¡Quiiiiiiibo, pura vida, mi gente del Foro! Resulta que el tema de los robos de electrónica sigue pegándose un brinco, y no precisamente pa’ bien. Según datos fresquitos del INS, este año ya le hemos metido unos ¢438 millones en indemnizaciones por estos asuntos. ¡Una verdadera chimba, eh!
Pa' ponerle pausa al asunto, el Instituto Nacional de Seguros (INS) soltó los números: entre enero y noviembre de este año hemos tenido que atender 838 solicitudes de compensación por equipos robados. Eso significa que a muchísima gente le tocó vivir la experiencia desagradable de quedarse sin su celu, laptop, o quién sabe qué otro chunche importante.
Lo curioso es que ni todos los meses son iguales. Parece que marzo fue el mes más tranquilo, con apenas unos ¢30 millones en pagos. Pero en noviembre, ¡boom!, los reclamos se duplicaron y tuvimos que desembolsar más de ¢65 millones. Imagínate la movida que debieron tener esos señores ahí del INS.
Y para los que se preguntan, ¿qué cubre exactamente este seguro?, pues te explico. Con el Seguro para Equipo Electrónico, puedes proteger desde tu celular hasta equipos médicos, pasando por tablets, smartwatches, aparatos de video... básicamente cualquier cosita electrónica que tengas y quieras resguardar. Un verdadero salvavidas, si me preguntas.
Pero ojo, que esto no es gratis, obviamente. El costo del seguro depende del valor del equipo. Por ejemplo, si tienes un celular que vale ¢550.000, vas a estar pagando alrededor de ¢16.491 al año. Si tienes una laptop más potente, de ¢1 millón, la inversión sube a ¢29.985 más el IVA. Karla Huezo, subjefa de la Dirección de Seguros Generales del INS, nos recuerda que, aunque parezca mucho, es una inversión bastante accesible considerando la tranquilidad que te da saber que estás cubierto.
Huezo también recalcó algo importante: “A veces invertimos en un teléfono celular o en una computadora, pero olvidamos que son objetos que fácilmente nos pueden robar y con eso, perder nuestra inversión, herramienta de estudio o trabajo”. Ella tiene toda la razón. Es mejor prevenir que lamentar, ¿no?
Ahora sí, miren nomás, la póliza no solo cubre robo, también protege contra incendios, daños eléctricos, fenómenos naturales e inclusive accidentes durante el transporte, ¡hasta afuera del país por tres meses! Si te pasa algo, tienes que reportarlo al INS en un plazo de siete días hábiles a través de sus canales oficiales. Así que, estate atento y no te duermas en los laureles.
En fin, amigos, la cifra de ¢438 millones nos demuestra que el robo de electrónicos es un problema serio en Costa Rica. Entonces, dime, ¿crees que el gobierno debería implementar medidas más estrictas para combatir este flagelo o sigues pensando que lo mejor es simplemente asegurar tus pertenencias? ¡Déjanos tus opiniones en los comentarios!
Pa' ponerle pausa al asunto, el Instituto Nacional de Seguros (INS) soltó los números: entre enero y noviembre de este año hemos tenido que atender 838 solicitudes de compensación por equipos robados. Eso significa que a muchísima gente le tocó vivir la experiencia desagradable de quedarse sin su celu, laptop, o quién sabe qué otro chunche importante.
Lo curioso es que ni todos los meses son iguales. Parece que marzo fue el mes más tranquilo, con apenas unos ¢30 millones en pagos. Pero en noviembre, ¡boom!, los reclamos se duplicaron y tuvimos que desembolsar más de ¢65 millones. Imagínate la movida que debieron tener esos señores ahí del INS.
Y para los que se preguntan, ¿qué cubre exactamente este seguro?, pues te explico. Con el Seguro para Equipo Electrónico, puedes proteger desde tu celular hasta equipos médicos, pasando por tablets, smartwatches, aparatos de video... básicamente cualquier cosita electrónica que tengas y quieras resguardar. Un verdadero salvavidas, si me preguntas.
Pero ojo, que esto no es gratis, obviamente. El costo del seguro depende del valor del equipo. Por ejemplo, si tienes un celular que vale ¢550.000, vas a estar pagando alrededor de ¢16.491 al año. Si tienes una laptop más potente, de ¢1 millón, la inversión sube a ¢29.985 más el IVA. Karla Huezo, subjefa de la Dirección de Seguros Generales del INS, nos recuerda que, aunque parezca mucho, es una inversión bastante accesible considerando la tranquilidad que te da saber que estás cubierto.
Huezo también recalcó algo importante: “A veces invertimos en un teléfono celular o en una computadora, pero olvidamos que son objetos que fácilmente nos pueden robar y con eso, perder nuestra inversión, herramienta de estudio o trabajo”. Ella tiene toda la razón. Es mejor prevenir que lamentar, ¿no?
Ahora sí, miren nomás, la póliza no solo cubre robo, también protege contra incendios, daños eléctricos, fenómenos naturales e inclusive accidentes durante el transporte, ¡hasta afuera del país por tres meses! Si te pasa algo, tienes que reportarlo al INS en un plazo de siete días hábiles a través de sus canales oficiales. Así que, estate atento y no te duermas en los laureles.
En fin, amigos, la cifra de ¢438 millones nos demuestra que el robo de electrónicos es un problema serio en Costa Rica. Entonces, dime, ¿crees que el gobierno debería implementar medidas más estrictas para combatir este flagelo o sigues pensando que lo mejor es simplemente asegurar tus pertenencias? ¡Déjanos tus opiniones en los comentarios!