¡Ay, Dios mío! Parece que alguien tuvo un día terrible y decidió descargar toda su frustración en una pobre lora. Un video que ha corrido como reguero de pólvora por todas las redes sociales muestra a un hombre, aparentemente enfadado por una discusión con una mujer, agarrando a la ave y lanzándola al suelo con una fuerza considerable. ¡Qué torta! La reacción de la gente no se hizo esperar y ahora el Ministerio de Ambiente y Energía (Minae) está pidiendo cabeza.
Según el Minae, este acto constituye una clara violación a la Ley No. 7317, conocida comúnmente como la Ley de Conservación de la Vida Silvestre. Las autoridades recalcan que tener loras, pericos o cualquier otro tipo de animal silvestre en casa no solo es ilegal, sino que también pone en riesgo su bienestar y amenaza la rica biodiversidad que tenemos aquí en Costa Rica. Ya saben, nosotros somos el pulmón del mundo, y esto no ayuda en nada.
Franz Tattenbach, nuestro ministro de Ambiente, salió al paso explicando que la tenencia de animales silvestres plantea serias preocupaciones tanto para la conservación de especies como para el bienestar animal. “El cautiverio compromete sus condiciones al estar ajenos a sus requerimientos biológicos,” nos dijo el ministro. En otras palabras, la lora necesita volar libre, buscar su propia comida y vivir en su hábitat natural, ¡no estar encerrada en una jaula!”
El video en sí es bastante impactante, mostrando claramente el momento en que el hombre agarra a la lora y la arroja. Lo peor es pensar en el susto y el daño físico que pudo haberle causado a la pobre criatura. Por suerte, hasta ahora, no se han reportado mayores complicaciones, pero la situación resalta la importancia de educar a la población sobre el cuidado y respeto por la fauna silvestre.
Y ojo, porque no es la primera vez que vemos casos así. Hace unos meses, recuerdo, hubo un tremendo escándalo por un mono tití que estaba viviendo como rey en una mansión en Escazú. Al final, tuvieron que rescatarlo y llevarlo a un centro de rehabilitación. ¡Se jaló una torta la gente que pensó que era divertido tener un mono como mascota! Es un brete explicarles a algunos que estos animales no son juguetes.
Las autoridades ya solicitaron a la Fiscalía Ambiental que abra una investigación formal contra el hombre involucrado en el incidente de la lora. Se le podría enfrentar a cargos graves por maltrato animal, dependiendo de la gravedad del daño causado a la ave y de la interpretación que haga la fiscalía. Esperemos que este caso sirva de ejemplo para evitar que situaciones similares se repitan en el futuro. Es importante recordar que proteger nuestros ecosistemas y la vida silvestre es responsabilidad de todos nosotros.
Ahora bien, más allá del caso específico de la lora, esta situación nos invita a reflexionar sobre nuestra relación con la naturaleza. Muchos ignoran que la extracción de animales silvestres de su hábitat natural contribuye significativamente a la destrucción de ecosistemas y al declive de poblaciones enteras. Además, la posesión ilegal de animales silvestres alimenta el mercado negro y fomenta actividades ilegales como la caza y el tráfico de especies protegidas. ¡Qué sal! Que tengamos que estar hablando de estas cosas en pleno siglo XXI.
Entonces, ¿qué opinan mis compañeros foristas? ¿Creen que las penas por maltrato animal deberían ser más severas en Costa Rica? ¿Cómo podemos mejorar la educación ambiental para concienciar a la población sobre la importancia de proteger nuestra biodiversidad y evitar este tipo de actos crueles e innecesarios?
Según el Minae, este acto constituye una clara violación a la Ley No. 7317, conocida comúnmente como la Ley de Conservación de la Vida Silvestre. Las autoridades recalcan que tener loras, pericos o cualquier otro tipo de animal silvestre en casa no solo es ilegal, sino que también pone en riesgo su bienestar y amenaza la rica biodiversidad que tenemos aquí en Costa Rica. Ya saben, nosotros somos el pulmón del mundo, y esto no ayuda en nada.
Franz Tattenbach, nuestro ministro de Ambiente, salió al paso explicando que la tenencia de animales silvestres plantea serias preocupaciones tanto para la conservación de especies como para el bienestar animal. “El cautiverio compromete sus condiciones al estar ajenos a sus requerimientos biológicos,” nos dijo el ministro. En otras palabras, la lora necesita volar libre, buscar su propia comida y vivir en su hábitat natural, ¡no estar encerrada en una jaula!”
El video en sí es bastante impactante, mostrando claramente el momento en que el hombre agarra a la lora y la arroja. Lo peor es pensar en el susto y el daño físico que pudo haberle causado a la pobre criatura. Por suerte, hasta ahora, no se han reportado mayores complicaciones, pero la situación resalta la importancia de educar a la población sobre el cuidado y respeto por la fauna silvestre.
Y ojo, porque no es la primera vez que vemos casos así. Hace unos meses, recuerdo, hubo un tremendo escándalo por un mono tití que estaba viviendo como rey en una mansión en Escazú. Al final, tuvieron que rescatarlo y llevarlo a un centro de rehabilitación. ¡Se jaló una torta la gente que pensó que era divertido tener un mono como mascota! Es un brete explicarles a algunos que estos animales no son juguetes.
Las autoridades ya solicitaron a la Fiscalía Ambiental que abra una investigación formal contra el hombre involucrado en el incidente de la lora. Se le podría enfrentar a cargos graves por maltrato animal, dependiendo de la gravedad del daño causado a la ave y de la interpretación que haga la fiscalía. Esperemos que este caso sirva de ejemplo para evitar que situaciones similares se repitan en el futuro. Es importante recordar que proteger nuestros ecosistemas y la vida silvestre es responsabilidad de todos nosotros.
Ahora bien, más allá del caso específico de la lora, esta situación nos invita a reflexionar sobre nuestra relación con la naturaleza. Muchos ignoran que la extracción de animales silvestres de su hábitat natural contribuye significativamente a la destrucción de ecosistemas y al declive de poblaciones enteras. Además, la posesión ilegal de animales silvestres alimenta el mercado negro y fomenta actividades ilegales como la caza y el tráfico de especies protegidas. ¡Qué sal! Que tengamos que estar hablando de estas cosas en pleno siglo XXI.
Entonces, ¿qué opinan mis compañeros foristas? ¿Creen que las penas por maltrato animal deberían ser más severas en Costa Rica? ¿Cómo podemos mejorar la educación ambiental para concienciar a la población sobre la importancia de proteger nuestra biodiversidad y evitar este tipo de actos crueles e innecesarios?
