¡Ay, Dios mío! Esto sí que nos sacudió el carrete ayer por la tarde. Bismarck Méndez, nuestro querido ‘Patacón’, volvió a protagonizar un momentazo en redes sociales, pero esta vez no fue por su labia en Teletica, sino por una escena digna de telenovela… en piyama. El mae, buscando mantener la forma física en diciembre, nos regaló un video de sus ejercicios navideños desde la comodidad de su propia casa, y vaya que levantó polvo.
La idea era simple: mostrarle a la gente que mantenerse activo no requiere un gimnasio lujoso ni equipos sofisticados. Un parqueadero, unas mancuernas improvisadas y, lo más importante, una pijama de cuadros bien fresca. Pero ahí fue donde la cosa se puso interesante, porque resulta que el diseño del pantalón no precisamente favoreció la vista de todos los presentes –virtualmente hablando, claro está–. El mae, a sus 53 años, sigue mostrando que se mantiene bárbaro físicamente, pero algunos internautas prefirieron enfocarse en otros detalles… digamos, más “íntimos”.
Y no digámoslo de otra manera, la reacción en redes fue… explosiva. Desde memes hasta comentarios picantes, pasando por risas a carcajadas, el internet entero pareció haberse unido para comentar el outfit del presentador. Algunos le lanzaron flores por su autenticidad y naturalidad (“¡Qué bacano que no le tenga miedo a mostrarse tal cual!”), mientras que otros no pudieron evitar hacer bromas sobre lo poco que cubría el pantalón. Directamente, la técnica de los abdominales quedó en segundo plano, mándale un saludo.
Pero esto no es nuevo, ¿verdad? Bismarck siempre ha sabido conectar con la gente a través de su humildad y sencillez. No es el típico presentador engreído y perfecto; él es uno de nosotros, un mae que se pone piyama para ejercitarse y no le importa que alguien lo vea haciendo tonterías. Esa cercanía es precisamente lo que lo hace tan querido por el público costarricense, que valora la autenticidad por encima de todo. Recordemos cuando salió en traje de baño, eso sí causó revuelo en su momento, pero él lo tomó con humor y siguió adelante.
Esta situación se suma a una tendencia creciente entre las figuras públicas de mostrar su lado más humano, dejando atrás la imagen pulida y artificial de la televisión. Ya hemos visto a varias celebrities salir de compras en chanclas, pasear a sus mascotas o simplemente compartir fotos de su día a día sin maquillaje ni poses elaboradas. Y parece que a la gente le encanta, porque busca conectar con personas reales, con historias genuinas, con maes que no pretenden ser perfectos. Como dice mi abuela, 'el que no conoce despecho, no sabe vivir'.
Más allá de los comentarios jocosos y las bromas involuntarias, la verdadera enseñanza de este episodio es que la salud y el bienestar no tienen excusas. Puedes estar en pijama, puedes estar viendo la novela, puedes estar comiéndote unos nacatamales, pero siempre hay tiempo para moverse un poquito y cuidar el cuerpo. Y si además te diviertes haciéndolo, pues mucho mejor. Al fin y al cabo, el ejercicio no tiene que ser una tortura, sino una oportunidad para disfrutar de la vida y sentirse mejor consigo mismo.
Ahora bien, analizando fríamente la cosa, la estrategia de marketing de Teletica no pudo haber salido mejor. Gracias a este pequeño incidente, Bismarck Méndez volvió a ser trending topic mundial y la cadena tuvo una publicidad gratuita que vale millones. Que si lo hagan a propósito o no, ya sabemos que esos profesionales saben qué hacen. Porque miren, no es secreto que el rating anda medio flojo últimamente y cualquier movida ayuda a levantar las audiencias. Lo importante es saber capitalizar estos momentos y convertirlos en oportunidades.
Así que, queridos lectores, díganme: ¿creen que Bismarck Méndez planeó esta jugada maestra para darle un empujón a su carrera, o fue pura casualidad? ¿Y ustedes, se animarían a hacer ejercicio en pijama y subirlo a redes sociales? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios!
La idea era simple: mostrarle a la gente que mantenerse activo no requiere un gimnasio lujoso ni equipos sofisticados. Un parqueadero, unas mancuernas improvisadas y, lo más importante, una pijama de cuadros bien fresca. Pero ahí fue donde la cosa se puso interesante, porque resulta que el diseño del pantalón no precisamente favoreció la vista de todos los presentes –virtualmente hablando, claro está–. El mae, a sus 53 años, sigue mostrando que se mantiene bárbaro físicamente, pero algunos internautas prefirieron enfocarse en otros detalles… digamos, más “íntimos”.
Y no digámoslo de otra manera, la reacción en redes fue… explosiva. Desde memes hasta comentarios picantes, pasando por risas a carcajadas, el internet entero pareció haberse unido para comentar el outfit del presentador. Algunos le lanzaron flores por su autenticidad y naturalidad (“¡Qué bacano que no le tenga miedo a mostrarse tal cual!”), mientras que otros no pudieron evitar hacer bromas sobre lo poco que cubría el pantalón. Directamente, la técnica de los abdominales quedó en segundo plano, mándale un saludo.
Pero esto no es nuevo, ¿verdad? Bismarck siempre ha sabido conectar con la gente a través de su humildad y sencillez. No es el típico presentador engreído y perfecto; él es uno de nosotros, un mae que se pone piyama para ejercitarse y no le importa que alguien lo vea haciendo tonterías. Esa cercanía es precisamente lo que lo hace tan querido por el público costarricense, que valora la autenticidad por encima de todo. Recordemos cuando salió en traje de baño, eso sí causó revuelo en su momento, pero él lo tomó con humor y siguió adelante.
Esta situación se suma a una tendencia creciente entre las figuras públicas de mostrar su lado más humano, dejando atrás la imagen pulida y artificial de la televisión. Ya hemos visto a varias celebrities salir de compras en chanclas, pasear a sus mascotas o simplemente compartir fotos de su día a día sin maquillaje ni poses elaboradas. Y parece que a la gente le encanta, porque busca conectar con personas reales, con historias genuinas, con maes que no pretenden ser perfectos. Como dice mi abuela, 'el que no conoce despecho, no sabe vivir'.
Más allá de los comentarios jocosos y las bromas involuntarias, la verdadera enseñanza de este episodio es que la salud y el bienestar no tienen excusas. Puedes estar en pijama, puedes estar viendo la novela, puedes estar comiéndote unos nacatamales, pero siempre hay tiempo para moverse un poquito y cuidar el cuerpo. Y si además te diviertes haciéndolo, pues mucho mejor. Al fin y al cabo, el ejercicio no tiene que ser una tortura, sino una oportunidad para disfrutar de la vida y sentirse mejor consigo mismo.
Ahora bien, analizando fríamente la cosa, la estrategia de marketing de Teletica no pudo haber salido mejor. Gracias a este pequeño incidente, Bismarck Méndez volvió a ser trending topic mundial y la cadena tuvo una publicidad gratuita que vale millones. Que si lo hagan a propósito o no, ya sabemos que esos profesionales saben qué hacen. Porque miren, no es secreto que el rating anda medio flojo últimamente y cualquier movida ayuda a levantar las audiencias. Lo importante es saber capitalizar estos momentos y convertirlos en oportunidades.
Así que, queridos lectores, díganme: ¿creen que Bismarck Méndez planeó esta jugada maestra para darle un empujón a su carrera, o fue pura casualidad? ¿Y ustedes, se animarían a hacer ejercicio en pijama y subirlo a redes sociales? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios!