¡Ay, Dios mío, qué torta! Un choque tremendo sacudió la tarde de hoy en las cercanías del Paseo Colón. Un carro particular le metió porra a un autobús, dejando a una señora con unos buenos raspazos y un tranque que parecía no tener fin. Las autoridades ya están en el brete, tratando de ponerle orden a la cosa, pero la situación está bien fea, mae.
El incidente se registró pasadas las dos de la tarde en la intersección de la Avenida Primera con la Calle 34, justo detrás de la Toyota. Según los primeros informes de la Cruz Roja, parece que el carro, manejado por una doña, no vio venir al autobús que venía a toda marcha. Al parecer iba distraída, aunque eso lo van a confirmar las investigaciones, claro. Lo importante ahora es que la señora esté recibiendo la atención médica necesaria, porque vaya golpe que dio.
En cuestión de minutos, llegaron los bomberos, movilizando hasta cinco máquinas desde las estaciones Metropolitana Norte y Pavas. Se pusieron las pilas para apoyar a la Cruz Roja en el rescate de la señora, quien quedó atrapada entre los hierros retorcidos del carro. No sé cómo hizo para salir viva de ahí, pa' decir la verdad. ¡De pura milagro!
El autobús, aparentemente repleto de gente – sesenta personas iban a bordo, según datos preliminares – resultó con daños considerables en la parte frontal. Afortunadamente, la mayoría de los pasajeros estaban ilesos, unos 55, pero cinco resultaron con algunas heridas leves y fueron atendidos en el lugar. Se les revisó todo, por si acaso, porque uno nunca sabe con estas cosas.
Pero bueno, el verdadero problema ahora es el tranque. La zona está colapsada, ¡un maje! Desde la rotonda de Cristo Rey hasta prácticamente la Ulatutorial, todo parado. Las autoridades recomiendan buscar rutas alternativas, mándale duro, porque llegar tarde al trabajo va a ser el menor de tus problemas si te pillas en ese lío.
Este tipo de accidentes nos recuerdan la importancia de conducir con precaución y respetar las señales de tráfico. Hay que estar siempre alerta, porque en Costa Rica, uno nunca sabe qué puede pasar en la vía pública. Con tanta prisa y estrés, la gente se olvida de poner atención y luego salen estos percances. Y ni hablar de los que andan revoloteando con el celular mientras manejan... ¡peligroso, peligrosísimo!
Lo curioso de todo esto es que justo ayer estaban hablando en las emisoras sobre la necesidad de mejorar la señalización en esa esquina. Parece que nadie hace caso hasta que pasa algo así. Esperemos que las autoridades tomen cartas en el asunto y hagan algo para evitar que estas situaciones se repitan en el futuro. Porque sinceramente, ¿cuántos choques más tenemos que aguantar?
Ahora, dime tú, ¿crees que las multas por exceso de velocidad deberían aumentar significativamente para disuadir a los conductores imprudentes o prefieres otras medidas para mejorar la seguridad vial en nuestras carreteras, y cuál sería esa medida? ¡Déjame tu opinión en los comentarios!
El incidente se registró pasadas las dos de la tarde en la intersección de la Avenida Primera con la Calle 34, justo detrás de la Toyota. Según los primeros informes de la Cruz Roja, parece que el carro, manejado por una doña, no vio venir al autobús que venía a toda marcha. Al parecer iba distraída, aunque eso lo van a confirmar las investigaciones, claro. Lo importante ahora es que la señora esté recibiendo la atención médica necesaria, porque vaya golpe que dio.
En cuestión de minutos, llegaron los bomberos, movilizando hasta cinco máquinas desde las estaciones Metropolitana Norte y Pavas. Se pusieron las pilas para apoyar a la Cruz Roja en el rescate de la señora, quien quedó atrapada entre los hierros retorcidos del carro. No sé cómo hizo para salir viva de ahí, pa' decir la verdad. ¡De pura milagro!
El autobús, aparentemente repleto de gente – sesenta personas iban a bordo, según datos preliminares – resultó con daños considerables en la parte frontal. Afortunadamente, la mayoría de los pasajeros estaban ilesos, unos 55, pero cinco resultaron con algunas heridas leves y fueron atendidos en el lugar. Se les revisó todo, por si acaso, porque uno nunca sabe con estas cosas.
Pero bueno, el verdadero problema ahora es el tranque. La zona está colapsada, ¡un maje! Desde la rotonda de Cristo Rey hasta prácticamente la Ulatutorial, todo parado. Las autoridades recomiendan buscar rutas alternativas, mándale duro, porque llegar tarde al trabajo va a ser el menor de tus problemas si te pillas en ese lío.
Este tipo de accidentes nos recuerdan la importancia de conducir con precaución y respetar las señales de tráfico. Hay que estar siempre alerta, porque en Costa Rica, uno nunca sabe qué puede pasar en la vía pública. Con tanta prisa y estrés, la gente se olvida de poner atención y luego salen estos percances. Y ni hablar de los que andan revoloteando con el celular mientras manejan... ¡peligroso, peligrosísimo!
Lo curioso de todo esto es que justo ayer estaban hablando en las emisoras sobre la necesidad de mejorar la señalización en esa esquina. Parece que nadie hace caso hasta que pasa algo así. Esperemos que las autoridades tomen cartas en el asunto y hagan algo para evitar que estas situaciones se repitan en el futuro. Porque sinceramente, ¿cuántos choques más tenemos que aguantar?
Ahora, dime tú, ¿crees que las multas por exceso de velocidad deberían aumentar significativamente para disuadir a los conductores imprudentes o prefieres otras medidas para mejorar la seguridad vial en nuestras carreteras, y cuál sería esa medida? ¡Déjame tu opinión en los comentarios!
