¡Aguas, mi gente! Si tenías planes de visitar al cuate en Miami o ir a comprarte unas chuches a Orlando, prepárate porque la cosa puede que se complique un poquito. Resulta que desde hace rato se hablaba de un cargo extra para las visas americanas, y aunque debió haber entrado en vigor el 1 de octubre, parece que todavía hay más tela que cortar que algodón.
La movida es así: allá en Estados Unidos aprobaron una ley, cortesía del señor Trump, que establece un “Visa Integrity Fee” – unos $250 dólares extra que tendrás que pagar si quieres sacar una visa de no inmigrante, como la B1/B2 para turismo o negocios. La idea, según dicen, es fortalecer la seguridad de sus fronteras y evitar que la gente se quede allá ilegalmente... pero bueno, pa’ nosotros eso significa desembolsar un buen pedazo de lana.
Ahora bien, el problema es que no hay nada concreto. Ni el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ni el Departamento de Estado han sacado las regulaciones oficiales necesarias para activar esta tarifaza. Eso deja a muchos varados, pensando si van a tener que desembolsar esos billetes o si es pura vaina todavía. Muchos de mis compas ya estaban haciendo cuentas pa’ ese gasto extra, y ahora están más confundidos que gallinas en tormenta.
Si te preguntas cuánto costará al final, fíjate que la visa B1/B2 ahorita cuesta $185. Sumándole los $250 del cargo, estaríamos hablando de $435. Un buen dinero, especialmente pa’ los que apenas estamos juntando pa’ el brete. Y ojo, esto es solo el inicio; la ley dice que el monto va a aumentar cada año, así que la cosa puede ponerse más salada con el tiempo. ¡Qué nivel!
La buena noticia es que no todos tienen que preocuparse. Los ciudadanos de los países del programa de exención de visas (Visa Waiver Program), como España, Chile, Japón, Australia… ¡hasta Inglaterra!, pueden entrar a Estados Unidos por hasta 90 días con una autorización electrónica, sin necesidad de visa tradicional. Así que si tienes pasaporte de alguno de esos lugares, puedes seguir disfrutando de los churros americanos sin ese cargo extra. Pero claro, ahí sí tienes que estar atento a las reglas y renovar tu autorización a tiempo, diay.
Otro detalle importante es que este cargo no reemplaza otras tarifas. Se suma a las ya existentes, entonces, prepárate para aflojar la bolsa si necesitas una visa. Además, todavía no saben cómo se va a cobrar exactamente. ¿Online? ¿En la embajada? ¿Con criptomonedas? Todo está en el aire, mi pana. Y tampoco quedó claro cuál oficina del gobierno será la encargada de administrar estos fondos. Parece que todavía le están buscando el rol.
La verdad es que toda esta incertidumbre es bastante frustrante. Uno quiere planear sus vacaciones, hacer sus trámites con anticipación, pero con tanto lío no sabes qué esperar. Además, preocupa que al final, este cargo afecte principalmente a los ticos que realmente necesitan viajar por motivos laborales o personales, que no pueden permitirse gastar más dinero en visas. ¿Será que buscan desalentar la migración o simplemente les hace falta una vara?
En fin, la pelota está en la cancha del gobierno americano para aclarar todas estas dudas. Mientras tanto, lo único que podemos hacer es estar pendientes de las noticias y prepararnos mentalmente para lo que venga. ¿Crees que este cargo afectará significativamente los viajes de los costarricenses a Estados Unidos o será simplemente otro obstáculo más en el camino? Cuéntame tu opinión en los comentarios, ¡quiero saber qué piensas tú también!
La movida es así: allá en Estados Unidos aprobaron una ley, cortesía del señor Trump, que establece un “Visa Integrity Fee” – unos $250 dólares extra que tendrás que pagar si quieres sacar una visa de no inmigrante, como la B1/B2 para turismo o negocios. La idea, según dicen, es fortalecer la seguridad de sus fronteras y evitar que la gente se quede allá ilegalmente... pero bueno, pa’ nosotros eso significa desembolsar un buen pedazo de lana.
Ahora bien, el problema es que no hay nada concreto. Ni el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ni el Departamento de Estado han sacado las regulaciones oficiales necesarias para activar esta tarifaza. Eso deja a muchos varados, pensando si van a tener que desembolsar esos billetes o si es pura vaina todavía. Muchos de mis compas ya estaban haciendo cuentas pa’ ese gasto extra, y ahora están más confundidos que gallinas en tormenta.
Si te preguntas cuánto costará al final, fíjate que la visa B1/B2 ahorita cuesta $185. Sumándole los $250 del cargo, estaríamos hablando de $435. Un buen dinero, especialmente pa’ los que apenas estamos juntando pa’ el brete. Y ojo, esto es solo el inicio; la ley dice que el monto va a aumentar cada año, así que la cosa puede ponerse más salada con el tiempo. ¡Qué nivel!
La buena noticia es que no todos tienen que preocuparse. Los ciudadanos de los países del programa de exención de visas (Visa Waiver Program), como España, Chile, Japón, Australia… ¡hasta Inglaterra!, pueden entrar a Estados Unidos por hasta 90 días con una autorización electrónica, sin necesidad de visa tradicional. Así que si tienes pasaporte de alguno de esos lugares, puedes seguir disfrutando de los churros americanos sin ese cargo extra. Pero claro, ahí sí tienes que estar atento a las reglas y renovar tu autorización a tiempo, diay.
Otro detalle importante es que este cargo no reemplaza otras tarifas. Se suma a las ya existentes, entonces, prepárate para aflojar la bolsa si necesitas una visa. Además, todavía no saben cómo se va a cobrar exactamente. ¿Online? ¿En la embajada? ¿Con criptomonedas? Todo está en el aire, mi pana. Y tampoco quedó claro cuál oficina del gobierno será la encargada de administrar estos fondos. Parece que todavía le están buscando el rol.
La verdad es que toda esta incertidumbre es bastante frustrante. Uno quiere planear sus vacaciones, hacer sus trámites con anticipación, pero con tanto lío no sabes qué esperar. Además, preocupa que al final, este cargo afecte principalmente a los ticos que realmente necesitan viajar por motivos laborales o personales, que no pueden permitirse gastar más dinero en visas. ¿Será que buscan desalentar la migración o simplemente les hace falta una vara?
En fin, la pelota está en la cancha del gobierno americano para aclarar todas estas dudas. Mientras tanto, lo único que podemos hacer es estar pendientes de las noticias y prepararnos mentalmente para lo que venga. ¿Crees que este cargo afectará significativamente los viajes de los costarricenses a Estados Unidos o será simplemente otro obstáculo más en el camino? Cuéntame tu opinión en los comentarios, ¡quiero saber qué piensas tú también!
