¡Ay, Dios mío! Parece que la cosa se nos está yendo al brinco. Según el OIJ, ¡más del 70% de los sospechosos que agarran terminan en la cárcel! Tres mil personas en los últimos tres años, señores, ¡tres mil varas que ya no andan caminando libres!
Y ojo, esto viene a contradecir al mismísimo presidente Chaves, quien siempre anda diciendo que soltan a la banda, que le dan 'cariñitos' en máxima seguridad. ¡Pero la realidad es otra! Esto lo confirma el mismo Randall Zúñiga, el jefe del OIJ, quien salió a aclarar las cosas ante el Congreso.
Zúñiga explicó que, aunque la prisión preventiva debería ser la última opción, la verdad es que cuando el OIJ y la Fiscalía van con toda, prácticamente todos los que presentan para que les pongan una medida cautelar terminan tras las rejas. Lo que nos hace pensar, ¿estamos usando la herramienta correcta o simplemente estamos llenando las cárceles?
Ahora, claro, hay matices. No todos los detenidos son iguales. Algunos solo sirvieron para ayudar a identificar a alguien más, para una simple consulta en la base de datos o para pasarle unos billetes por SINPE. Pero los pesos pesados, esos que están metidos hasta el cuello en homicidios o secuestros, esos sí que suelen quedarse dando tumbos en la cárcel.
El Fiscal General, Carlo Díaz, dice que cada caso se evalúa a conciencia, que no se improvisa nada. Que se enfocan en la delincuencia violenta, en el crimen organizado y en la corrupción. Y que cuando consideran que es indispensable, piden la prisión preventiva. ¡Eso suena bien en papel, mae!
Pero la cosa no termina ahí. El aumento de detenciones ha desbordado al sistema penitenciario. Ya tuvieron que empezar a buscar cómo ampliar la cárcel de la Reforma, precisamente porque están metiendo a tanta gente. ¡Qué carga! Imagínate, el Ministro de Justicia, Gerald Campos, reconoció que amanecen con un 40% de sobrepoblación. Una torta, diay.
Y luego entra el presidente Chaves con su discurso de que los jueces liberan a los delincuentes, que no saben qué hacer con ellos. ¡Un verdadero despache! Acusa a la judicatura, al Ministerio Público y al OIJ de meterle mano al asunto. Dice que Costa Rica necesita un cambio radical en el Poder Judicial. ¿Será que busca excusas para no asumir la responsabilidad?
¿Será que estamos creando un círculo vicioso? Más policías en las calles, más detenciones, más gente en la cárcel... ¿Estamos realmente atacando las causas del delito o solo estamos parcheando el problema? Y acá va la pregunta para el foro, mi gente: ¿Ustedes creen que deberíamos endurecer las leyes penales o invertir más en programas sociales y educativos para prevenir el delito desde la raíz? ¡Díganme qué piensan!
Y ojo, esto viene a contradecir al mismísimo presidente Chaves, quien siempre anda diciendo que soltan a la banda, que le dan 'cariñitos' en máxima seguridad. ¡Pero la realidad es otra! Esto lo confirma el mismo Randall Zúñiga, el jefe del OIJ, quien salió a aclarar las cosas ante el Congreso.
Zúñiga explicó que, aunque la prisión preventiva debería ser la última opción, la verdad es que cuando el OIJ y la Fiscalía van con toda, prácticamente todos los que presentan para que les pongan una medida cautelar terminan tras las rejas. Lo que nos hace pensar, ¿estamos usando la herramienta correcta o simplemente estamos llenando las cárceles?
Ahora, claro, hay matices. No todos los detenidos son iguales. Algunos solo sirvieron para ayudar a identificar a alguien más, para una simple consulta en la base de datos o para pasarle unos billetes por SINPE. Pero los pesos pesados, esos que están metidos hasta el cuello en homicidios o secuestros, esos sí que suelen quedarse dando tumbos en la cárcel.
El Fiscal General, Carlo Díaz, dice que cada caso se evalúa a conciencia, que no se improvisa nada. Que se enfocan en la delincuencia violenta, en el crimen organizado y en la corrupción. Y que cuando consideran que es indispensable, piden la prisión preventiva. ¡Eso suena bien en papel, mae!
Pero la cosa no termina ahí. El aumento de detenciones ha desbordado al sistema penitenciario. Ya tuvieron que empezar a buscar cómo ampliar la cárcel de la Reforma, precisamente porque están metiendo a tanta gente. ¡Qué carga! Imagínate, el Ministro de Justicia, Gerald Campos, reconoció que amanecen con un 40% de sobrepoblación. Una torta, diay.
Y luego entra el presidente Chaves con su discurso de que los jueces liberan a los delincuentes, que no saben qué hacer con ellos. ¡Un verdadero despache! Acusa a la judicatura, al Ministerio Público y al OIJ de meterle mano al asunto. Dice que Costa Rica necesita un cambio radical en el Poder Judicial. ¿Será que busca excusas para no asumir la responsabilidad?
¿Será que estamos creando un círculo vicioso? Más policías en las calles, más detenciones, más gente en la cárcel... ¿Estamos realmente atacando las causas del delito o solo estamos parcheando el problema? Y acá va la pregunta para el foro, mi gente: ¿Ustedes creen que deberíamos endurecer las leyes penales o invertir más en programas sociales y educativos para prevenir el delito desde la raíz? ¡Díganme qué piensan!
