¡Ay, papá Chaves! Ya nos tenía inquietos con sus idas y venidas, y ahora se va pa' Atlanta a hacerse una operación. Pero ojo, que esta vez no es cualquier cosita, sino para solucionar una 'pequeña incomodidad', como él mismo lo dice, relacionada con la próstata. ¡Qué alivio que no es cáncer, vamos!
Resulta que el presidente decidió contarnos que se va a visitar a su sobrino, el doctor Freud González, un cirujano que, según él, es 'un cirujanazo'. Además, aprovechando que tiene seguro privado, se hizo unas averiguaciones y encontró un método quirúrgico que, al parecer, tiene un tiempo de recuperación rapidísimo. Uno se pregunta, ¿será que quiere volver rápido a dar discursos o tendrá otros planes?
Ahora, la cosa es que el mandatario nos aseguró que estará de vuelta en Costa Rica en tan solo ocho días –¡qué carga!–, partiendo este domingo y regresando el próximo sábado. Por lo que parece, el brete de estar fuera del país será corto, pero la incertidumbre sigue flotando en el aire. Se nota que ya sabe cómo manejar estas situaciones, evitando largas explicaciones y poniéndole humor a la ocasión.
Pero bueno, no todo es risa. Con su ausencia, tendremos una conferencia de prensa perdida la próxima semana, la primera que se pierde por temas de salud, según nos dijo. Esperemos que todo salga chiva y regrese pronto a ponerle orden a las cosas. Aunque, díganme, ¿quién necesita conferencias de prensa si tienes Twitter?
Y aquí viene la jugada maestra: mientras algunos sospechan de un posible respiro de la agenda presidencial, otros se preguntan si realmente todo está bajo control. Recordemos que el señor Chaves nunca ha sido precisamente de compartir detalles personales, así que este anuncio repentino levanta algunas cejas. Muchos murmuran, '¿habrá algo más detrás de esto?' Duro, duro... ¡más vale que no haya otro arroz con pollo!
Para rematar, nuestro querido presidente agradeció a los medios y al pueblo tico por entender la situación. Un gesto amable, claro, pero no elimina la curiosidad que despierta este viaje inesperado. Estamos hablando de un hombre acostumbrado a tomar decisiones rápidas y audaces, así que no sería extraño que este viaje tenga alguna otra motivación oculta. Esperemos que todo esté bien, siempre pensando en el bienestar del país... o tal vez buscando unos descuentos en Miami. Quién sabe, ¡con don Rodrigo todo puede pasar!
Este asunto del viaje a Atlanta nos recuerda que la vida pública es como un chunche: brilla intensamente, pero también puede caerse de las manos en cualquier momento. Es fácil criticar desde la barrera, pero ponerse en los zapatos de quien lidera un país, con todas sus presiones y responsabilidades, es otra cosa totalmente diferente. De hecho, pareciera que cada movimiento del presidente es analizado al milímetro, generando ríos de especulaciones y opiniones encontradas. ¡Un estrés que ni nos imaginamos!
En fin, mientras esperamos el regreso del presidente, la pregunta que ronda la cabeza de muchos es: ¿Realmente la hiperplasia prostática es la única razón de este viaje a Atlanta, o habrá otros asuntos pendientes que el presidente prefiere mantener en secreto? ¡Vamos, comenten abajo qué opinan! ¿Creen que es solo un tema de salud o hay algo más por debajo de la mesa?
Resulta que el presidente decidió contarnos que se va a visitar a su sobrino, el doctor Freud González, un cirujano que, según él, es 'un cirujanazo'. Además, aprovechando que tiene seguro privado, se hizo unas averiguaciones y encontró un método quirúrgico que, al parecer, tiene un tiempo de recuperación rapidísimo. Uno se pregunta, ¿será que quiere volver rápido a dar discursos o tendrá otros planes?
Ahora, la cosa es que el mandatario nos aseguró que estará de vuelta en Costa Rica en tan solo ocho días –¡qué carga!–, partiendo este domingo y regresando el próximo sábado. Por lo que parece, el brete de estar fuera del país será corto, pero la incertidumbre sigue flotando en el aire. Se nota que ya sabe cómo manejar estas situaciones, evitando largas explicaciones y poniéndole humor a la ocasión.
Pero bueno, no todo es risa. Con su ausencia, tendremos una conferencia de prensa perdida la próxima semana, la primera que se pierde por temas de salud, según nos dijo. Esperemos que todo salga chiva y regrese pronto a ponerle orden a las cosas. Aunque, díganme, ¿quién necesita conferencias de prensa si tienes Twitter?
Y aquí viene la jugada maestra: mientras algunos sospechan de un posible respiro de la agenda presidencial, otros se preguntan si realmente todo está bajo control. Recordemos que el señor Chaves nunca ha sido precisamente de compartir detalles personales, así que este anuncio repentino levanta algunas cejas. Muchos murmuran, '¿habrá algo más detrás de esto?' Duro, duro... ¡más vale que no haya otro arroz con pollo!
Para rematar, nuestro querido presidente agradeció a los medios y al pueblo tico por entender la situación. Un gesto amable, claro, pero no elimina la curiosidad que despierta este viaje inesperado. Estamos hablando de un hombre acostumbrado a tomar decisiones rápidas y audaces, así que no sería extraño que este viaje tenga alguna otra motivación oculta. Esperemos que todo esté bien, siempre pensando en el bienestar del país... o tal vez buscando unos descuentos en Miami. Quién sabe, ¡con don Rodrigo todo puede pasar!
Este asunto del viaje a Atlanta nos recuerda que la vida pública es como un chunche: brilla intensamente, pero también puede caerse de las manos en cualquier momento. Es fácil criticar desde la barrera, pero ponerse en los zapatos de quien lidera un país, con todas sus presiones y responsabilidades, es otra cosa totalmente diferente. De hecho, pareciera que cada movimiento del presidente es analizado al milímetro, generando ríos de especulaciones y opiniones encontradas. ¡Un estrés que ni nos imaginamos!
En fin, mientras esperamos el regreso del presidente, la pregunta que ronda la cabeza de muchos es: ¿Realmente la hiperplasia prostática es la única razón de este viaje a Atlanta, o habrá otros asuntos pendientes que el presidente prefiere mantener en secreto? ¡Vamos, comenten abajo qué opinan! ¿Creen que es solo un tema de salud o hay algo más por debajo de la mesa?
