¡Ay, Dios mío! Esto sí que te pone los pelos de punta. Una turista gringa, aparentemente buscando un poco de sol y relax en Jacó, terminó perdiendo la vida la noche del sábado en unas circunstancias bien particulares. Se quedó dormida en la piscina de una casita que rentó, y bueno… la cosa se complicó.
Jacó, ese cantón que atrae a medio mundo con sus olas y sus atardeceres, se vistió de luto. Lo que prometía ser unas lindas vacaciones, se convirtió en una tragedia que dejó a todos boquiabiertos. La muchacha, que todavía no han querido revelar el nombre porque estamos hablando de una familia sufriendo, estaba con un grupito de amigos, aprovechándose del clima y la vibra del lugar.
Según las primeras investigaciones que está armando el OIJ, parece que la chica estaba bastante cansada después de un día completo de actividades – olas, broncecito, seguramente un par de imperiales para refrescarse. En algún momento de la noche, se recostó en el borde de la piscina y simplemente se quedó dormida. Imagínate, ahí en medio del agua, sin que nadie se diera cuenta al principio… qué sal!
Cuando sus compañeros la buscaron y no la encontraron, empezaron a entrarle el pánico. Corrieron a buscar ayuda y llamaron al 911. Llegaron los bomberos rapidísimo, pero ya era demasiado tarde. Pobre señora, la sacaron del agua, intentaron reanimarla, pero no hubo manera. El tiempo en estos casos es crucial, como dicen los expertos, tienes como tres minutitos para poder hacer algo, y ahí ya se había ido todo al traste.
Y hablando de esos tres minutos críticos, el profe Sebastián Chaves, instructor de natación, nos explicó que no es tan raro que alguien se duerma en la piscina. "El cansancio extremo, la fatiga muscular, o incluso echarse unos tragos, pueden bajar la guardia y hacer que pierdas el conocimiento", nos comentó. Remarcó que el consumo de alcohol, en particular, afecta mucho la capacidad de reacción y el buen juicio. ¡Más vale prevenir que lamentar, maes! No se pasen con la chela cerca del agua, ¿eh?
Ahora, el OIJ está haciendo sus pesquisas para descartar cualquier otra posibilidad. Se va a realizar la autopsia para determinar la causa exacta de la muerte y ver si hubo alguna otra influencia que haya contribuido a esta desgracia. El cuerpo fue trasladado a la morgue judicial, esperando que la ciencia arroje luz sobre lo sucedido. Total, así funcionan las cosas, hay que dejar que hagan su brete.
Esta triste historia nos hace reflexionar sobre lo importante que es tomar precauciones, aunque estemos de vacaciones y pensando que todo va a salir rositas. Hay que estar pendientes de nuestros amigos y familiares, especialmente si vemos que están muy cansados o han consumido alcohol. ¡La seguridad primero, siempre! Porque al final, lo único que queremos es disfrutar de la vida y regresar sanos y salvos a nuestra casa.
Bueno, pues acá les dejo este cuento para que lo comentemos. ¿Ustedes creen que deberíamos haber más campañas de concientización sobre los riesgos de dormir en piscinas, especialmente en zonas turísticas como Jacó? ¿Qué medidas podrían tomarse para evitar tragedias similares en el futuro? ¡Denle duro al comentario, quiero leer sus opiniones!
Jacó, ese cantón que atrae a medio mundo con sus olas y sus atardeceres, se vistió de luto. Lo que prometía ser unas lindas vacaciones, se convirtió en una tragedia que dejó a todos boquiabiertos. La muchacha, que todavía no han querido revelar el nombre porque estamos hablando de una familia sufriendo, estaba con un grupito de amigos, aprovechándose del clima y la vibra del lugar.
Según las primeras investigaciones que está armando el OIJ, parece que la chica estaba bastante cansada después de un día completo de actividades – olas, broncecito, seguramente un par de imperiales para refrescarse. En algún momento de la noche, se recostó en el borde de la piscina y simplemente se quedó dormida. Imagínate, ahí en medio del agua, sin que nadie se diera cuenta al principio… qué sal!
Cuando sus compañeros la buscaron y no la encontraron, empezaron a entrarle el pánico. Corrieron a buscar ayuda y llamaron al 911. Llegaron los bomberos rapidísimo, pero ya era demasiado tarde. Pobre señora, la sacaron del agua, intentaron reanimarla, pero no hubo manera. El tiempo en estos casos es crucial, como dicen los expertos, tienes como tres minutitos para poder hacer algo, y ahí ya se había ido todo al traste.
Y hablando de esos tres minutos críticos, el profe Sebastián Chaves, instructor de natación, nos explicó que no es tan raro que alguien se duerma en la piscina. "El cansancio extremo, la fatiga muscular, o incluso echarse unos tragos, pueden bajar la guardia y hacer que pierdas el conocimiento", nos comentó. Remarcó que el consumo de alcohol, en particular, afecta mucho la capacidad de reacción y el buen juicio. ¡Más vale prevenir que lamentar, maes! No se pasen con la chela cerca del agua, ¿eh?
Ahora, el OIJ está haciendo sus pesquisas para descartar cualquier otra posibilidad. Se va a realizar la autopsia para determinar la causa exacta de la muerte y ver si hubo alguna otra influencia que haya contribuido a esta desgracia. El cuerpo fue trasladado a la morgue judicial, esperando que la ciencia arroje luz sobre lo sucedido. Total, así funcionan las cosas, hay que dejar que hagan su brete.
Esta triste historia nos hace reflexionar sobre lo importante que es tomar precauciones, aunque estemos de vacaciones y pensando que todo va a salir rositas. Hay que estar pendientes de nuestros amigos y familiares, especialmente si vemos que están muy cansados o han consumido alcohol. ¡La seguridad primero, siempre! Porque al final, lo único que queremos es disfrutar de la vida y regresar sanos y salvos a nuestra casa.
Bueno, pues acá les dejo este cuento para que lo comentemos. ¿Ustedes creen que deberíamos haber más campañas de concientización sobre los riesgos de dormir en piscinas, especialmente en zonas turísticas como Jacó? ¿Qué medidas podrían tomarse para evitar tragedias similares en el futuro? ¡Denle duro al comentario, quiero leer sus opiniones!