¡Ay, dios mío! Esto del Hospital México está que arde, ¿eh? Resulta que andamos con un buen lío de 21.000 unidades de fentanilo desaparecidas, además de otras cositas turbias como morfina, ketamina y hasta diazepam. Imagínate la bronca que tienen los funcionarios del Ministerio de Salud, ¡qué torta!
Según Douglas Montero, el director del hospital, todo esto es culpa del nuevo sistema informático, el famoso ERP-SAP. Dice que el sistema está en pañales, todavía aprendiendo a andar, y que hubo un error gordísimo al triplicar la información de algunos medicamentos. "Antes era todo más sencillo, ¿cachai? Todo directo entre los sistemas de almacén y el SIFA", explica Montero. Pero bueno, ahora parece que estamos en un brete con este software.
Pero espérate, que la cosa se pone más interesante. Parece que desde julio ya habían avisado a las autoridades de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) sobre estas inconsistencias, pero ni pum, ni pam. No le dieron solución. Ahora, el sistema reporta 31.500 unidades de fentanilo cuando solo se repartieron 10.500. ¡Un desperdicio tremendo y encima, qué sal!
Montero insiste en que todo es un tema de conteo, que cada medicamento administrado está registrado en el SIFA, y que no hay ninguna fuga real. Dice que tienen controles internos y hasta prohíben a los médicos cargar con medicamentos en sus bolsillos para evitar robos. "Yo les garantizo que cada medicamento que recibimos físicamente sabemos a qué paciente se le dio... es un inventario perfecto". Suena bien, ¿verdad?
Pero el Ministerio de Salud no se queda tranquilo y ya metió la denuncia al Colegio de Farmacéuticos, a la propia CCSS y, aunque todavía no quieren meterle mano a los tribunales, andan manejándolo internamente. La verdad es que toda esta movida ha levantado ampollas, y el Ministerio de Salud no se anda con rodeos: advirtió que existe riesgo de que estos medicamentos terminen en el mercado negro. ¡Qué carga!
Y claro, Montero dice que el problema es que el Ministerio de Salud no conoce la realidad de lo que pasa en los hospitales con este sistema. Según él, todos los centros de salud están batallando con el ERP-SAP y todos los medicamentos. Aparentemente, es un problema generalizado, no exclusivo del Hospital México. Uno se pregunta si este sistema realmente estaba listo para implementarse en todos los hospitales o si le lanzaron a correr sin echarle mucho ojo.
Esta situación plantea serias interrogantes sobre la gestión de medicamentos en nuestros hospitales públicos, especialmente en lo que respecta a sustancias controladas como el fentanilo. Además, es preocupante la lentitud con que la CCSS ha reaccionado ante las alertas tempranas. El caso sirve como ejemplo de por qué es crucial revisar a fondo cualquier sistema informático antes de aplicarlo a gran escala, porque aquí vemos que un simple error puede tener consecuencias graves. ¿Será que alguien estará encubriendo algo o simplemente somos víctimas de la ineficiencia burocrática habitual?
En fin, este asunto está dando de qué hablar y seguramente habrá más capítulos. ¡Qué tuanis sería que se investigara a fondo y se hiciera responsable a quien corresponda! Pero dime tú, ¿crees que todo esto es solo un fallo técnico inevitable durante la transición al nuevo sistema, o deberíamos sospechar que hay algo más detrás de este faltante de medicamentos? Deja tu opinión en el foro, ¡me interesa saber qué piensas!
Según Douglas Montero, el director del hospital, todo esto es culpa del nuevo sistema informático, el famoso ERP-SAP. Dice que el sistema está en pañales, todavía aprendiendo a andar, y que hubo un error gordísimo al triplicar la información de algunos medicamentos. "Antes era todo más sencillo, ¿cachai? Todo directo entre los sistemas de almacén y el SIFA", explica Montero. Pero bueno, ahora parece que estamos en un brete con este software.
Pero espérate, que la cosa se pone más interesante. Parece que desde julio ya habían avisado a las autoridades de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) sobre estas inconsistencias, pero ni pum, ni pam. No le dieron solución. Ahora, el sistema reporta 31.500 unidades de fentanilo cuando solo se repartieron 10.500. ¡Un desperdicio tremendo y encima, qué sal!
Montero insiste en que todo es un tema de conteo, que cada medicamento administrado está registrado en el SIFA, y que no hay ninguna fuga real. Dice que tienen controles internos y hasta prohíben a los médicos cargar con medicamentos en sus bolsillos para evitar robos. "Yo les garantizo que cada medicamento que recibimos físicamente sabemos a qué paciente se le dio... es un inventario perfecto". Suena bien, ¿verdad?
Pero el Ministerio de Salud no se queda tranquilo y ya metió la denuncia al Colegio de Farmacéuticos, a la propia CCSS y, aunque todavía no quieren meterle mano a los tribunales, andan manejándolo internamente. La verdad es que toda esta movida ha levantado ampollas, y el Ministerio de Salud no se anda con rodeos: advirtió que existe riesgo de que estos medicamentos terminen en el mercado negro. ¡Qué carga!
Y claro, Montero dice que el problema es que el Ministerio de Salud no conoce la realidad de lo que pasa en los hospitales con este sistema. Según él, todos los centros de salud están batallando con el ERP-SAP y todos los medicamentos. Aparentemente, es un problema generalizado, no exclusivo del Hospital México. Uno se pregunta si este sistema realmente estaba listo para implementarse en todos los hospitales o si le lanzaron a correr sin echarle mucho ojo.
Esta situación plantea serias interrogantes sobre la gestión de medicamentos en nuestros hospitales públicos, especialmente en lo que respecta a sustancias controladas como el fentanilo. Además, es preocupante la lentitud con que la CCSS ha reaccionado ante las alertas tempranas. El caso sirve como ejemplo de por qué es crucial revisar a fondo cualquier sistema informático antes de aplicarlo a gran escala, porque aquí vemos que un simple error puede tener consecuencias graves. ¿Será que alguien estará encubriendo algo o simplemente somos víctimas de la ineficiencia burocrática habitual?
En fin, este asunto está dando de qué hablar y seguramente habrá más capítulos. ¡Qué tuanis sería que se investigara a fondo y se hiciera responsable a quien corresponda! Pero dime tú, ¿crees que todo esto es solo un fallo técnico inevitable durante la transición al nuevo sistema, o deberíamos sospechar que hay algo más detrás de este faltante de medicamentos? Deja tu opinión en el foro, ¡me interesa saber qué piensas!
