Cuando se da un regalo, hay pocas posibilidades de quedar bien o que le queden bien. La camisa no es de la talla, los pañuelos son feos, la gorra es del deporte que no te gusta. Cuando se regala y se es regalado surgen conversaciones que tratan de equilibrar la situación:
1. El que regala trata de alabar las virtudes del regalo: "te sirve para", "es que pensé que...", "cuando lo vi pensé que...", "es que a vos te gustan los...", "le vi un no se qué..."etc. hasta trata de poner el adornito en el lugar que supone se ve bien.
2. Al que le regalan igual, hace cara de sorprendido y dice que era algo que le hacía falta o que hace días venía antojado de eso.
Lo mejor es regalar consumibles: vino, chocolates, galletas, etc.
Claro que todo lo anterior no se cumple si el regalo es un Mercedes Benz del Año o el Oyster Perpetual nuevo.
1. El que regala trata de alabar las virtudes del regalo: "te sirve para", "es que pensé que...", "cuando lo vi pensé que...", "es que a vos te gustan los...", "le vi un no se qué..."etc. hasta trata de poner el adornito en el lugar que supone se ve bien.
2. Al que le regalan igual, hace cara de sorprendido y dice que era algo que le hacía falta o que hace días venía antojado de eso.
Lo mejor es regalar consumibles: vino, chocolates, galletas, etc.
Claro que todo lo anterior no se cumple si el regalo es un Mercedes Benz del Año o el Oyster Perpetual nuevo.