¡Ay, Dios mío! Parece que la cosa se puso turbia, mi gente. Interpol acaba de soltar la bomba: la temida ‘Ndrangheta, esa mafia italiana que da más escalofríos que el Cerro de la Muerte en diciembre, anda metiéndose hasta en nuestros asuntos. No precisamente a regalar pan dulce, sino buscando cómo lavar billetes y mover cocaína pa’ Europa. Esto es más serio que la fila pa’ los deberes del Seguro Social, créeme.
Según el reporte de la Policía Internacional, esta banda de maleantes tiene tentáculos en 23 países, y parece que Costa Rica no es la excepción. Hablamos de una organización tan vieja como el roble, con más conexiones que el sistema eléctrico en temporada de lluvias. Fiscales y funcionarios del OIJ ya confirmaron que andan chambeando con los italianos, intercambiando información a toda máquina para ver qué onda.
Mauricio Boraschi, el fiscal adjunto contra la Delincuencia Organizada, nos aclaró que nuestra ubicación geográfica nos convierte en “país de importancia” pa’ estas operaciones. Dice que estamos como pescado en agua para los narcos, con tanta costa y tantos puertos. Por eso, según él, ya se prepararon con Interpol y el OIJ pa’ descubrir cualquier vínculo sospechoso que tengamos con esta mafia. ¡Imagínate, estar yo mismo involucrado en esto! ¡Qué sal!
Michael Soto, el subdirector del OIJ, también echó luz sobre el asunto. Nos contó que están colaborando con Interpol en el intercambio de información, como buenos vecinos. Si surge algún caso especial, dicen que estarán listos pa’ apoyar con lo que falte. Total, nosotros somos un país de ley y orden, aunque a veces le demos facilidades a los delincuentes… Pero bueno, nadie es perfecto, ¿verdad?
	
		
			
		
		
	
				
			Según el reporte de la Policía Internacional, esta banda de maleantes tiene tentáculos en 23 países, y parece que Costa Rica no es la excepción. Hablamos de una organización tan vieja como el roble, con más conexiones que el sistema eléctrico en temporada de lluvias. Fiscales y funcionarios del OIJ ya confirmaron que andan chambeando con los italianos, intercambiando información a toda máquina para ver qué onda.
Mauricio Boraschi, el fiscal adjunto contra la Delincuencia Organizada, nos aclaró que nuestra ubicación geográfica nos convierte en “país de importancia” pa’ estas operaciones. Dice que estamos como pescado en agua para los narcos, con tanta costa y tantos puertos. Por eso, según él, ya se prepararon con Interpol y el OIJ pa’ descubrir cualquier vínculo sospechoso que tengamos con esta mafia. ¡Imagínate, estar yo mismo involucrado en esto! ¡Qué sal!
Michael Soto, el subdirector del OIJ, también echó luz sobre el asunto. Nos contó que están colaborando con Interpol en el intercambio de información, como buenos vecinos. Si surge algún caso especial, dicen que estarán listos pa’ apoyar con lo que falte. Total, nosotros somos un país de ley y orden, aunque a veces le demos facilidades a los delincuentes… Pero bueno, nadie es perfecto, ¿verdad?
 
	 
 
		 
  
 
		 
 
		 
 
		 
  
 
		 
 
		 
 
		 
 
		 
 
		 
 
		 
 
		