¡Ay, Dios mío, qué vaina! Marta Esquivel sigue buscando agujeros donde no hay, y ahora el TSE le puso el dedo en el renglón, rechazándole de plano sus recursos de amparo y nulidad. Parece que la jueza no quiere dejarla pasar y le cerraron todas las puertas, diay.
Para refrescarle la memoria a algunos, todo este brete empezó porque Esquivel y su compañero Roy Thompson Chacón no quedaron contentos con algunas decisiones que tomó el Tribunal durante las últimas elecciones. Querían anular unas sentencias y echar para atrás una resolución de la Administración Electoral, alegando mil y un problemas, pero al final, pareció que les quedaba corto el argumento.
El TSE, con su resolución número 7218-E1-2025, básicamente les dijo 'chao, nos vemos'. Se agarraron del artículo 103 de la Constitución – el que dice que las cosas que decide el TSE en temas electorales no se pueden apelar – y también citaron el artículo 30 de la Ley de la Jurisdicción Constitucional. Vamos, que lo tenían bien clarito: una vez que el TSE habla, ahí quedó dicho, mi pana.
Y eso no es todo. Según el TSE, si querían reclamarle a la Administración Electoral, debieron haberlo hecho a través del recurso de apelación electoral, no con un amparo. Como dicen por ahí, cada cosa tiene su momento y su lugar, y Esquivel eligió la vía equivocada. ¡Qué pena!
Además, intentaron meter una jugada para que jueces suplentes conocieran el caso, pero tampoco funcionó. El Tribunal respondió que no había motivos válidos para que se apartaran los magistrados regulares, porque nadie estaba acusándolos de favoritismos ni nada por el estilo. Así que, ¡agua tibia para esa estrategia!
Con esta decisión, el TSE reitera que ellos tienen la última palabra en materia electoral, y que todos los demás deben respetar las leyes y los procedimientos establecidos. Es como decir: 'Aquí mandamos nosotros, y no vamos a permitir que nadie nos venga a complicar la vida con trampas ni rodeos'. Una afirmación contundente, diríamos.
Este episodio, obviamente, genera mucha conversación entre los analistas políticos y en las redes sociales. Algunos ven esto como una muestra de fortaleza del TSE ante intentos de manipulación, mientras que otros argumentan que Esquivel tenía derecho a defender sus argumentos, aunque fueran infructuosos. Lo cierto es que el tema está dando de qué hablar, y seguramente veremos más reacciones en los próximos días. Ya saben cómo son estas cositas políticas... siempre hay polémica, mi amigo.
En fin, parece que la telenovela de Marta Esquivel y el TSE no termina tan pronto como ella esperaba. ¿Ustedes creen que Esquivel debería aceptar la derrota e irse a casa tranquila, o seguirá buscando la forma de revertir la situación? ¿Y consideran que el TSE actuó correctamente al rechazar sus recursos?
Para refrescarle la memoria a algunos, todo este brete empezó porque Esquivel y su compañero Roy Thompson Chacón no quedaron contentos con algunas decisiones que tomó el Tribunal durante las últimas elecciones. Querían anular unas sentencias y echar para atrás una resolución de la Administración Electoral, alegando mil y un problemas, pero al final, pareció que les quedaba corto el argumento.
El TSE, con su resolución número 7218-E1-2025, básicamente les dijo 'chao, nos vemos'. Se agarraron del artículo 103 de la Constitución – el que dice que las cosas que decide el TSE en temas electorales no se pueden apelar – y también citaron el artículo 30 de la Ley de la Jurisdicción Constitucional. Vamos, que lo tenían bien clarito: una vez que el TSE habla, ahí quedó dicho, mi pana.
Y eso no es todo. Según el TSE, si querían reclamarle a la Administración Electoral, debieron haberlo hecho a través del recurso de apelación electoral, no con un amparo. Como dicen por ahí, cada cosa tiene su momento y su lugar, y Esquivel eligió la vía equivocada. ¡Qué pena!
Además, intentaron meter una jugada para que jueces suplentes conocieran el caso, pero tampoco funcionó. El Tribunal respondió que no había motivos válidos para que se apartaran los magistrados regulares, porque nadie estaba acusándolos de favoritismos ni nada por el estilo. Así que, ¡agua tibia para esa estrategia!
Con esta decisión, el TSE reitera que ellos tienen la última palabra en materia electoral, y que todos los demás deben respetar las leyes y los procedimientos establecidos. Es como decir: 'Aquí mandamos nosotros, y no vamos a permitir que nadie nos venga a complicar la vida con trampas ni rodeos'. Una afirmación contundente, diríamos.
Este episodio, obviamente, genera mucha conversación entre los analistas políticos y en las redes sociales. Algunos ven esto como una muestra de fortaleza del TSE ante intentos de manipulación, mientras que otros argumentan que Esquivel tenía derecho a defender sus argumentos, aunque fueran infructuosos. Lo cierto es que el tema está dando de qué hablar, y seguramente veremos más reacciones en los próximos días. Ya saben cómo son estas cositas políticas... siempre hay polémica, mi amigo.
En fin, parece que la telenovela de Marta Esquivel y el TSE no termina tan pronto como ella esperaba. ¿Ustedes creen que Esquivel debería aceptar la derrota e irse a casa tranquila, o seguirá buscando la forma de revertir la situación? ¿Y consideran que el TSE actuó correctamente al rechazar sus recursos?