfuerzo de estos profesionales que trabajan incansablemente para brindar un mejor futuro a todos los costarricenses. Además, recalca la importancia de la detección temprana del cáncer de laringe; cuanto antes se diagnostique, mayores serán las posibilidades de tratamiento exitoso, ¡obvio!
Ahora bien, este logro no sería posible sin el apoyo continuo del CCSS y la dedicación incondicional de todo el equipo médico. Es un ejemplo de cómo podemos construir un sistema de salud más sólido y accesible para todos. La verdad, este caso me recordó mucho aquella vez que casi me afuego la casa intentando hacer gallo pinto… ¡me saqué de un apuro! Pero esto es diferente, esto es salvar una vida, ¡eso sí que es pura vida!
Con este triunfo, el Hospital Monseñor Sanabria reafirma su compromiso con la excelencia médica y abre nuevas puertas para la atención oncológica en Puntarenas. Entonces, queridos foreros, teniendo en cuenta este logro y la importancia de la detección temprana del cáncer de laringe, ¿creen que el gobierno debería invertir aún más en equipos y especialistas para fortalecer los hospitales regionales y evitar traslados innecesarios al GAM?
Para ponerles un poco de contexto, la laringectomía total es una cirugía de último recurso para pacientes con cáncer de laringe avanzado. Básicamente, se saca toda la laringe y los ganglios del cuello afectados. No es cositas, ¡es un brete! Don Orlando Jiménez, un buen señor de Orotina, estaba batallando contra un carcinoma epidermoide bien agresivo, que le dificultaba hasta respirar y hablar normal. Ya estaban pensando en mandarlo pa’l GAM (Gran Area Metropolitana), pero bueno… ¡qué chiva que pudieron resolverlo ahí mismo!
Según contaron los doctores, el caso de Don Orlando era un verdadero desafío. Lo primero que hicieron fue colocarle una traqueostomía para ayudarlo a respirar mientras preparaban la cirugía. Después, el equipo liderado por el Dr. Roberto Calzada Lang se puso manos a la obra durante unas ocho largas horas. Se sacaron la laringe entera, todos los ganglios sospechosos y reconstruyeron la faringe, todo eso con la precisión de un relojero suizo. "Estos procedimientos normalmente se manejan con quimio y radioterapia en etapas iniciales,” explicó el doctor, “pero en el caso de Don Orlando, la lesión ya era considerable, así que la cirugía era la mejor opción.”
Y hablando de opciones, la familia de Don Orlando no podía estar más agradecida. Su hija, Kenia Jiménez, me contó que llegaron al hospital en condiciones complicadas y recibieron un trato espectacular. “Estamos sumamente agradecidos con todo el personal,” dijo Kenia entre lágrimas de emoción. Esperan que la cirugía le devuelva a su papá la calidad de vida que tanto necesita. Imagínate, tener a tu padre luchando contra el cáncer... ¡qué carga! Pero al final, la fe y el talento médico dieron frutos.
Pero esto no es solo una victoria individual; también representa un paso gigante para la salud pública en nuestras provincias. Como bien recalcó el Dr. Randall Álvarez Juárez, el director del hospital, antes tendrían que transferir estos casos al GAM, pero ahora tienen la capacidad de atenderlos directamente en Puntarenas. “Es una muestra más de las grandes cosas que vamos a seguir haciendo para mejorar la calidad de vida de nuestra gente,” afirmó. Esto significa acceso a servicios especializados para más personas, ¡y eso siempre es motivo para celebrar!
Este tipo de avances demuestran que no hay que irnos lejos para recibir atención médica de primer mundo. Con inversión, capacitación y compromiso, nuestros hospitales regionales pueden ofrecer tratamientos complejos y salvar vidas. Es importante reconocer el esfuerzo de estos profesionales que trabajan incansablemente para brindar un mejor futuro a todos los costarricenses. Además, recalca la importancia de la detección temprana del cáncer de laringe; cuanto antes se diagnostique, mayores serán las posibilidades de tratamiento exitoso, ¡obvio!
Ahora bien, este logro no sería posible sin el apoyo continuo del CCSS y la dedicación incondicional de todo el equipo médico. Es un ejemplo de cómo podemos construir un sistema de salud más sólido y accesible para todos. La verdad, este caso me recordó mucho aquella vez que casi me afuego la casa intentando hacer gallo pinto… ¡me saqué de un apuro! Pero esto es diferente, esto es salvar una vida, ¡eso sí que es pura vida!
Con este triunfo, el Hospital Monseñor Sanabria reafirma su compromiso con la excelencia médica y abre nuevas puertas para la atención oncológica en Puntarenas. Entonces, queridos foreros, teniendo en cuenta este logro y la importancia de la detección temprana del cáncer de laringe, ¿creen que el gobierno debería invertir aún más en equipos y especialistas para fortalecer los hospitales regionales y evitar traslados innecesarios al GAM?