¡Aguántate! Resulta que el candidato del PUSC, Juan Carlos Hidalgo, le dio duro a Europa con su plan pa' frenar el narcotráfico en Puerto Moín, y ahí sí, ¡le agarraron el rollo! El Partido Popular Europeo (PPE), que maneja las riendas del Parlamento Europeo, le dio el visto bueno oficial, ¡qué tuanis!
Pa’ ponerlos al día, esto se enmarca en una movida grande de la Unión Europea pa' colaborar más con Latinoamérica en temas de seguridad. Buscan apurar la pelea contra el crimen organizado y controlar el tráfico de drogas, poniendo especial atención en los puertos –y claro, Puerto Moín está bien arriba en la lista– y en las rutas marítimas.
Hidalgo, aprovechando su viaje por tierras europeas, les presentó su propuesta: blindar las exportaciones costarricenses pa’ que lleguen limpias al viejo continente. La idea es trabajar codo a codo con la policía, compartir información de inteligencia y recibir ayuda técnica de Europol. Como dice él mismo, ya tienen el apoyo de sus compañeros europeos pa’ hacer un acuerdo de cooperación policial una vez que asuman la presidencia, ¡eso sí que es romperla!
Pero no se crean que esto es cuento chino. El PPE tiene un plan detallado: fortalecer la colaboración directa, intercambiar información de inteligencia, crear equipos de investigación mixtos y capacitar a la policía. Básicamente, quieren montar un frente común contra el crimen organizado, el narcotráfico y el lavado de plata.
Lo más interesante es que proponen una política integral de seguridad portuaria y marítima a nivel europeo, donde se involucren países latinoamericanos como nosotros. Imagínense una red de puertos aliados en toda la región, funcionando como centros de alerta temprana y control de riesgos. ¡Y encima quieren conectar todos los sistemas informáticos de las aduanas y policías en tiempo real! Una locura, pero a ver qué sale diay.
Una de las cosas más fuertes del respaldo europeo es el apoyo a proyectos conjuntos directos entre Europol y países latinoamericanos. Se trata de vigilar y revisar las exportaciones que van pa' Europa para evitar que se mezclen con droga. Por eso señalan directamente a Puerto Moín: la preocupación por el tráfico de drogas en Costa Rica ha hecho que nuestro puerto sea un posible escenario pa’ un proyecto piloto de Europol, ¡y hasta podrían extenderlo a otros países de la zona!
Para Hidalgo, este apoyo es crucial. Dice que quiere quitarle a Costa Rica el atractivo que tiene el crimen organizado. Y no es pa’ menos: según las estadísticas que él menciona, entran al país alrededor de 500 toneladas de cocaína cada año. Eso demuestra la urgencia de reforzar la cooperación internacional, asegurar los puertos, combatir el lavado de dinero y dar opciones a los jóvenes que corren peligro de meterse en esas vainas.
Todo esto viene en un momento complicado para el país, porque nos estamos volviendo más violentos. En los últimos quince años, Costa Rica se ha convertido en un punto estratégico para los cárteles internacionales, especialmente para exportar cocaína a Europa desde Puerto Moín. Entonces, ¿ustedes creen que este plan con la Unión Europea realmente podrá darle un respiro al país y frenar la marea de violencia o será solo otra promesa electoral que se va al traste?
Pa’ ponerlos al día, esto se enmarca en una movida grande de la Unión Europea pa' colaborar más con Latinoamérica en temas de seguridad. Buscan apurar la pelea contra el crimen organizado y controlar el tráfico de drogas, poniendo especial atención en los puertos –y claro, Puerto Moín está bien arriba en la lista– y en las rutas marítimas.
Hidalgo, aprovechando su viaje por tierras europeas, les presentó su propuesta: blindar las exportaciones costarricenses pa’ que lleguen limpias al viejo continente. La idea es trabajar codo a codo con la policía, compartir información de inteligencia y recibir ayuda técnica de Europol. Como dice él mismo, ya tienen el apoyo de sus compañeros europeos pa’ hacer un acuerdo de cooperación policial una vez que asuman la presidencia, ¡eso sí que es romperla!
Pero no se crean que esto es cuento chino. El PPE tiene un plan detallado: fortalecer la colaboración directa, intercambiar información de inteligencia, crear equipos de investigación mixtos y capacitar a la policía. Básicamente, quieren montar un frente común contra el crimen organizado, el narcotráfico y el lavado de plata.
Lo más interesante es que proponen una política integral de seguridad portuaria y marítima a nivel europeo, donde se involucren países latinoamericanos como nosotros. Imagínense una red de puertos aliados en toda la región, funcionando como centros de alerta temprana y control de riesgos. ¡Y encima quieren conectar todos los sistemas informáticos de las aduanas y policías en tiempo real! Una locura, pero a ver qué sale diay.
Una de las cosas más fuertes del respaldo europeo es el apoyo a proyectos conjuntos directos entre Europol y países latinoamericanos. Se trata de vigilar y revisar las exportaciones que van pa' Europa para evitar que se mezclen con droga. Por eso señalan directamente a Puerto Moín: la preocupación por el tráfico de drogas en Costa Rica ha hecho que nuestro puerto sea un posible escenario pa’ un proyecto piloto de Europol, ¡y hasta podrían extenderlo a otros países de la zona!
Para Hidalgo, este apoyo es crucial. Dice que quiere quitarle a Costa Rica el atractivo que tiene el crimen organizado. Y no es pa’ menos: según las estadísticas que él menciona, entran al país alrededor de 500 toneladas de cocaína cada año. Eso demuestra la urgencia de reforzar la cooperación internacional, asegurar los puertos, combatir el lavado de dinero y dar opciones a los jóvenes que corren peligro de meterse en esas vainas.
Todo esto viene en un momento complicado para el país, porque nos estamos volviendo más violentos. En los últimos quince años, Costa Rica se ha convertido en un punto estratégico para los cárteles internacionales, especialmente para exportar cocaína a Europa desde Puerto Moín. Entonces, ¿ustedes creen que este plan con la Unión Europea realmente podrá darle un respiro al país y frenar la marea de violencia o será solo otra promesa electoral que se va al traste?
