¡Ay, Dios mío, qué bueno esto! Resulta que nuestra propia Caja de ANDE, sí, la que nos da prestamos pa’ la casa y el carro, se acaba de llevar un premio gordo por su proyecto de energía solar. No mames, ¿quién diría que una institución así estaría metiéndose con estas cosas verdes?
La movida es que el Consejo Nacional de Rectores (Conare), que son los jeves de las universidades, le dieron el Premio a la Innovación en Gestión Ambiental Empresarial con Enfoque en Cambio Climático. Básicamente, reconocieron que la Caja anda haciendo bien las cosas para cuidar el planeta, lo que ahora va bastante a la moda. Desde el 2014 que andan con la onda de ser carbon neutral, midiendo, reduciendo y compensando toda la mugre que producen.
Y no es cuento, según dicen, han instalado más de mil paneles solares en ocho de sus oficinas alrededor del país. Eso ya es una vaina considerable, vamos. Con estos paneles, han logrado bajar más de 140 toneladas de dióxido de carbono entre el 2021 y el 2024. Imagínate eso, ¡una reducción importante! Además de hacerle bien al medio ambiente, les ha salido barato, porque ahora gastan menos en electricidad. Claro, hay que invertir al principio, pero luego se recupera, ey!
Carmen Martínez, la gerente general de la Caja, soltó unas verdades bien interesantes: “Creemos que el compromiso con la sostenibilidad es también un compromiso con la educación, con las personas y con el futuro de nuestro país”. ¡Pura verdad, doña Carmen! Ya era hora de que las instituciones financieras se pusieran las pilas con esto del cuidado del planeta. No se trata solo de ganar plata, sino de dejarle algo bueno a nuestros hijos y nietos.
Dixie Arroyo, la presidenta de la junta directiva, añadió que este logro conecta con los valores del magisterio costarricense. Dijo algo así como que “cada panel solar es una luz que ilumina el camino hacia un futuro más limpio y solidario”. Qué poético, ¿eh? Me gusta cómo se expresaron, llena de optimismo y esperanza.
Este premio le pone a la Caja de ANDE en el mapa como líderes en temas ambientales dentro del sector financiero de Costa Rica. Y no es para menos, estamos hablando de un país que siempre ha tenido una conciencia verde bastante desarrollada. Recordemos que somos pioneros en hidroelectricidad y tenemos un parque nacional en casi cada rincón. Así que ver a la Caja sumándose a esta tendencia es algo muy positivo.
Claro, algunos van a decir que esto es pura publicidad, que buscan quedar bien con el público. Pero yo creo que hay algo más allá. Creo que cada vez más empresas y organizaciones se dan cuenta de que la sostenibilidad no es solo una moda pasajera, sino una necesidad imperante. El cambio climático nos está afectando a todos, y si queremos seguir disfrutando de este pedacito de paraíso llamado Costa Rica, necesitamos tomar medidas drásticas.
Ahora, dime tú... ¿crees que este tipo de iniciativas deberían ser obligatorias para todas las instituciones públicas y privadas en Costa Rica? ¿Deberíamos incentivar aún más la inversión en energías renovables para acelerar la transición hacia una economía más sostenible, o sigues pensando que esto es simplemente un show de relaciones públicas? Déjame saber tu opinión en los comentarios, ¡me interesa mucho escucharla!
La movida es que el Consejo Nacional de Rectores (Conare), que son los jeves de las universidades, le dieron el Premio a la Innovación en Gestión Ambiental Empresarial con Enfoque en Cambio Climático. Básicamente, reconocieron que la Caja anda haciendo bien las cosas para cuidar el planeta, lo que ahora va bastante a la moda. Desde el 2014 que andan con la onda de ser carbon neutral, midiendo, reduciendo y compensando toda la mugre que producen.
Y no es cuento, según dicen, han instalado más de mil paneles solares en ocho de sus oficinas alrededor del país. Eso ya es una vaina considerable, vamos. Con estos paneles, han logrado bajar más de 140 toneladas de dióxido de carbono entre el 2021 y el 2024. Imagínate eso, ¡una reducción importante! Además de hacerle bien al medio ambiente, les ha salido barato, porque ahora gastan menos en electricidad. Claro, hay que invertir al principio, pero luego se recupera, ey!
Carmen Martínez, la gerente general de la Caja, soltó unas verdades bien interesantes: “Creemos que el compromiso con la sostenibilidad es también un compromiso con la educación, con las personas y con el futuro de nuestro país”. ¡Pura verdad, doña Carmen! Ya era hora de que las instituciones financieras se pusieran las pilas con esto del cuidado del planeta. No se trata solo de ganar plata, sino de dejarle algo bueno a nuestros hijos y nietos.
Dixie Arroyo, la presidenta de la junta directiva, añadió que este logro conecta con los valores del magisterio costarricense. Dijo algo así como que “cada panel solar es una luz que ilumina el camino hacia un futuro más limpio y solidario”. Qué poético, ¿eh? Me gusta cómo se expresaron, llena de optimismo y esperanza.
Este premio le pone a la Caja de ANDE en el mapa como líderes en temas ambientales dentro del sector financiero de Costa Rica. Y no es para menos, estamos hablando de un país que siempre ha tenido una conciencia verde bastante desarrollada. Recordemos que somos pioneros en hidroelectricidad y tenemos un parque nacional en casi cada rincón. Así que ver a la Caja sumándose a esta tendencia es algo muy positivo.
Claro, algunos van a decir que esto es pura publicidad, que buscan quedar bien con el público. Pero yo creo que hay algo más allá. Creo que cada vez más empresas y organizaciones se dan cuenta de que la sostenibilidad no es solo una moda pasajera, sino una necesidad imperante. El cambio climático nos está afectando a todos, y si queremos seguir disfrutando de este pedacito de paraíso llamado Costa Rica, necesitamos tomar medidas drásticas.
Ahora, dime tú... ¿crees que este tipo de iniciativas deberían ser obligatorias para todas las instituciones públicas y privadas en Costa Rica? ¿Deberíamos incentivar aún más la inversión en energías renovables para acelerar la transición hacia una economía más sostenible, o sigues pensando que esto es simplemente un show de relaciones públicas? Déjame saber tu opinión en los comentarios, ¡me interesa mucho escucharla!