¡Ay, mi Dios! Resulta que somos bien precavidos, ¿eh? Un estudio nuevo nos cayó como balde de agua fría: apenas el 10% de nosotros nos conectamos a las redes Wi-Fi que ofrecen los locales comerciales. ¡Una décima parte, diay! Parece que preferimos pagarle al operador que arriesgarnos a qué sé yo... ¿Será paranoia tecnológica o pura costumbre?
El estudio, que salió del horno gracias al Instituto de Estudios Sociales en Población (Idespo) y la Escuela de Sociología de la U, nos pinta un cuadro interesante. Nos preguntaron cómo accedemos a internet y, bueno, parece que seguimos aferrados al buenísimo internet de banda ancha en casa. El 71% de nosotros, según los números, prefiere la conexión fija. Eso sí demuestra que tener fibra óptica en casa sigue siendo oro.
Y ni hablar del celular. El plan móvil pospago lo usan el 58%, y el prepago, aunque menos, tampoco se queda atrás con un 23%. Esto quiere decir que el internet en el bolsillo, ya sea pagadito o recargadito, es casi tan importante como llevar cartera. Ya nos vamos acostumbrando a estar conectados a cualquier hora y en cualquier lugar, ¿verdad, mae?
Si sumamos todas las opciones móviles, llegamos a un 81% del total de encuestados. Así que, aunque le demos más cariño al internet de casa, el móvil va pegao’ y cumple un papel importantísimo. Es como el fiel compañero que te rescata cuando se te agota el data en casa, o cuando andas correteando por ahí sin un tomacorriente a la vista.
Lo curioso viene con el acceso desde el trabajo, donde alrededor del 20% de la gente tiene conexión provista por el jefe. Eso demuestra que algunas empresas ya le meten duro a la productividad y facilitan el brete a sus empleados. Pero la verdadera sorpresa es el Wi-Fi gratuito en los comercios: ¡apenas un 10%! Ahí sí que estamos bien cuidadosos, paranoicos quizás, o simplemente no nos interesa tanto la conexión gratuita.
Los investigadores explican que esto es “esperable”, porque el Wi-Fi en los locales es más bien un servicio complementario y algo así como esporádico. No es como tener internet en casa, donde puedes descargarte toda la serie que quieras sin preocuparte. Pero aún así, me da pena pensar que estemos perdiendo oportunidades de aprovechar estas conexiones gratuitas, especialmente si andamos escasos de data en el celular. Quizás deberíamos cambiar un poquito esa mentalidad y confiarnos más en estos servicios.
Al final, el estudio revela que la multiconectividad es la onda ahora. Casi todos tenemos más de un tipo de acceso a internet. Tenemos el de casa, el del celular, y hasta el del trabajo. Es como tener varias varas para salir del apuro, y eso nos permite estar conectados en diferentes situaciones: en casa viendo Netflix, en el bus checando el WhatsApp, o en la oficina enviando emails. Ya vivimos en la era digital, y resistirse es inútil – ¡y hasta medio despaché!
Entonces, dime tú… ¿Por qué crees que tan pocos ticos aprovechamos el Wi-Fi gratuito en los comercios? ¿Es miedo a virus, desconfianza en la seguridad de las redes, o simplemente no nos importa tanto? ¡Déjame tu opinión en el foro y veamos qué sale de este brete!
El estudio, que salió del horno gracias al Instituto de Estudios Sociales en Población (Idespo) y la Escuela de Sociología de la U, nos pinta un cuadro interesante. Nos preguntaron cómo accedemos a internet y, bueno, parece que seguimos aferrados al buenísimo internet de banda ancha en casa. El 71% de nosotros, según los números, prefiere la conexión fija. Eso sí demuestra que tener fibra óptica en casa sigue siendo oro.
Y ni hablar del celular. El plan móvil pospago lo usan el 58%, y el prepago, aunque menos, tampoco se queda atrás con un 23%. Esto quiere decir que el internet en el bolsillo, ya sea pagadito o recargadito, es casi tan importante como llevar cartera. Ya nos vamos acostumbrando a estar conectados a cualquier hora y en cualquier lugar, ¿verdad, mae?
Si sumamos todas las opciones móviles, llegamos a un 81% del total de encuestados. Así que, aunque le demos más cariño al internet de casa, el móvil va pegao’ y cumple un papel importantísimo. Es como el fiel compañero que te rescata cuando se te agota el data en casa, o cuando andas correteando por ahí sin un tomacorriente a la vista.
Lo curioso viene con el acceso desde el trabajo, donde alrededor del 20% de la gente tiene conexión provista por el jefe. Eso demuestra que algunas empresas ya le meten duro a la productividad y facilitan el brete a sus empleados. Pero la verdadera sorpresa es el Wi-Fi gratuito en los comercios: ¡apenas un 10%! Ahí sí que estamos bien cuidadosos, paranoicos quizás, o simplemente no nos interesa tanto la conexión gratuita.
Los investigadores explican que esto es “esperable”, porque el Wi-Fi en los locales es más bien un servicio complementario y algo así como esporádico. No es como tener internet en casa, donde puedes descargarte toda la serie que quieras sin preocuparte. Pero aún así, me da pena pensar que estemos perdiendo oportunidades de aprovechar estas conexiones gratuitas, especialmente si andamos escasos de data en el celular. Quizás deberíamos cambiar un poquito esa mentalidad y confiarnos más en estos servicios.
Al final, el estudio revela que la multiconectividad es la onda ahora. Casi todos tenemos más de un tipo de acceso a internet. Tenemos el de casa, el del celular, y hasta el del trabajo. Es como tener varias varas para salir del apuro, y eso nos permite estar conectados en diferentes situaciones: en casa viendo Netflix, en el bus checando el WhatsApp, o en la oficina enviando emails. Ya vivimos en la era digital, y resistirse es inútil – ¡y hasta medio despaché!
Entonces, dime tú… ¿Por qué crees que tan pocos ticos aprovechamos el Wi-Fi gratuito en los comercios? ¿Es miedo a virus, desconfianza en la seguridad de las redes, o simplemente no nos importa tanto? ¡Déjame tu opinión en el foro y veamos qué sale de este brete!