¡Ay, mi gente! Aquí les va la nota más importante de hoy: parece que estamos prendiendo la chispa del rescate en Costa Rica. Este miércoles, la Universidad de Costa Rica (UCR) se convirtió en un centro neurálgico de aprendizaje, con más de 200 personas sumándose a la sexta edición del programa 'Salvando Corazones'. Una iniciativa que promete cambiarle el panorama a cómo respondemos ante situaciones de emergencia cardíaca en el país – ¡y eso sí que es bueno!
Para los que andan distraídos, ‘Salvando Corazones’ es un proyecto que lleva ya unos buenos años funcionando, impulsado por el Colegio de Médicos y Cirujanos de Costa Rica junto con la Fundación Internacional del Corazón (FUNICOR). Su meta es clara: empoderar a la población con los conocimientos básicos para actuar rápido frente a un paro cardíaco, mientras llega la ambulancia o el servicio médico. Porque, díganlo claro, esos minutos pueden marcar la diferencia entre la vida y… pues ya saben.
Y ojo, porque esto no es cuento. Con esta última tanda de capacitaciones, ¡ya van más de 3.500 compatriotas que tienen las herramientas para ayudar a alguien en apuros! Imaginen el impacto si cada vez hay más gente preparada. Sería algo revolucionario, ¿no creen?
La movida fue brutal. Estudiantes, profes, administrativos, ¡hasta el abuelo que iba de paso! Todos ansiosos por aprender cómo hacer reanimación cardiopulmonar (RCP) correctamente. Unos 30 instructores, sacados del Colegio de Médicos, el cuerpo de bomberos, la Cruz Roja, el 9-1-1 y hasta del hospital La Católica, estuvieron ahí poniendo manos a la obra. Se les vio muy comprometidos, guiando a la gente en las prácticas y asegurándose de que entendieran bien cada paso. ¡Qué ganas de servirle al pueblo!
Pero no todo fue RCP. También hubo una parada para explicar cómo funciona el Sistema de Emergencias 9-1-1. Parece obvio, pero todavía hay muchos que no saben cómo pedir ayuda correctamente. Ese detalle, bretes, puede salvar vidas. Así que ya saben, presten atención y guarden ese número en sus celulares. Nunca se sabe cuándo lo van a necesitar.
El Dr. Elliott Garita Jiménez, presidente del Colegio de Médicos, lo dijo clarito: “El éxito de ‘Salvando Corazones’ demuestra que los ticos tenemos corazón grande y queremos ayudar. Cada persona capacitada se convierte en un potencial héroe”. Y ni él exagera, muchachos. Es la pura verdad. En un país donde siempre nos quejamos de todo, es refrescante ver iniciativas así que buscan mejorar la sociedad desde las bases.
Además, aprovecharon el momento para darle un reconocimiento especial a la Benemérita Cruz Roja Costarricense, que este año celebra sus 140 años sirviendo a la comunidad. ¡Un aplauso para ellos! Son pura roca, siempre ahí cuando más se necesita. Y hablando de reconocer, días antes, el programa había hecho otra jornada para los voluntarios del cuerpo de bomberos, donde se capacitaron unas 130 personas más. ¡Vamos, Costa Rica, que somos pura fibra!
Ahora, les dejo pensando... ¿Sería factible implementar estas jornadas de capacitación en todas las escuelas y colegios del país? ¿Creen que sería una inversión necesaria para reducir la mortalidad por paros cardíacos repentinos y crear una comunidad más resiliente? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios!
Para los que andan distraídos, ‘Salvando Corazones’ es un proyecto que lleva ya unos buenos años funcionando, impulsado por el Colegio de Médicos y Cirujanos de Costa Rica junto con la Fundación Internacional del Corazón (FUNICOR). Su meta es clara: empoderar a la población con los conocimientos básicos para actuar rápido frente a un paro cardíaco, mientras llega la ambulancia o el servicio médico. Porque, díganlo claro, esos minutos pueden marcar la diferencia entre la vida y… pues ya saben.
Y ojo, porque esto no es cuento. Con esta última tanda de capacitaciones, ¡ya van más de 3.500 compatriotas que tienen las herramientas para ayudar a alguien en apuros! Imaginen el impacto si cada vez hay más gente preparada. Sería algo revolucionario, ¿no creen?
La movida fue brutal. Estudiantes, profes, administrativos, ¡hasta el abuelo que iba de paso! Todos ansiosos por aprender cómo hacer reanimación cardiopulmonar (RCP) correctamente. Unos 30 instructores, sacados del Colegio de Médicos, el cuerpo de bomberos, la Cruz Roja, el 9-1-1 y hasta del hospital La Católica, estuvieron ahí poniendo manos a la obra. Se les vio muy comprometidos, guiando a la gente en las prácticas y asegurándose de que entendieran bien cada paso. ¡Qué ganas de servirle al pueblo!
Pero no todo fue RCP. También hubo una parada para explicar cómo funciona el Sistema de Emergencias 9-1-1. Parece obvio, pero todavía hay muchos que no saben cómo pedir ayuda correctamente. Ese detalle, bretes, puede salvar vidas. Así que ya saben, presten atención y guarden ese número en sus celulares. Nunca se sabe cuándo lo van a necesitar.
El Dr. Elliott Garita Jiménez, presidente del Colegio de Médicos, lo dijo clarito: “El éxito de ‘Salvando Corazones’ demuestra que los ticos tenemos corazón grande y queremos ayudar. Cada persona capacitada se convierte en un potencial héroe”. Y ni él exagera, muchachos. Es la pura verdad. En un país donde siempre nos quejamos de todo, es refrescante ver iniciativas así que buscan mejorar la sociedad desde las bases.
Además, aprovecharon el momento para darle un reconocimiento especial a la Benemérita Cruz Roja Costarricense, que este año celebra sus 140 años sirviendo a la comunidad. ¡Un aplauso para ellos! Son pura roca, siempre ahí cuando más se necesita. Y hablando de reconocer, días antes, el programa había hecho otra jornada para los voluntarios del cuerpo de bomberos, donde se capacitaron unas 130 personas más. ¡Vamos, Costa Rica, que somos pura fibra!
Ahora, les dejo pensando... ¿Sería factible implementar estas jornadas de capacitación en todas las escuelas y colegios del país? ¿Creen que sería una inversión necesaria para reducir la mortalidad por paros cardíacos repentinos y crear una comunidad más resiliente? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios!
