¡Ay, Dios mío! Quién diría que desde Moravia, cerquita del centro de San Jerónimo, podemos tener unas vistas así, ¿verdad?
El Rancho Ryu, apenas cuatro kilometritos del corazón de Moravia y catorce del centro de San Jerónimo, nos regaló este espectáculo que dejó a muchos boquiabiertos. El doctor Bernal García, con su ojo de halcón, capturó unas fotos que te dejan sin aliento. Imagínate, ahí estaban los volcanes Turrialba e Irazú, bien claritos, como si estuvieran posando para la cámara.
Pero eso no es todo, mi clave. Sobre el Irazú, una nubosidad impresionante, pero si te acercas, puedes distinguir hasta las antenas de transmisión. Como si le pusieran parlantes gigantes al coloso. Y luego, el Turrialba... ¡madre mía! Una nube con forma de colocho, ¿dime tú qué significa eso? Parece una erupción de gas juguetona, burlándose de nosotros. ¡Una verdadera obra de arte de la naturaleza!
Para los que no estén familiarizados, el Irazú es el techo de Costa Rica, el volcán más alto del país. Sus pendientes empinados y su actividad geotérmica constante lo convierten en un lugar único. Mientras que el Turrialba, aunque ha tenido sus momentos complicados con erupciones pasadas, sigue siendo un gigante imponente que vigila nuestra tierra.
Este tipo de vistas nos recuerdan la belleza salvaje que tenemos en nuestro país. No necesitamos irnos lejos buscando paisajes exóticos; basta con levantar la mirada y apreciar lo que tenemos aquí mismo. Es una bendición poder disfrutar de semejante espectáculo desde un lugar tan accesible como Moravia. Pocos lugares en el mundo ofrecen este privilegio de ver dos volcanes activos con tanta claridad.
Muchos se preguntarán cómo es posible tener estas vistas despejadas, considerando que vivimos en un país conocido por sus nubes y lluvia. Bueno, la combinación de factores climáticos, vientos predominantes y la ubicación estratégica del Rancho Ryu contribuyen a este panorama privilegiado. Además, la época del año juega un papel importante. En algunas épocas secas, como ahora, las condiciones son ideales para la visibilidad.
Esta fotografía es un recordatorio de la importancia de valorar y proteger nuestros recursos naturales. Tenemos que cuidar nuestros volcanes, nuestras montañas y nuestro medio ambiente, porque ellos también nos cuidan a nosotros. Además, nos dan harta vara para hacer turismo y mostrarle al mundo la riqueza que tenemos en Costa Rica. ¡Qué bonito es nuestro país!
Así que ya sabes, si estás cerca de Moravia, date una vuelta al Rancho Ryu, levanta la cabeza y disfruta de esta postal inolvidable. Pero dime, ¿crees que estas vistas espectaculares nos hacen sentir más conectados con la naturaleza y más orgullosos de ser ticos?
El Rancho Ryu, apenas cuatro kilometritos del corazón de Moravia y catorce del centro de San Jerónimo, nos regaló este espectáculo que dejó a muchos boquiabiertos. El doctor Bernal García, con su ojo de halcón, capturó unas fotos que te dejan sin aliento. Imagínate, ahí estaban los volcanes Turrialba e Irazú, bien claritos, como si estuvieran posando para la cámara.
Pero eso no es todo, mi clave. Sobre el Irazú, una nubosidad impresionante, pero si te acercas, puedes distinguir hasta las antenas de transmisión. Como si le pusieran parlantes gigantes al coloso. Y luego, el Turrialba... ¡madre mía! Una nube con forma de colocho, ¿dime tú qué significa eso? Parece una erupción de gas juguetona, burlándose de nosotros. ¡Una verdadera obra de arte de la naturaleza!
Para los que no estén familiarizados, el Irazú es el techo de Costa Rica, el volcán más alto del país. Sus pendientes empinados y su actividad geotérmica constante lo convierten en un lugar único. Mientras que el Turrialba, aunque ha tenido sus momentos complicados con erupciones pasadas, sigue siendo un gigante imponente que vigila nuestra tierra.
Este tipo de vistas nos recuerdan la belleza salvaje que tenemos en nuestro país. No necesitamos irnos lejos buscando paisajes exóticos; basta con levantar la mirada y apreciar lo que tenemos aquí mismo. Es una bendición poder disfrutar de semejante espectáculo desde un lugar tan accesible como Moravia. Pocos lugares en el mundo ofrecen este privilegio de ver dos volcanes activos con tanta claridad.
Muchos se preguntarán cómo es posible tener estas vistas despejadas, considerando que vivimos en un país conocido por sus nubes y lluvia. Bueno, la combinación de factores climáticos, vientos predominantes y la ubicación estratégica del Rancho Ryu contribuyen a este panorama privilegiado. Además, la época del año juega un papel importante. En algunas épocas secas, como ahora, las condiciones son ideales para la visibilidad.
Esta fotografía es un recordatorio de la importancia de valorar y proteger nuestros recursos naturales. Tenemos que cuidar nuestros volcanes, nuestras montañas y nuestro medio ambiente, porque ellos también nos cuidan a nosotros. Además, nos dan harta vara para hacer turismo y mostrarle al mundo la riqueza que tenemos en Costa Rica. ¡Qué bonito es nuestro país!
Así que ya sabes, si estás cerca de Moravia, date una vuelta al Rancho Ryu, levanta la cabeza y disfruta de esta postal inolvidable. Pero dime, ¿crees que estas vistas espectaculares nos hacen sentir más conectados con la naturaleza y más orgullosos de ser ticos?