¡Ay, Dios mío! Parece que este proceso electoral nos va a dejar más rayones que un carretero recién salido del brete. Según el último reporte del Observatorio de Comunicación Digital, la mayoría de los comentarios en redes sobre los candidatos a la presidencia son... ¡negativos! Sí, así como lo leyeron. Las plataformas digitales, que tanto prometían ser espacios de diálogo constructivo, se han convertido en arenas virtuales donde se lanzan pullas y se reviven viejas rencillas. ¿Será que estamos tan quemados de política que ya ni podemos verle el lado bueno a nada?
El estudio, realizado entre el 1 de septiembre y el 19 de octubre de este año, revela que alrededor del 60% de los comentarios dirigidos a los aspirantes son de índole negativa. Imagínense eso, casi dos tercios de las conversaciones online giran en torno a críticas, burlas y desconfianza. Y no es que estén hablando de alguna cuestión menor, no señor. Se trata de denuncias graves, acusaciones de espionaje y hasta señalamientos de abuso sexual – ¡qué vara!, si esto no es moviéndole el avispero a cualquiera.
En la tabla de honor (o deshonor, dependiendo de cómo lo vea usted), Claudia Dobles de Agenda Ciudadana encabeza la lista con un 64,7% de comentarios negativos. Luego le siguen Ariel Robles del Frente Amplio (63,9%) y Juan Carlos Hidalgo del PUSC (61,2%). Parece que ninguno de estos mae logra conectar con la gente, o tal vez conectan demasiado con su lado oscuro. A pesar de que el estudio intentó filtrar los famosos “troles digitales”, esos personajes que viven para sembrar el caos en internet, la negatividad persistió. Esto demuestra que el problema es más profundo que unos cuantos bots molestos; hay una corriente subterránea de descontento generalizado.
Lo curioso es que, mientras algunos reciben palazos en redes, otras candidatas como Laura Fernández de Pueblo Soberano, quien viene respaldada por el gobierno actual, también lidera las opiniones positivas. Aunque, ojo, que tampoco escapa de las críticas feroces. Este panorama polarizado refleja, según los expertos, una sociedad dividida, atrapada en un ciclo de desconfianza y hostilidad. Ya ni se puede hablar de política sin que alguien te venga encima con una réplica incendiaria. ¡Es peor que ir al mercado los fines de semana!
El estudio, realizado entre el 1 de septiembre y el 19 de octubre de este año, revela que alrededor del 60% de los comentarios dirigidos a los aspirantes son de índole negativa. Imagínense eso, casi dos tercios de las conversaciones online giran en torno a críticas, burlas y desconfianza. Y no es que estén hablando de alguna cuestión menor, no señor. Se trata de denuncias graves, acusaciones de espionaje y hasta señalamientos de abuso sexual – ¡qué vara!, si esto no es moviéndole el avispero a cualquiera.
En la tabla de honor (o deshonor, dependiendo de cómo lo vea usted), Claudia Dobles de Agenda Ciudadana encabeza la lista con un 64,7% de comentarios negativos. Luego le siguen Ariel Robles del Frente Amplio (63,9%) y Juan Carlos Hidalgo del PUSC (61,2%). Parece que ninguno de estos mae logra conectar con la gente, o tal vez conectan demasiado con su lado oscuro. A pesar de que el estudio intentó filtrar los famosos “troles digitales”, esos personajes que viven para sembrar el caos en internet, la negatividad persistió. Esto demuestra que el problema es más profundo que unos cuantos bots molestos; hay una corriente subterránea de descontento generalizado.
Lo curioso es que, mientras algunos reciben palazos en redes, otras candidatas como Laura Fernández de Pueblo Soberano, quien viene respaldada por el gobierno actual, también lidera las opiniones positivas. Aunque, ojo, que tampoco escapa de las críticas feroces. Este panorama polarizado refleja, según los expertos, una sociedad dividida, atrapada en un ciclo de desconfianza y hostilidad. Ya ni se puede hablar de política sin que alguien te venga encima con una réplica incendiaria. ¡Es peor que ir al mercado los fines de semana!
