¡Eidai, pura vida, compas! Aquí les va la nota fresca que estaban esperando. Parece mentira, pero los tiempos cambian, y aunque todavía hay quien vive al día, cada vez más huesitos están agarrándole la espinita al ahorro y a ponerle orden a sus cuentas. ¿Se imaginan poder irse de vacaciones a Grecia sin tener que vender un riñón?
Resulta que, luego de unos añitos donde el aguacate estaba caro y el fiambre amenazaba con desaparecer de nuestras mesas, la gente se dio cuenta de que planificar las finanzas no es un lujo, sino una necesidad. Jonathan Hernández, jefe de captación de Davivienda, nos explica que el ahorro es como un salvavidas, te rescata de quedar varado cuando te llega un sopapo inesperado, ya sea un problemón de salud o, Dios no lo quiera, una avería en el corcel.
Y no hablamos solo de guardar la plata debajo del colchón, chunches. Hernández insiste en que es más bien una cuestión de tomar decisiones conscientes. “No se trata solo de tener la lana parada, sino de saber cómo moverla para que trabaje por ti”, dice el señor, y tiene razón. Aprender a invertir, aunque sea un poco, es como darle gasolina a tu futuro. Así, cuando llegue el momento de comprarte la casita propia, o mandarte unas vacaciones a dedo gordo por Europa, ya tienes la feria lista.
Otro mae que anda metido en estas vainas es Carlos Valerín, asesor financiero. Él nos dice que lo primordial es crear el hábito, y eso requiere disciplina. “Lo ideal es empezar con poco, aunque sea un cinco colones al día. Lo importante es romper esa barrera mental y volverse constante. Después, aumentas poquito a poco. Recuerden que el hábito, pues, dura como noventa días, así que hay que aguantar la chincha al principio”.
Ahora, algunos dirán que con los precios por las nubes, ¿cómo se supone que vas a ahorrar? Pues ahí entra la clave del presupuesto, mis queridos. Saber exactamente cuánto entra y cuánto sale cada mes es fundamental para identificar dónde estás tirando la lana y recortar gastos innecesarios. Hernández nos pone macanas: “Tener un presupuesto es indispensable, da igual si ganas mucho o poco. Te ayuda a ver dónde se te escapa el agua y a controlar el gasto”.
Y no piensen que ahorrar es solo para adultos. ¡Los puros son los que tienen que aprender a manejar la plata desde chiquitos! Valerín nos recuerda que la responsabilidad de educarlos financieramente recae en los papás. Enseñarles a destinar una parte de la mesada al ahorro antes de gastarla en jueguitos o dulces, es sembrar una semilla que florecerá en el futuro. ¿Quién no quiere criaturitas que sepan administrar su dinero y no se vayan al traste cuando sean mayores?
Para quienes se sienten perdidos en el mundo de las finanzas, las entidades bancarias ofrecen herramientas como el ahorro programado, que automatizan el proceso y te evitan la tentación de gastar la plata en un capricho. Además, hay opciones como los certificados de depósito a plazo, que te permiten obtener intereses por mantener tu dinero guardado durante un tiempo determinado. ¡Así la lana trabaja por ti, ey!
Bueno, ahora sí, mi pana, llegamos al final de esta nota llena de consejos para ponerle orden a tus finanzas. ¿Y tú, qué estrategias utilizas para ahorrar y construir un futuro económico más sólido? Déjanos tu opinión en el foro y comparte tus experiencias; ¡quizás inspires a otros a cambiar sus vidas!”,
Resulta que, luego de unos añitos donde el aguacate estaba caro y el fiambre amenazaba con desaparecer de nuestras mesas, la gente se dio cuenta de que planificar las finanzas no es un lujo, sino una necesidad. Jonathan Hernández, jefe de captación de Davivienda, nos explica que el ahorro es como un salvavidas, te rescata de quedar varado cuando te llega un sopapo inesperado, ya sea un problemón de salud o, Dios no lo quiera, una avería en el corcel.
Y no hablamos solo de guardar la plata debajo del colchón, chunches. Hernández insiste en que es más bien una cuestión de tomar decisiones conscientes. “No se trata solo de tener la lana parada, sino de saber cómo moverla para que trabaje por ti”, dice el señor, y tiene razón. Aprender a invertir, aunque sea un poco, es como darle gasolina a tu futuro. Así, cuando llegue el momento de comprarte la casita propia, o mandarte unas vacaciones a dedo gordo por Europa, ya tienes la feria lista.
Otro mae que anda metido en estas vainas es Carlos Valerín, asesor financiero. Él nos dice que lo primordial es crear el hábito, y eso requiere disciplina. “Lo ideal es empezar con poco, aunque sea un cinco colones al día. Lo importante es romper esa barrera mental y volverse constante. Después, aumentas poquito a poco. Recuerden que el hábito, pues, dura como noventa días, así que hay que aguantar la chincha al principio”.
Ahora, algunos dirán que con los precios por las nubes, ¿cómo se supone que vas a ahorrar? Pues ahí entra la clave del presupuesto, mis queridos. Saber exactamente cuánto entra y cuánto sale cada mes es fundamental para identificar dónde estás tirando la lana y recortar gastos innecesarios. Hernández nos pone macanas: “Tener un presupuesto es indispensable, da igual si ganas mucho o poco. Te ayuda a ver dónde se te escapa el agua y a controlar el gasto”.
Y no piensen que ahorrar es solo para adultos. ¡Los puros son los que tienen que aprender a manejar la plata desde chiquitos! Valerín nos recuerda que la responsabilidad de educarlos financieramente recae en los papás. Enseñarles a destinar una parte de la mesada al ahorro antes de gastarla en jueguitos o dulces, es sembrar una semilla que florecerá en el futuro. ¿Quién no quiere criaturitas que sepan administrar su dinero y no se vayan al traste cuando sean mayores?
Para quienes se sienten perdidos en el mundo de las finanzas, las entidades bancarias ofrecen herramientas como el ahorro programado, que automatizan el proceso y te evitan la tentación de gastar la plata en un capricho. Además, hay opciones como los certificados de depósito a plazo, que te permiten obtener intereses por mantener tu dinero guardado durante un tiempo determinado. ¡Así la lana trabaja por ti, ey!
Bueno, ahora sí, mi pana, llegamos al final de esta nota llena de consejos para ponerle orden a tus finanzas. ¿Y tú, qué estrategias utilizas para ahorrar y construir un futuro económico más sólido? Déjanos tu opinión en el foro y comparte tus experiencias; ¡quizás inspires a otros a cambiar sus vidas!”,
