¡Ay, dios mío, qué vaina! Resulta que la OECDO y la FAEDO entraron a registrar la casita de la mamabode Josué Méndez Núñez, alias ‘Gato’, el sospechoso de mandar matarle al pobre Geiner Zamora, el subjefe del OIJ de Guápiles. Se llevaron el celu, ¡imagínate!
Todo empezó con el asesinato de Geiner, que recuerdo, lo tumbaron en un bar allá por Guápiles. Las autoridades tenían fuertes sospechas de que ‘Gato’ fue el gatillo, actuando por orden de ‘Diablo’, ese personaje hampa que da qué hablar. Lo agarraron preso hace tiempo, pero la investigación sigue tirándole con fuerza para aclarar toda la movida.
Ahora, resulta que le metieron allanamiento a la madre del ‘Gato’, doña Profe. Parece ser que ella trabaja en un colegio público de Pococí, y encima, ¡ni te cuento!, algunos familiares cercanos de Geiner andaban estudiando allí. Ya se imaginan la tensión que debe haber en el ambiente. ¡Qué cargaita pa’ la doña tener que pasar por esto!
Según fuentes cercanas a la investigación, el celular encontrado en la casa de la madre de 'Gato' va a ser analizado a fondo. Buscan pistas, mensajes, llamadas, cualquier cosita que pueda indicar si sabía de los planes de su hijo o si tenía algún tipo de conexión con la banda de ‘Diablo’. ¡Qué brete se ha metido la señora!
Michael Soto, el jefe del OIJ, salió a declarar que están considerando darle protección a la familia de Geiner Zamora. Dijo que quieren ofrecerles información específica sobre lo sucedido y asegurarse de que estén seguros, pues, claro, con estos asuntos, nunca se sabe. “Le pedí a mis compañeros que vayan a hablar con ellos, que les den una mano”, comentó Soto, visiblemente preocupado.
Y hablando de ‘Gato’, parece que su celda en La Reforma también recibió visita judicial. Allá encontraron más pruebas que están relacionándolo directamente con el crimen de Geiner. Además, su hermana, que anda presa también por otras cosas turbias, podría estar metida en el ajo ayudándolo a tapar las huellas. ¡Menuda familia, diay!
Pero lo más triste de todo es recordar a Geiner, al que tanto extrañan sus familiares. Su esposa, Susana Lazo, contó que lo peor es sentir su ausencia en esos momentos especiales, como graduaciones escolares o cumpleaños. ¡Qué salado perder a alguien así, injustamente!
Con todo esto, me pregunto… ¿Será que realmente estamos golpeando con fuerza a estas organizaciones criminales o solo estamos raspando la superficie? ¿Y cómo podemos garantizar la seguridad de las familias de aquellos que luchan contra el crimen organizado?
Todo empezó con el asesinato de Geiner, que recuerdo, lo tumbaron en un bar allá por Guápiles. Las autoridades tenían fuertes sospechas de que ‘Gato’ fue el gatillo, actuando por orden de ‘Diablo’, ese personaje hampa que da qué hablar. Lo agarraron preso hace tiempo, pero la investigación sigue tirándole con fuerza para aclarar toda la movida.
Ahora, resulta que le metieron allanamiento a la madre del ‘Gato’, doña Profe. Parece ser que ella trabaja en un colegio público de Pococí, y encima, ¡ni te cuento!, algunos familiares cercanos de Geiner andaban estudiando allí. Ya se imaginan la tensión que debe haber en el ambiente. ¡Qué cargaita pa’ la doña tener que pasar por esto!
Según fuentes cercanas a la investigación, el celular encontrado en la casa de la madre de 'Gato' va a ser analizado a fondo. Buscan pistas, mensajes, llamadas, cualquier cosita que pueda indicar si sabía de los planes de su hijo o si tenía algún tipo de conexión con la banda de ‘Diablo’. ¡Qué brete se ha metido la señora!
Michael Soto, el jefe del OIJ, salió a declarar que están considerando darle protección a la familia de Geiner Zamora. Dijo que quieren ofrecerles información específica sobre lo sucedido y asegurarse de que estén seguros, pues, claro, con estos asuntos, nunca se sabe. “Le pedí a mis compañeros que vayan a hablar con ellos, que les den una mano”, comentó Soto, visiblemente preocupado.
Y hablando de ‘Gato’, parece que su celda en La Reforma también recibió visita judicial. Allá encontraron más pruebas que están relacionándolo directamente con el crimen de Geiner. Además, su hermana, que anda presa también por otras cosas turbias, podría estar metida en el ajo ayudándolo a tapar las huellas. ¡Menuda familia, diay!
Pero lo más triste de todo es recordar a Geiner, al que tanto extrañan sus familiares. Su esposa, Susana Lazo, contó que lo peor es sentir su ausencia en esos momentos especiales, como graduaciones escolares o cumpleaños. ¡Qué salado perder a alguien así, injustamente!
Con todo esto, me pregunto… ¿Será que realmente estamos golpeando con fuerza a estas organizaciones criminales o solo estamos raspando la superficie? ¿Y cómo podemos garantizar la seguridad de las familias de aquellos que luchan contra el crimen organizado?