¡Ay, Dios mío! Parece que seguimos dando tumbos con esto del traslado del Consejo Nacional de Producción (CNP). Resulta que ahora aparece un informe que pinta la situación en las instalaciones del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) como… bueno, digamos que no precisamente como un parque temático. Ya habíamos tenido algunas alertas en octubre pasado, pero parece que nadie le puso mucho empeño a arreglar las cosas. Ahora nos toca lidiar con esto, y sinceramente, ¡qué torta!
La movida, según fuentes cercanas al Foro de Costa Rica, es que el nuevo reporte de análisis es bastante claro: el lugar donde quieren meter a todo el CNP está lleno de problemas. No hablamos de macetas secas o una lámpara fundida, sino de cosas más serias que pueden poner en peligro la vida de los funcionarios. Hablamos de alarmas inexistentes, salidas de emergencia que parecen sacadas de una película de terror y un ambiente tan caluroso que te derrites.
Para empezar, olvidémonos de los extintores y detectores de humo. ¡Nada de eso! Y las puertas de evacuación, pa’ colmo, son más bien estrechas y hechas de vidrio con apertura eléctrica. ¿Imaginen qué pasa si se va la luz? Quedarías atrapado como pez en coma, ¡sin botón antipánico! Esto mismo lo vieron hace meses, pero parece que esas observaciones fueron a parar al basurero, y siguen siendo una realidad preocupante. Este medio ha corroborado que la situación no ha cambiado.
Además, la comodidad no es precisamente el punto fuerte de este lugar. El techo bajo y la falta de ventilación hacen que el calor se acumule como en un sauna. Pasar horas ahí adentro, especialmente con este clima que tenemos, puede acabar con la salud de cualquiera. Dicen que hasta podrían necesitar empapelar sus frentes con agua pa' refrescarse. Y lo peor es que ni siquiera piensan ponerle aire acondicionado, ¡tremendo descuido!
Y no nos olvidemos del laberinto que tienen montado como pasillos. Unas vueltas y revueltas que te dejan mareado y confundido, haciendo que escapar en caso de emergencia sea más difícil que encontrar estacionamiento en Escazú durante Navidad. ¿Te imaginas la estampida generalizada? Seguramente alguien terminaria jalándose una torta en la fuga.
En cuanto a la electricidad, parece que tampoco le pusieron mucha atención. Los enchufes están ubicados en lugares ridículos, algunos detrás de escritorios, otros en medio del pasillo. Un cable cruzado y ¡bum!, incendio asegurado. Y encima, existe el riesgo de que el sistema eléctrico esté sobrecargado. Realmente, es un cóctel molotov esperando encenderse, diay.
El Sindicato de Empleados del CNP y Afines (Sinconapro) ya había levantado la voz desde marzo, pidiendo estudios técnicos que justificaran este traslado. Pero parece que a algunos les encanta hacer las cosas a lo loco, sin pensar en las consecuencias. Incluso la Asesoría Jurídica advirtió sobre la necesidad de proteger los derechos laborales, ¡pero quién escucha! Lo importante es ahorrar unos cuantos mangos, aunque eso signifique poner en riesgo la integridad de los trabajadores. El Ministro Carvajal, pa' justificar la decisión, dice que el edificio cuenta con 'todas las comodidades'. ¡Pero a él le vale, trabaja en su propia oficina!”, exclamó un miembro del sindicato, visiblemente frustrado.
Después de todo este panorama, me pregunto: ¿No creen que sería prudente frenar este traslado hasta que las instalaciones del MAG cumplan con todas las normas de seguridad y salud ocupacional? ¿Será que estamos priorizando el ahorro económico por encima de la seguridad y el bienestar de nuestros funcionarios? ¡Compartan sus opiniones en el foro, qué les parece esta jugada?
La movida, según fuentes cercanas al Foro de Costa Rica, es que el nuevo reporte de análisis es bastante claro: el lugar donde quieren meter a todo el CNP está lleno de problemas. No hablamos de macetas secas o una lámpara fundida, sino de cosas más serias que pueden poner en peligro la vida de los funcionarios. Hablamos de alarmas inexistentes, salidas de emergencia que parecen sacadas de una película de terror y un ambiente tan caluroso que te derrites.
Para empezar, olvidémonos de los extintores y detectores de humo. ¡Nada de eso! Y las puertas de evacuación, pa’ colmo, son más bien estrechas y hechas de vidrio con apertura eléctrica. ¿Imaginen qué pasa si se va la luz? Quedarías atrapado como pez en coma, ¡sin botón antipánico! Esto mismo lo vieron hace meses, pero parece que esas observaciones fueron a parar al basurero, y siguen siendo una realidad preocupante. Este medio ha corroborado que la situación no ha cambiado.
Además, la comodidad no es precisamente el punto fuerte de este lugar. El techo bajo y la falta de ventilación hacen que el calor se acumule como en un sauna. Pasar horas ahí adentro, especialmente con este clima que tenemos, puede acabar con la salud de cualquiera. Dicen que hasta podrían necesitar empapelar sus frentes con agua pa' refrescarse. Y lo peor es que ni siquiera piensan ponerle aire acondicionado, ¡tremendo descuido!
Y no nos olvidemos del laberinto que tienen montado como pasillos. Unas vueltas y revueltas que te dejan mareado y confundido, haciendo que escapar en caso de emergencia sea más difícil que encontrar estacionamiento en Escazú durante Navidad. ¿Te imaginas la estampida generalizada? Seguramente alguien terminaria jalándose una torta en la fuga.
En cuanto a la electricidad, parece que tampoco le pusieron mucha atención. Los enchufes están ubicados en lugares ridículos, algunos detrás de escritorios, otros en medio del pasillo. Un cable cruzado y ¡bum!, incendio asegurado. Y encima, existe el riesgo de que el sistema eléctrico esté sobrecargado. Realmente, es un cóctel molotov esperando encenderse, diay.
El Sindicato de Empleados del CNP y Afines (Sinconapro) ya había levantado la voz desde marzo, pidiendo estudios técnicos que justificaran este traslado. Pero parece que a algunos les encanta hacer las cosas a lo loco, sin pensar en las consecuencias. Incluso la Asesoría Jurídica advirtió sobre la necesidad de proteger los derechos laborales, ¡pero quién escucha! Lo importante es ahorrar unos cuantos mangos, aunque eso signifique poner en riesgo la integridad de los trabajadores. El Ministro Carvajal, pa' justificar la decisión, dice que el edificio cuenta con 'todas las comodidades'. ¡Pero a él le vale, trabaja en su propia oficina!”, exclamó un miembro del sindicato, visiblemente frustrado.
Después de todo este panorama, me pregunto: ¿No creen que sería prudente frenar este traslado hasta que las instalaciones del MAG cumplan con todas las normas de seguridad y salud ocupacional? ¿Será que estamos priorizando el ahorro económico por encima de la seguridad y el bienestar de nuestros funcionarios? ¡Compartan sus opiniones en el foro, qué les parece esta jugada?
