¡Aguántate!, porque esto sí que es tremendo. Nuestros vecinos uruguayos nos han dejado boquiabiertos. Después de un debate que pa' qué les cuento, aprobaron la llamada ‘Ley de Muerte Digna’, legalizando la eutanasia bajo unas condiciones bien específicas. ¡Se pusieron a la vanguardia en toda Latinoamérica!
Pa' ponerle pausa al asunto, Uruguay se convierte en el primer país de la región en darle una salida legal a personas que sufren de enfermedades terminales o dolores insoportables. Imagínate la movida, después de años de lucha y discusiones, finalmente lograron sacar adelante un proyecto que busca respetar la autonomía y la dignidad de las personas frente a la muerte.
La ley, como dicen por ahí, no es pa' cualquiera. No te imaginas las condiciones que tienen que cumplir pa' poder acceder a ella. Primero, hay que ser mayor de edad y tener la cabeza bien amarrada, saber exactamente lo que estás haciendo. Segundo, estar lidiando con una enfermedad incurable que te va a llevar directo al otro lado o sufrir un dolor que no tiene nombre, que te hace perder la razón.
El senador Daniel Borbonet, que anduvo metido hasta el cuello en esto, salió a decir que la ley no es una imposición, sino una opción. ¡Claro!, básicamente, si tienes una vara así de complicada, puedes elegir cómo quieres terminar tu brete. Busca asegurar que el derecho a morir dignamente sea respetado, sin obligar a nadie a nada.
Pero ni loco fue fácil llegar hasta acá. Ya hubo un intento en el 2020 que se fue al traste, pero ahora, con más brío, la Cámara de Representantes le dio luz verde y luego, después de mirarlas de todos lados, las comisiones del Senado hicieron sus ajustes. Consultaron con doctores, expertos en ética, y gente de la calle para asegurarse de que la ley fuera lo más justa posible. ¡Un verdadero proceso, diay!
Y ahora, la bola está en la cancha del Presidente Lacalle Pou, que tiene 180 días pa' ponerle orden al chip y armar las reglas del juego. Es decir, definir cómo se va a aplicar la ley en los hospitales y centros de salud, quiénes van a estar autorizados a practicarla, y todo ese rollo burocrático que siempre acompaña a estas cosas. ¡A ver si se apuran!
Esto nos pone a pensar, ¿eh? Acá en Costa Rica hemos tenido debates parecidos, pero nunca llegamos a ningún acuerdo contundente. Algunos dicen que es un tema muy delicado, otros que va contra nuestros valores. Pero viendo lo que pasó allá, ¿no sería hora de analizarlo con más calma y buscar una solución que respete los derechos de todos?
Ahora me pregunto, ticos y ticas, ¿creen que Costa Rica debería seguir los pasos de Uruguay y legalizar la eutanasia? ¿O prefieren mantener el status quo, aunque eso signifique dejar a algunas personas sufriendo dolores inimaginables al final de sus vidas? ¡Denme su opinión en el foro, quiero leer qué piensan ustedes!
Pa' ponerle pausa al asunto, Uruguay se convierte en el primer país de la región en darle una salida legal a personas que sufren de enfermedades terminales o dolores insoportables. Imagínate la movida, después de años de lucha y discusiones, finalmente lograron sacar adelante un proyecto que busca respetar la autonomía y la dignidad de las personas frente a la muerte.
La ley, como dicen por ahí, no es pa' cualquiera. No te imaginas las condiciones que tienen que cumplir pa' poder acceder a ella. Primero, hay que ser mayor de edad y tener la cabeza bien amarrada, saber exactamente lo que estás haciendo. Segundo, estar lidiando con una enfermedad incurable que te va a llevar directo al otro lado o sufrir un dolor que no tiene nombre, que te hace perder la razón.
El senador Daniel Borbonet, que anduvo metido hasta el cuello en esto, salió a decir que la ley no es una imposición, sino una opción. ¡Claro!, básicamente, si tienes una vara así de complicada, puedes elegir cómo quieres terminar tu brete. Busca asegurar que el derecho a morir dignamente sea respetado, sin obligar a nadie a nada.
Pero ni loco fue fácil llegar hasta acá. Ya hubo un intento en el 2020 que se fue al traste, pero ahora, con más brío, la Cámara de Representantes le dio luz verde y luego, después de mirarlas de todos lados, las comisiones del Senado hicieron sus ajustes. Consultaron con doctores, expertos en ética, y gente de la calle para asegurarse de que la ley fuera lo más justa posible. ¡Un verdadero proceso, diay!
Y ahora, la bola está en la cancha del Presidente Lacalle Pou, que tiene 180 días pa' ponerle orden al chip y armar las reglas del juego. Es decir, definir cómo se va a aplicar la ley en los hospitales y centros de salud, quiénes van a estar autorizados a practicarla, y todo ese rollo burocrático que siempre acompaña a estas cosas. ¡A ver si se apuran!
Esto nos pone a pensar, ¿eh? Acá en Costa Rica hemos tenido debates parecidos, pero nunca llegamos a ningún acuerdo contundente. Algunos dicen que es un tema muy delicado, otros que va contra nuestros valores. Pero viendo lo que pasó allá, ¿no sería hora de analizarlo con más calma y buscar una solución que respete los derechos de todos?
Ahora me pregunto, ticos y ticas, ¿creen que Costa Rica debería seguir los pasos de Uruguay y legalizar la eutanasia? ¿O prefieren mantener el status quo, aunque eso signifique dejar a algunas personas sufriendo dolores inimaginables al final de sus vidas? ¡Denme su opinión en el foro, quiero leer qué piensan ustedes!