¡Ay, Dios mío! El ambiente ya estaba que ardía, y ahora el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) decidió echar leña al fuego. Resulta que metieron una denuncia penal en la Fiscalía por esos mensajes bien picantes que andan circulando en redes contra ellos. Parece que la gente se le fue allá, tratando de amedrentar a los magistrados después de que pidieran que le levanten la inmunidad al Presidente, ¡ufff!
Todo esto empezó porque el TSE tenía 15 denuncias de beligerancia política contra el Presidente. Ya saben, esas cosas que uno dice en campaña y luego vienen a agarrarte con pinzas. El Tribunal, con toda la calma del mundo, pidió que se investiguen y si es necesario, que se le quite la inmunidad para que pueda enfrentar cargos. Esto obviamente causó un revuelo considerable entre algunos sectores, y ahí empezaron los mensajes amenazantes y las acusaciones fuertes.
Pero ojo, que el TSE no se quedó calladito. En su defensa, recordaron que llevan 76 años protegiendo la voluntad popular, la libertad de pensamiento y, sobre todo, el derecho a disentir. Esa es la base de nuestra democracia, ¿eh? Que todos podamos opinar libremente, aunque no estemos de acuerdo. Como dicen por ahí, 'el que piensa distinto no está loco'.
Lo que sí dijeron los magistrados es que la libertad no puede ser pretexto para promover la violencia o el odio. Ahí tocaron el punto sensible, porque algunos mensajes estaban bastante feos, puros insultos y amenazas directas. Dicen que eso ya es rayando en lo penal y que no se puede permitir que se use la libertad de expresión para atentar contra la seguridad de las personas ni de las instituciones.
Y es que la verdad, este rollo de los mensajes agresivos en redes sociales pone en peligro la estabilidad política del país, especialmente con las elecciones a la vuelta de la esquina. Ya estamos viendo cómo se polariza la sociedad y cómo se radicalizan las posturas. Necesitamos bajarle un poquito a la tensión y enfocarnos en construir un país donde todos nos respetemos, incluso cuando tengamos ideas diferentes.
"Esas actitudes no se corresponden con el espíritu costarricense ni con nuestra tradición de paz y diálogo", declararon los magistrados. ¡Y tienen toda la razón! Somos conocidos en todo Iberoamérica como la democracia más antigua, un ejemplo de convivencia pacífica. No podemos perder eso por unos cuantos que andan buscando problemas.
Ahora, claro, la pelota está en el terreno de la Fiscalía. Ellos tendrán que investigar quiénes están detrás de estos mensajes y determinar si realmente hay mérito para abrir una investigación formal. Esperemos que hagan un buen trabajo y que se tomen esto muy en serio, porque la tranquilidad del país está en juego. Un detalle importante, es que varios analistas políticos han señalado que estas acciones podrían ser parte de una estrategia de desprestigio orquestada desde ciertos grupos interesados en influir en el proceso electoral.
En fin, qué brete nos tocó vivir. Entre la pandemia, la crisis económica y ahora esto de los mensajes violentos en redes… uno ya no sabe qué esperar. Pero bueno, siempre hay que mantener la esperanza y seguir trabajando para construir un país mejor. Ahora me pregunto, ¿cree usted que las redes sociales están erosionando los valores democráticos de Costa Rica o simplemente reflejan las tensiones políticas existentes?
Todo esto empezó porque el TSE tenía 15 denuncias de beligerancia política contra el Presidente. Ya saben, esas cosas que uno dice en campaña y luego vienen a agarrarte con pinzas. El Tribunal, con toda la calma del mundo, pidió que se investiguen y si es necesario, que se le quite la inmunidad para que pueda enfrentar cargos. Esto obviamente causó un revuelo considerable entre algunos sectores, y ahí empezaron los mensajes amenazantes y las acusaciones fuertes.
Pero ojo, que el TSE no se quedó calladito. En su defensa, recordaron que llevan 76 años protegiendo la voluntad popular, la libertad de pensamiento y, sobre todo, el derecho a disentir. Esa es la base de nuestra democracia, ¿eh? Que todos podamos opinar libremente, aunque no estemos de acuerdo. Como dicen por ahí, 'el que piensa distinto no está loco'.
Lo que sí dijeron los magistrados es que la libertad no puede ser pretexto para promover la violencia o el odio. Ahí tocaron el punto sensible, porque algunos mensajes estaban bastante feos, puros insultos y amenazas directas. Dicen que eso ya es rayando en lo penal y que no se puede permitir que se use la libertad de expresión para atentar contra la seguridad de las personas ni de las instituciones.
Y es que la verdad, este rollo de los mensajes agresivos en redes sociales pone en peligro la estabilidad política del país, especialmente con las elecciones a la vuelta de la esquina. Ya estamos viendo cómo se polariza la sociedad y cómo se radicalizan las posturas. Necesitamos bajarle un poquito a la tensión y enfocarnos en construir un país donde todos nos respetemos, incluso cuando tengamos ideas diferentes.
"Esas actitudes no se corresponden con el espíritu costarricense ni con nuestra tradición de paz y diálogo", declararon los magistrados. ¡Y tienen toda la razón! Somos conocidos en todo Iberoamérica como la democracia más antigua, un ejemplo de convivencia pacífica. No podemos perder eso por unos cuantos que andan buscando problemas.
Ahora, claro, la pelota está en el terreno de la Fiscalía. Ellos tendrán que investigar quiénes están detrás de estos mensajes y determinar si realmente hay mérito para abrir una investigación formal. Esperemos que hagan un buen trabajo y que se tomen esto muy en serio, porque la tranquilidad del país está en juego. Un detalle importante, es que varios analistas políticos han señalado que estas acciones podrían ser parte de una estrategia de desprestigio orquestada desde ciertos grupos interesados en influir en el proceso electoral.
En fin, qué brete nos tocó vivir. Entre la pandemia, la crisis económica y ahora esto de los mensajes violentos en redes… uno ya no sabe qué esperar. Pero bueno, siempre hay que mantener la esperanza y seguir trabajando para construir un país mejor. Ahora me pregunto, ¿cree usted que las redes sociales están erosionando los valores democráticos de Costa Rica o simplemente reflejan las tensiones políticas existentes?