¡Ay, Dios mío, qué bronca! La política nacional se echó para atrás este fin de semana con un choque que dejó a varios funcionarios en cuidados intensivos y a uno, lamentablemente, fuera de la pelea. El diputado del PLP, Eliécer Feinzaig, tuvo que pasar por el quirófano tras un accidente automovilístico que sacudió Palmares, justo cuando empezaba a tomar fuerza como precandidato presidencial. Una situación que, diay, nadie esperaba.
Según informes del Partido Liberal Progresista (PLP), el accidente ocurrió el viernes en la noche. Feinzaig viajaba en compañía de Fabián Cascante, otro político destacado, cuando sufrieron una colisión. Lamentablemente, Ericka Benavides, quien trabajaba como asesora del partido, falleció en el lugar. Un golpe muy duro para todos los involucrados, sin duda alguna. Parece que la Vara salió salada para el PLP y para la contienda electoral en general.
El PLP emitió un comunicado explicando que Feinzaig fue sometido a una cirugía programada para tratar una fractura en el esternón. “La operación se realizó por recomendación médica, ya que permite una mejor recuperación. Eliécer se mantiene estable, en observación y evolucionando satisfactoriamente en el Hospital Metropolitano,” informaron. Lo importante ahora es darle tiempo para que se recupere bien, porque esto le pegó un buen susto al mae, ahí sí.
Pero la preocupación no termina ahí. Fabián Cascante, el conductor del vehículo, se encuentra en estado crítico y conectado a aparatos en la Unidad de Cuidados Intensivos del mismo hospital. Según el PLP, Cascante “se encuentra delicado y en evolución”. Han pedido a la población que se sume a sus plegarias y que consideren donar sangre si pueden, pues ha sido fundamental en estos momentos difíciles. ¡Qué carga para Cascante y su familia!
Este incidente, además de las implicaciones políticas inmediatas, plantea interrogantes sobre la seguridad de los políticos en campaña. Con las elecciones presidenciales acercándose rápidamente, la agenda se complica aún más. Se hablaba tanto del cambio de mando 2025, ahora toca enfocarse en recuperar a nuestros líderes y apoyar a quienes enfrentan momentos tan adversos. Uno piensa, ¡qué brete se les viene encima!
Más allá de la parte política, hay que reconocer el esfuerzo de los equipos médicos que trabajan incansablemente para salvar vidas. La atención brindada tanto a Feinzaig como a Cascante ha sido ejemplar, demostrando la calidad del personal sanitario que tenemos en Costa Rica. Ver a esos doctores y enfermeras dando lo mejor de sí mismos da esperanza, aunque la situación esté bastante apremiante.
Y mientras tanto, el ambiente político está cargado de especulaciones. Algunos analistas sugieren que este percance podría afectar negativamente las posibilidades de Feinzaig en las primarias del PLP. Otros aseguran que el apoyo a los candidatos afectados generará simpatía y movilizará votantes. En fin, ¡una sopa boba!, como dicen por acá, llena de incertidumbre y posibles giros inesperados. La verdad es que todo pasa volao, y en política aún más.
Definitivamente, este acontecimiento nos deja reflexionando sobre la fragilidad de la vida y la importancia de valorar a las personas que nos rodean. ¿Creen ustedes que este tipo de incidentes pondrá bajo la lupa la necesidad de fortalecer las medidas de seguridad para los políticos en campaña, o simplemente será un capítulo más en la accidentada historia de nuestra política?
Según informes del Partido Liberal Progresista (PLP), el accidente ocurrió el viernes en la noche. Feinzaig viajaba en compañía de Fabián Cascante, otro político destacado, cuando sufrieron una colisión. Lamentablemente, Ericka Benavides, quien trabajaba como asesora del partido, falleció en el lugar. Un golpe muy duro para todos los involucrados, sin duda alguna. Parece que la Vara salió salada para el PLP y para la contienda electoral en general.
El PLP emitió un comunicado explicando que Feinzaig fue sometido a una cirugía programada para tratar una fractura en el esternón. “La operación se realizó por recomendación médica, ya que permite una mejor recuperación. Eliécer se mantiene estable, en observación y evolucionando satisfactoriamente en el Hospital Metropolitano,” informaron. Lo importante ahora es darle tiempo para que se recupere bien, porque esto le pegó un buen susto al mae, ahí sí.
Pero la preocupación no termina ahí. Fabián Cascante, el conductor del vehículo, se encuentra en estado crítico y conectado a aparatos en la Unidad de Cuidados Intensivos del mismo hospital. Según el PLP, Cascante “se encuentra delicado y en evolución”. Han pedido a la población que se sume a sus plegarias y que consideren donar sangre si pueden, pues ha sido fundamental en estos momentos difíciles. ¡Qué carga para Cascante y su familia!
Este incidente, además de las implicaciones políticas inmediatas, plantea interrogantes sobre la seguridad de los políticos en campaña. Con las elecciones presidenciales acercándose rápidamente, la agenda se complica aún más. Se hablaba tanto del cambio de mando 2025, ahora toca enfocarse en recuperar a nuestros líderes y apoyar a quienes enfrentan momentos tan adversos. Uno piensa, ¡qué brete se les viene encima!
Más allá de la parte política, hay que reconocer el esfuerzo de los equipos médicos que trabajan incansablemente para salvar vidas. La atención brindada tanto a Feinzaig como a Cascante ha sido ejemplar, demostrando la calidad del personal sanitario que tenemos en Costa Rica. Ver a esos doctores y enfermeras dando lo mejor de sí mismos da esperanza, aunque la situación esté bastante apremiante.
Y mientras tanto, el ambiente político está cargado de especulaciones. Algunos analistas sugieren que este percance podría afectar negativamente las posibilidades de Feinzaig en las primarias del PLP. Otros aseguran que el apoyo a los candidatos afectados generará simpatía y movilizará votantes. En fin, ¡una sopa boba!, como dicen por acá, llena de incertidumbre y posibles giros inesperados. La verdad es que todo pasa volao, y en política aún más.
Definitivamente, este acontecimiento nos deja reflexionando sobre la fragilidad de la vida y la importancia de valorar a las personas que nos rodean. ¿Creen ustedes que este tipo de incidentes pondrá bajo la lupa la necesidad de fortalecer las medidas de seguridad para los políticos en campaña, o simplemente será un capítulo más en la accidentada historia de nuestra política?