la inversión es de un alto riesgo, por la naturaleza de la empresa, que está desarrollanod una nueva idea. Puede que funcione. Como puede que también no resulte y que sus acciones se conviertan en un título sin valor.
Pero así es la naturaleza de una economía dinámica. Y en este sentido, que tenga éxito o fracaso la inversión, no es producto de fraude. Puede que al final el motor de plasma se considere impráctico. O puede que haya tecnologías alternativas que sean más eficientes y fáciles de implementar.
En este sentido, invertir en este fondo debe hacerse con cuidado. Por un lado, el mismo fondo está diversificado, siendo que posee 60% en títulos de gobierno (los menos reisgosos pero menos rentables) y 40% de acciones de la empresa. Pero igual, invertir toda la plata de uno en este fondo tiene su riesgo y jamás debe hacerse. A lo menso, un 10% de sus ahorros. De esta forma, lo más que puede perder es 4% de sus ahorros si la empresa no funciona.
Y es curiosa la actitud nuestra ante el éxito o el fracaso: aquí cuando una empresa quiebra, se ve como la mayor calamidad. En otros países, simplemente se asume que fue una lástima y se sigue en otros proyectos. La empresa se liquida y se continúa en otros proyectos. Las personas aprenden de los errores o problemas, y logran mejorar y eventualmente sacar un producto valioso. O pueden que no y desistan de ser innovadores.
De hecho, existen los llamados "Venture Capitalists" que buscan empresas com la de Franklin Chang, e invierten en ellas. 20 o 30. Algunas de ellas no funcionarán y lo invertido se esfumará. Pero de ellas, unas cuantas sí serán rentables, y logran cubrir las pérdidas del resto.
Esto es un motor de desarrollo muy importante, porque permite a empresas como la de Chang tener acceso a recursos financieros. Esto porque empresas como la suya no pueden tener acceso a financiamiento banacario, y en realidad no es recomendable que lo tengan, por lo ue estos fondos suplen sus necesiades.
Si Chang logra triunfar en su proyecto, enhorabuena. Pero si no lo logra, será una ganancia también, y si persiste quizás sea al final mucho mejor un descubrimeinto posterior. Así es la dinámica de la innovación: muchas ideas que parecen buenas fracasan y otras que ni se pensó, triunfan.