¡Ay, Dios mío, qué bronca! Resulta que la Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS) anda negando haber alertado a la Presidencia sobre unas investigaciones gringas a la empresa Tradeco y a un exdirectivo nuestro, Carlos González Macías. Pero aquí viene la súper sorpresa: ¡hay documentos que confirman que el Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ) sí los tenía bajo la lupa por posibles nexos con el narcotráfico y hasta actos de corrupción en Honduras! Esta vainera parece sacada de novela, pero es pura vida.
Todo esto sale a la luz ahora, aunque la onda es que Estados Unidos ya había pedido información sobre González Macías y Tradeco allá por abril de 2019. Parece que la DIS, en lugar de pasarle la data a nuestros mandamases, decidió hacerse los dormidos. Imagínate, ¡más de seis años guardándose este secretito! Ahora resulta que el director de la DIS, Jorge Torres Carrillo, salió en un video negándolo todo, diciendo que el director anterior le aseguró que esos señores no tenían nada que ver con cosas turbias. ¡Pero eso es mentiritas! Las pruebas están ahí, claritas como el agua de Bagaces.
Y no es cualquier investigación, mi gente. Estamos hablando del mismo caso del expresidente hondureño Juan Orlando Hernández, condenado a 45 años de cárcel por tráfico de drogas. González Macías y Tradeco aparecen en medio de esa maraña, siendo investigados por la Oficina del Fiscal del Distrito Sur de Nueva York. Además, ¡hasta la constructora Tradeco está metida en el ajo! Parece que la cosa huele bastante feo, y nosotros aquí nos preguntamos: ¿qué andaba pasando realmente en la DIS?
Para colmo de males, la Administración de Control de Drogas (DEA) también investigó a González Macías entre 2019 y 2020 por su relación con un tipo en Houston, Texas, y Atlanta, Georgia, que se cree que anda distribuyendo cocaína. ¡Madre mía! ¿Cómo es posible que la DIS no viera nada de esto? Uno se queda pensando si estaban viendo películas o jugando ajedrez mientras el país corría peligro.
Recordemos que el presidente Rodrigo Chaves ha estado presionando a diés y diecisiete para que Tradeco se quede con el contrato de la ruta Barranca-Limonal. Luis Amador, el exministro de Obras Públicas, declaró ante la Fiscalía que recibió advertencias de la DIS sobre los presuntos nexos de la empresa con el narcotráfico y la corrupción. ¡Eso es un bombazo! Y ahora resulta que Torres Carrillo contradice el testimonio de Amador, ¡como si nada estuviera pasando! Este brete se pone cada vez más complicado.
Lo más raro de todo es que la DIS y Presidencia no quieren contestar nuestras preguntas. Enviamos un montón de correos electrónicos, preguntando si tenían algún respaldo para negar todas estas acusaciones, si sabían sobre las investigaciones gringas… ¡pero silencio absoluto! Nos dijeron que teníamos que contactar a la oficina de prensa de Presidencia, pero ahí tampoco hemos tenido suerte. Parece que alguien está tratando de esconder algo, y eso no da confianza. Ya casi me da un desmayo con tanta chincha.
Y para ponerle la cereza al pastel, resulta que Hans Sequeira, el antiguo director de la DIS, también está en el ojo del huracán. Le preguntamos directamente si alguna vez emitió una alerta sobre Tradeco al presidente Chaves o al exministro Amador, pero tampoco obtuvo respuesta. ¡Parece que todos están tratando de lavarse las manos! Este caso huele a rancio, y necesitamos que salga toda la verdad a la luz. Yo creo que la fiscalía tiene mucho trabajo por delante, porque la vaina está bien aguada.
Con tantas vueltas y encubrimientos, uno no sabe a quién creer. ¿Será que estamos frente a una red de corrupción aún mayor de lo que imaginamos? ¿Es posible que altos funcionarios hayan estado protegiendo a esta empresa y sus dueños durante años? ¿Debería el gobierno ordenar una investigación interna exhaustiva en la DIS para esclarecer estos hechos y evitar que esto vuelva a suceder? ¡Déjenme saber su opinión en el foro, mi gente! Necesitamos debatir sobre esto para que Costa Rica siga siendo un país transparente y justo.
Todo esto sale a la luz ahora, aunque la onda es que Estados Unidos ya había pedido información sobre González Macías y Tradeco allá por abril de 2019. Parece que la DIS, en lugar de pasarle la data a nuestros mandamases, decidió hacerse los dormidos. Imagínate, ¡más de seis años guardándose este secretito! Ahora resulta que el director de la DIS, Jorge Torres Carrillo, salió en un video negándolo todo, diciendo que el director anterior le aseguró que esos señores no tenían nada que ver con cosas turbias. ¡Pero eso es mentiritas! Las pruebas están ahí, claritas como el agua de Bagaces.
Y no es cualquier investigación, mi gente. Estamos hablando del mismo caso del expresidente hondureño Juan Orlando Hernández, condenado a 45 años de cárcel por tráfico de drogas. González Macías y Tradeco aparecen en medio de esa maraña, siendo investigados por la Oficina del Fiscal del Distrito Sur de Nueva York. Además, ¡hasta la constructora Tradeco está metida en el ajo! Parece que la cosa huele bastante feo, y nosotros aquí nos preguntamos: ¿qué andaba pasando realmente en la DIS?
Para colmo de males, la Administración de Control de Drogas (DEA) también investigó a González Macías entre 2019 y 2020 por su relación con un tipo en Houston, Texas, y Atlanta, Georgia, que se cree que anda distribuyendo cocaína. ¡Madre mía! ¿Cómo es posible que la DIS no viera nada de esto? Uno se queda pensando si estaban viendo películas o jugando ajedrez mientras el país corría peligro.
Recordemos que el presidente Rodrigo Chaves ha estado presionando a diés y diecisiete para que Tradeco se quede con el contrato de la ruta Barranca-Limonal. Luis Amador, el exministro de Obras Públicas, declaró ante la Fiscalía que recibió advertencias de la DIS sobre los presuntos nexos de la empresa con el narcotráfico y la corrupción. ¡Eso es un bombazo! Y ahora resulta que Torres Carrillo contradice el testimonio de Amador, ¡como si nada estuviera pasando! Este brete se pone cada vez más complicado.
Lo más raro de todo es que la DIS y Presidencia no quieren contestar nuestras preguntas. Enviamos un montón de correos electrónicos, preguntando si tenían algún respaldo para negar todas estas acusaciones, si sabían sobre las investigaciones gringas… ¡pero silencio absoluto! Nos dijeron que teníamos que contactar a la oficina de prensa de Presidencia, pero ahí tampoco hemos tenido suerte. Parece que alguien está tratando de esconder algo, y eso no da confianza. Ya casi me da un desmayo con tanta chincha.
Y para ponerle la cereza al pastel, resulta que Hans Sequeira, el antiguo director de la DIS, también está en el ojo del huracán. Le preguntamos directamente si alguna vez emitió una alerta sobre Tradeco al presidente Chaves o al exministro Amador, pero tampoco obtuvo respuesta. ¡Parece que todos están tratando de lavarse las manos! Este caso huele a rancio, y necesitamos que salga toda la verdad a la luz. Yo creo que la fiscalía tiene mucho trabajo por delante, porque la vaina está bien aguada.
Con tantas vueltas y encubrimientos, uno no sabe a quién creer. ¿Será que estamos frente a una red de corrupción aún mayor de lo que imaginamos? ¿Es posible que altos funcionarios hayan estado protegiendo a esta empresa y sus dueños durante años? ¿Debería el gobierno ordenar una investigación interna exhaustiva en la DIS para esclarecer estos hechos y evitar que esto vuelva a suceder? ¡Déjenme saber su opinión en el foro, mi gente! Necesitamos debatir sobre esto para que Costa Rica siga siendo un país transparente y justo.
