Me quede asombrado del descaro al que llegan estas ratas. Vean la nota.
link Ciego asalta transeúntes de la Catedral Metropolitana
Ciego asalta transeúntes de la Catedral Metropolitana
En las afueras de la Catedral Metropolitana se presenta todos los días una situación “curiosa”: un ciego como cualquiera –de los que tanto se ven en San José- le pide a los transeúntes ayuda por medio de una colaboración física para llegar a un lugar. Pero las personas que de buena fe le acompañan se llevan una sorpresa… Después de varias cuadras, lo que parecía ser un no vidente indefenso se transforma, les despoja de sus pertenencias y se marcha.crhoy.com conoció sobre este falso ciego cuando, en las afueras de la Catedral, contrastó dos realidades: dos hombres no videntes sentados en las gradas del Templo, uno que fue escoltado por las autoridades y otro que siguió pidiendo ayuda con naturalidad.Cuando se consultó a los oficiales de la policía por qué hacían eso, nos relataron la historia. Las autoridades descubrieron que era falsa su coartada cuando el tipo pidió ayuda a una mujer y un oficial se acercó para ver qué necesitaba, cuando el oficial le sujetó por detrás para ayudarle: el hombre dijo: “¿Ooficial por qué me sostiene?. “¿Cómo podía saber que era un oficial si lo sujetó por detrás? El radio no sonó, ni hubo ninguna señal”, dijo el Policía. Fue ahí cuando los oficiales empezaron a sospechar de él.Otro oficial nos aseguró que lo notaron porque no sabía usar el bastón especial para no videntes, cuando la mayoría demuestra ciertos movimientos, a él lo delató el caminar, la forma en que se mueve y cómo usaba el instrumento.Este hombre, bien conocido e identificado por las autoridades, tiene el hábito de timar a las personas de buen corazón y aunque la policía municipal y la fuerza pública le conocen no logran hacer nada con él. Todos lo describen a la perfección como “un machillo”, pues las tres parejas de policías –dos de policía municipal y una de fuerza pública- que custodiaban el parque tienen conocimiento de quién es y qué hace.¿Se puede hacer algo con una persona cómo él? Todos dieron la misma respuesta: no.La primera razón es porque no hay denuncias en su contra, aunque la policía lo sepa y haya casos registrados. El problema más grande surge porque las víctimas no van a poner una denuncia.“El problema es que al Ministerio Público no puede pasar porque no existe una ley que se le pueda aplicar. No existe nada, aquí es dejarlo a la libre y cuando lo veamos, procedemos a retirarlo…A menos de que algún transeúnte firme un parte, pero es muy difícil, a la gente no le gusta ir a la Corte, ni perder tiempo porque van, duran tres horas, le toman la declaración de 10 minutos y a los cinco minutos viene atrás el detenido”, dijo Gonzalo Mungalo, de la policía municipal.La segunda razón, es porque este hombre -aunque no sea ciego legalmente- tiene una discapacidad en un ojo, por lo que podría alegar que requiere ayuda.Mungalo prosiguió diciendo que sin duda alguna la forma más fácil de vivir para este hombre es apelando a la lástima. Mientras que otro de los policías, de apellido Mora, mencionó que para una persona como esta –que puede alegar discapacidad en algún grado- hay un vacío legal e institucional ¿Dónde meterlo? ¿Qué hacer con él?.Mientras tanto, este sujeto seguirá sorprendiendo a algunos de los transeúntes que se dejan conmover por su fachada de “ciego” indefenso, que aprovechará la ausencia de la policía para seguir haciendo de las suyas…
link Ciego asalta transeúntes de la Catedral Metropolitana
Ciego asalta transeúntes de la Catedral Metropolitana
En las afueras de la Catedral Metropolitana se presenta todos los días una situación “curiosa”: un ciego como cualquiera –de los que tanto se ven en San José- le pide a los transeúntes ayuda por medio de una colaboración física para llegar a un lugar. Pero las personas que de buena fe le acompañan se llevan una sorpresa… Después de varias cuadras, lo que parecía ser un no vidente indefenso se transforma, les despoja de sus pertenencias y se marcha.crhoy.com conoció sobre este falso ciego cuando, en las afueras de la Catedral, contrastó dos realidades: dos hombres no videntes sentados en las gradas del Templo, uno que fue escoltado por las autoridades y otro que siguió pidiendo ayuda con naturalidad.Cuando se consultó a los oficiales de la policía por qué hacían eso, nos relataron la historia. Las autoridades descubrieron que era falsa su coartada cuando el tipo pidió ayuda a una mujer y un oficial se acercó para ver qué necesitaba, cuando el oficial le sujetó por detrás para ayudarle: el hombre dijo: “¿Ooficial por qué me sostiene?. “¿Cómo podía saber que era un oficial si lo sujetó por detrás? El radio no sonó, ni hubo ninguna señal”, dijo el Policía. Fue ahí cuando los oficiales empezaron a sospechar de él.Otro oficial nos aseguró que lo notaron porque no sabía usar el bastón especial para no videntes, cuando la mayoría demuestra ciertos movimientos, a él lo delató el caminar, la forma en que se mueve y cómo usaba el instrumento.Este hombre, bien conocido e identificado por las autoridades, tiene el hábito de timar a las personas de buen corazón y aunque la policía municipal y la fuerza pública le conocen no logran hacer nada con él. Todos lo describen a la perfección como “un machillo”, pues las tres parejas de policías –dos de policía municipal y una de fuerza pública- que custodiaban el parque tienen conocimiento de quién es y qué hace.¿Se puede hacer algo con una persona cómo él? Todos dieron la misma respuesta: no.La primera razón es porque no hay denuncias en su contra, aunque la policía lo sepa y haya casos registrados. El problema más grande surge porque las víctimas no van a poner una denuncia.“El problema es que al Ministerio Público no puede pasar porque no existe una ley que se le pueda aplicar. No existe nada, aquí es dejarlo a la libre y cuando lo veamos, procedemos a retirarlo…A menos de que algún transeúnte firme un parte, pero es muy difícil, a la gente no le gusta ir a la Corte, ni perder tiempo porque van, duran tres horas, le toman la declaración de 10 minutos y a los cinco minutos viene atrás el detenido”, dijo Gonzalo Mungalo, de la policía municipal.La segunda razón, es porque este hombre -aunque no sea ciego legalmente- tiene una discapacidad en un ojo, por lo que podría alegar que requiere ayuda.Mungalo prosiguió diciendo que sin duda alguna la forma más fácil de vivir para este hombre es apelando a la lástima. Mientras que otro de los policías, de apellido Mora, mencionó que para una persona como esta –que puede alegar discapacidad en algún grado- hay un vacío legal e institucional ¿Dónde meterlo? ¿Qué hacer con él?.Mientras tanto, este sujeto seguirá sorprendiendo a algunos de los transeúntes que se dejan conmover por su fachada de “ciego” indefenso, que aprovechará la ausencia de la policía para seguir haciendo de las suyas…