¡Imagínate la movida! Después de años ahí parada, la vieja planta térmica de La Uruca va a resurgir... pero ahora como un parque solar a toda máquina. El ICE anunció oficialmente que ya andan echándole lupa a la construcción de la Planta Solar San Antonio, una iniciativa que promete darle un buen empujón al sistema eléctrico nacional y, sobre todo, dejar atrás esos combustibles fósiles que nos andaban contaminando el aire. ¡Qué bueno!
Para los que no estén muy enterados, la planta térmica de La Uruca cerró sus puertas en 2019, dejando un vacío importante en la generación de electricidad. Desde entonces, el terreno quedó abandonado, esperando una transformación que parecía lejana. Pues resulta que el ICE, con su nuevo plan de expansión energética, decidió aprovechar ese espacio para construir una planta solar de vanguardia, demostrando que sí hay compromiso con un futuro más limpio y sostenible para Costa Rica.
Esta nueva planta no es precisamente un changarro, ¡eh! Se invertirán unos $11,5 millones para instalar 21.300 paneles solares que van a producir 10,3 megavatios de energía renovable. Eso, mis panas, significa que vamos a tener más energía limpia disponible para todos, reduciendo nuestra dependencia de fuentes contaminantes y contribuyendo a mitigar el cambio climático. ¡Un brete tremendo para el medio ambiente!
Las primeras etapas del proyecto ya arrancaron con todo: instalación de estructuras temporales, limpieza del área y hasta movimientos de tierra para preparar el terreno. La empresa Ventus Colombia S.A.S., que ganó la licitación para el diseño y la construcción, anda trabajando contrarreloj para cumplir con los plazos establecidos. Según el cronograma, la planta estará operativa en agosto de 2026 – todavía falta un tiempecito, ¡pero vale la pena esperar!
Lo interesante de este proyecto es que representa el primer paso concreto del ICE dentro del Plan de Expansión de la Generación Eléctrica 2024-2040. Esto significa que no se trata de una jugada aislada, sino de parte de una estrategia a largo plazo para impulsar las energías renovables en Costa Rica. Además, esta planta se suma a otros proyectos similares que ya están en marcha en Guanacaste y Puntarenas, consolidando al país como líder regional en materia de sostenibilidad energética.
Y hablando de liderazgo, la Planta Solar San Antonio será la segunda planta de energía fotovoltaica propia del ICE, después de la Solar Miravalles. Esto demuestra que el ICE no solo habla de energías limpias, sino que también invierte recursos y apuesta por tecnologías innovadoras. La supervisión técnica y la gestión del contrato estarán a cargo de la Dirección de Gestión de Servicios No Regulados del ICE, asegurando que todo marche sobre rieles y que se cumplan los estándares de calidad exigidos.
Ahora bien, algunos podrían preguntarse si este tipo de proyectos realmente tienen impacto en la factura eléctrica. La verdad es que, aunque la inversión inicial pueda parecer alta, a largo plazo las energías renovables suelen resultar más económicas y sostenibles. Al reducir nuestra dependencia de los combustibles fósiles, evitamos las fluctuaciones de precios internacionales y protegemos nuestros bolsillos de posibles incrementos inesperados. ¡Eso sí que es un alivio, diay!
En fin, la construcción de la Planta Solar San Antonio en La Uruca es una excelente noticia para Costa Rica. Demuestra que estamos avanzando hacia un futuro más verde y próspero, aprovechando los recursos naturales que tenemos disponibles. Pero dime tú, ¿crees que el gobierno debería incentivar aún más la inversión en energías renovables o sigues pensando que necesitamos mantenernos aferrados a las plantas termoeléctricas tradicionales? ¡Déjame tu opinión en el foro!
Para los que no estén muy enterados, la planta térmica de La Uruca cerró sus puertas en 2019, dejando un vacío importante en la generación de electricidad. Desde entonces, el terreno quedó abandonado, esperando una transformación que parecía lejana. Pues resulta que el ICE, con su nuevo plan de expansión energética, decidió aprovechar ese espacio para construir una planta solar de vanguardia, demostrando que sí hay compromiso con un futuro más limpio y sostenible para Costa Rica.
Esta nueva planta no es precisamente un changarro, ¡eh! Se invertirán unos $11,5 millones para instalar 21.300 paneles solares que van a producir 10,3 megavatios de energía renovable. Eso, mis panas, significa que vamos a tener más energía limpia disponible para todos, reduciendo nuestra dependencia de fuentes contaminantes y contribuyendo a mitigar el cambio climático. ¡Un brete tremendo para el medio ambiente!
Las primeras etapas del proyecto ya arrancaron con todo: instalación de estructuras temporales, limpieza del área y hasta movimientos de tierra para preparar el terreno. La empresa Ventus Colombia S.A.S., que ganó la licitación para el diseño y la construcción, anda trabajando contrarreloj para cumplir con los plazos establecidos. Según el cronograma, la planta estará operativa en agosto de 2026 – todavía falta un tiempecito, ¡pero vale la pena esperar!
Lo interesante de este proyecto es que representa el primer paso concreto del ICE dentro del Plan de Expansión de la Generación Eléctrica 2024-2040. Esto significa que no se trata de una jugada aislada, sino de parte de una estrategia a largo plazo para impulsar las energías renovables en Costa Rica. Además, esta planta se suma a otros proyectos similares que ya están en marcha en Guanacaste y Puntarenas, consolidando al país como líder regional en materia de sostenibilidad energética.
Y hablando de liderazgo, la Planta Solar San Antonio será la segunda planta de energía fotovoltaica propia del ICE, después de la Solar Miravalles. Esto demuestra que el ICE no solo habla de energías limpias, sino que también invierte recursos y apuesta por tecnologías innovadoras. La supervisión técnica y la gestión del contrato estarán a cargo de la Dirección de Gestión de Servicios No Regulados del ICE, asegurando que todo marche sobre rieles y que se cumplan los estándares de calidad exigidos.
Ahora bien, algunos podrían preguntarse si este tipo de proyectos realmente tienen impacto en la factura eléctrica. La verdad es que, aunque la inversión inicial pueda parecer alta, a largo plazo las energías renovables suelen resultar más económicas y sostenibles. Al reducir nuestra dependencia de los combustibles fósiles, evitamos las fluctuaciones de precios internacionales y protegemos nuestros bolsillos de posibles incrementos inesperados. ¡Eso sí que es un alivio, diay!
En fin, la construcción de la Planta Solar San Antonio en La Uruca es una excelente noticia para Costa Rica. Demuestra que estamos avanzando hacia un futuro más verde y próspero, aprovechando los recursos naturales que tenemos disponibles. Pero dime tú, ¿crees que el gobierno debería incentivar aún más la inversión en energías renovables o sigues pensando que necesitamos mantenernos aferrados a las plantas termoeléctricas tradicionales? ¡Déjame tu opinión en el foro!