¡Ay, Dios mío! Las lluvias de este fin de semana pegaron duro en Guanacaste, mándale mis respetos. Resulta que el Ministerio de Salud tuvo que suspender temporalmente algunos Centros Infantiles de Nutrición y Atención Integral (CEN-CINAI) en varias comunidades porque, bueno, ¡la cosa está fea!
Verás, la emergencia empezó con una noche y madrugada de aguaceros intensos que dejaron varias zonas bajo el agua. Imagínate, carreteras intransitables y gente atrapada en sus casas. No es para bromear, ¿eh?
La suspensión afecta directamente a la atención y protección de niños pequeños, así como la entrega de alimentos esenciales. Según el comunicado oficial, los centros de Santa Cruz (Delicias, El Llano, Paraíso, La Garita, 27 de Abril), Nandayure (Pueblo Nuevo, Islita, San Francisco, Pilas de Bejuco) y Nicoya (Bocas de Nosara) no podrán operar hoy ni mañana.
Pero eso no es todo, la vaina se complicó aún más porque muchas funcionarias de estos centros también están afectadas. Sus propias casas tienen inundaciones, así que, literalmente, no pueden salir a trabajar. ¡Qué sal! Una cosa lleva a la otra y ahí tienes una crisis doble.
Desde el Ministerio dicen que van a estar monitoreando la situación de cerca y avisándonos si hay algún cambio. Prometen reanudar las operaciones tan pronto como las condiciones lo permitan, pero ahora mismo la prioridad es garantizar la seguridad de todos.
Esto te pone a pensar en la vulnerabilidad de nuestras comunidades costeras ante los fenómenos climáticos. Ya hemos visto demasiadas veces cómo el clima nos da unos sustos tremendos, y esto nos recuerda que necesitamos fortalecer nuestra infraestructura y nuestros sistemas de respuesta ante emergencias, ¡ya vamos quedando atrás!
Y claro, entre tanto papeleo y anuncios oficiales, lo que más preocupa a la gente son los nenes. Imagínate el estrés de los padres que dependen de esos centros para poder ir a trabajar tranquilos. Con razón están sacudidos, es normal, mai.
En fin, esperemos que las aguas bajen pronto y que podamos recuperar la tranquilidad. Pero me pregunto, ¿qué medidas a largo plazo debemos tomar para proteger a las familias guanacastecas de estas recurrentes situaciones de emergencia y asegurar que los CEN-CINAI puedan seguir brindando un servicio esencial sin interrupciones?
Verás, la emergencia empezó con una noche y madrugada de aguaceros intensos que dejaron varias zonas bajo el agua. Imagínate, carreteras intransitables y gente atrapada en sus casas. No es para bromear, ¿eh?
La suspensión afecta directamente a la atención y protección de niños pequeños, así como la entrega de alimentos esenciales. Según el comunicado oficial, los centros de Santa Cruz (Delicias, El Llano, Paraíso, La Garita, 27 de Abril), Nandayure (Pueblo Nuevo, Islita, San Francisco, Pilas de Bejuco) y Nicoya (Bocas de Nosara) no podrán operar hoy ni mañana.
Pero eso no es todo, la vaina se complicó aún más porque muchas funcionarias de estos centros también están afectadas. Sus propias casas tienen inundaciones, así que, literalmente, no pueden salir a trabajar. ¡Qué sal! Una cosa lleva a la otra y ahí tienes una crisis doble.
Desde el Ministerio dicen que van a estar monitoreando la situación de cerca y avisándonos si hay algún cambio. Prometen reanudar las operaciones tan pronto como las condiciones lo permitan, pero ahora mismo la prioridad es garantizar la seguridad de todos.
Esto te pone a pensar en la vulnerabilidad de nuestras comunidades costeras ante los fenómenos climáticos. Ya hemos visto demasiadas veces cómo el clima nos da unos sustos tremendos, y esto nos recuerda que necesitamos fortalecer nuestra infraestructura y nuestros sistemas de respuesta ante emergencias, ¡ya vamos quedando atrás!
Y claro, entre tanto papeleo y anuncios oficiales, lo que más preocupa a la gente son los nenes. Imagínate el estrés de los padres que dependen de esos centros para poder ir a trabajar tranquilos. Con razón están sacudidos, es normal, mai.
En fin, esperemos que las aguas bajen pronto y que podamos recuperar la tranquilidad. Pero me pregunto, ¿qué medidas a largo plazo debemos tomar para proteger a las familias guanacastecas de estas recurrentes situaciones de emergencia y asegurar que los CEN-CINAI puedan seguir brindando un servicio esencial sin interrupciones?
