¡Ay, Dios mío! Quién diría, ¿verdad? El nombre de Fabián Solano vuelve a sonar en los medios, pero esta vez no es por cosas bonitas. Recordarán aquel movidazo de 2019 en el Ministerio de Justicia, cuando salió con cara de espanto después de que se descubrió que se mandaba cositas comprometedoras desde el celular de la oficina. Ya saben, esos videos que ni la abuelita aprobaría. Se quedó sin quincena por quince días, pero eso parecía que era el fin de la historia, ¿quién lo iba a decir que resurgiría así?
Ahora resulta que el compa Solano está buscando meterse a diputado por el PAC. Sí, ese mismo PAC que tanto se ha esforzado por mantener una imagen seria y responsable. Resulta que se convirtió en presidente del partido, y Claudia Dobles, la exprimera dama, lo eligió para ir en la papeleta por San José. ¡Imagínate!, el cuarto lugar, como si fuera un regalo. Parece que le dieron una segunda oportunidad, aunque muchos se preguntan si es la jugada correcta.
Dobles, que anda buscando asegurar la candidatura presidencial, presentó una lista de cuatro candidatos que ella designó directamente, aprovechando los estatutos. Dicen que inicialmente pensaba en poner a cinco, pero escuchó a la gente y decidió calmar aguas. Sergio Alfaro, el exministro de Solís, va encabezando la lista por Alajuela. Alexander Solís, que anduvo apagado después de la pandemia, también aparece en San José, y Boris Ramírez, el ex jefe del Sinart, liderará la batalla en Heredia. Una combinación interesante, pa’ ponerle sabor a la contienda.
Al parecer, Solano anda diciendo que es urgente atender los problemas del país, desde la inseguridad que nos come vivo hasta la lucha por la igualdad de género. Suena bien en el papel, claro, pero la gente ya está cansada de promesas vacías. Después de todo lo que pasó, ¿cómo espera recuperar la confianza de los votantes? Uno se queda pensando si realmente aprendió la lección o si sigue pensando que puede salirse con la suya.
Y hablando de aprender la lección, recordaremos que el caso del celular institucional generó mucha controversia. Fue un golpe duro para el PAC, y muchos esperaban que limpiaran la casa y dejaran atrás a esas figuras polémicas. Pero parece que la necesidad de votos prevaleció sobre cualquier consideración ética. Esto refleja, creo yo, una problemática mayor que tenemos como país: la politiquería pura y dura, donde lo importante es agarrar el poder a toda costa, sin importar quién salga lastimado.
Fabián Solano enfrenta un reto gigante. No basta con decir que quiere cambiar las cosas, tiene que demostrarlo con hechos. Tiene que convencer a la militancia del PAC, que ya está bastante desencantada con los resultados electorales, y a un electorado que cada día pierde más la fe en la política tradicional. Es como tratar de vender hielo en el desierto, pero él tiene que intentarlo igual. Que se prepare, porque va a recibir muchas preguntas difíciles.
Este retorno de Solano al ruedo político plantea interrogantes serios sobre los valores y principios del PAC. ¿Priorizan la pragmática política sobre la integridad moral? ¿Están dispuestos a sacrificar su reputación para ganar elecciones? Estas son preguntas que la militancia y el electorado deben hacerse antes de tomar una decisión en las urnas. Es hora de que los partidos políticos demuestren que están comprometidos con servir al pueblo, y no solo con perpetuarse en el poder.
En fin, la cosa está servida. Veremos si el compa Solano logra darle la vuelta a la tortilla y salir ileso de este embrollo. O si, como dicen por ahí, se irá al traste una vez más. Ahora me pregunto, ¿creen ustedes que la elección de Fabián Solano como candidato es un reflejo de la falta de opciones dentro del PAC o simplemente una estrategia desesperada para atraer votos? ¡Déjenme saber sus opiniones!
Ahora resulta que el compa Solano está buscando meterse a diputado por el PAC. Sí, ese mismo PAC que tanto se ha esforzado por mantener una imagen seria y responsable. Resulta que se convirtió en presidente del partido, y Claudia Dobles, la exprimera dama, lo eligió para ir en la papeleta por San José. ¡Imagínate!, el cuarto lugar, como si fuera un regalo. Parece que le dieron una segunda oportunidad, aunque muchos se preguntan si es la jugada correcta.
Dobles, que anda buscando asegurar la candidatura presidencial, presentó una lista de cuatro candidatos que ella designó directamente, aprovechando los estatutos. Dicen que inicialmente pensaba en poner a cinco, pero escuchó a la gente y decidió calmar aguas. Sergio Alfaro, el exministro de Solís, va encabezando la lista por Alajuela. Alexander Solís, que anduvo apagado después de la pandemia, también aparece en San José, y Boris Ramírez, el ex jefe del Sinart, liderará la batalla en Heredia. Una combinación interesante, pa’ ponerle sabor a la contienda.
Al parecer, Solano anda diciendo que es urgente atender los problemas del país, desde la inseguridad que nos come vivo hasta la lucha por la igualdad de género. Suena bien en el papel, claro, pero la gente ya está cansada de promesas vacías. Después de todo lo que pasó, ¿cómo espera recuperar la confianza de los votantes? Uno se queda pensando si realmente aprendió la lección o si sigue pensando que puede salirse con la suya.
Y hablando de aprender la lección, recordaremos que el caso del celular institucional generó mucha controversia. Fue un golpe duro para el PAC, y muchos esperaban que limpiaran la casa y dejaran atrás a esas figuras polémicas. Pero parece que la necesidad de votos prevaleció sobre cualquier consideración ética. Esto refleja, creo yo, una problemática mayor que tenemos como país: la politiquería pura y dura, donde lo importante es agarrar el poder a toda costa, sin importar quién salga lastimado.
Fabián Solano enfrenta un reto gigante. No basta con decir que quiere cambiar las cosas, tiene que demostrarlo con hechos. Tiene que convencer a la militancia del PAC, que ya está bastante desencantada con los resultados electorales, y a un electorado que cada día pierde más la fe en la política tradicional. Es como tratar de vender hielo en el desierto, pero él tiene que intentarlo igual. Que se prepare, porque va a recibir muchas preguntas difíciles.
Este retorno de Solano al ruedo político plantea interrogantes serios sobre los valores y principios del PAC. ¿Priorizan la pragmática política sobre la integridad moral? ¿Están dispuestos a sacrificar su reputación para ganar elecciones? Estas son preguntas que la militancia y el electorado deben hacerse antes de tomar una decisión en las urnas. Es hora de que los partidos políticos demuestren que están comprometidos con servir al pueblo, y no solo con perpetuarse en el poder.
En fin, la cosa está servida. Veremos si el compa Solano logra darle la vuelta a la tortilla y salir ileso de este embrollo. O si, como dicen por ahí, se irá al traste una vez más. Ahora me pregunto, ¿creen ustedes que la elección de Fabián Solano como candidato es un reflejo de la falta de opciones dentro del PAC o simplemente una estrategia desesperada para atraer votos? ¡Déjenme saber sus opiniones!