¡Ay, papá! Resulta que este jueves los que transitan por Curridabat van a tener que buscarse la vida. La Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) anda haciendo unas obras en una de las calles más movidas del cantón, así que van a tener que cerrarla parcialmente.
La vaina es así: el cierre afecta a la Ruta Nacional Secundaria 210, específicamente en el tramo que va desde el Curri Outlet – ya saben, cerquita del río Tiribí – hasta donde están las oficinas de VM Latino, justo enfrente de la rotonda de Hacienda Vieja. Parece que le tienen que meterle mano a la red eléctrica, un brete bien grande para la CNFL.
Y ojo, porque esto no es cualquier callecita. Es una arteria vital que conecta el centro de Curridabat con la carretera Florencio del Castillo, la usan montones de gente que viene de Tirrases y Desamparados. Imagínate el tráfico... ¡qué torta! Se espera que la zona esté cerrada desde las 7:30 a.m. hasta las 5:30 p.m., así que prepárense para un buen empacho vehicular si andan por esos lados.
Según nos cuentan los expertos de la CNFL, van a estar trabajando en unos 750 metros de vía. Dicen que necesitan hacer algunas mejoras y mantenimiento preventivo para asegurar que la energía llegue sin problemas a todos los hogares y negocios de la zona. Mejor prevenir que lamentar, dicen ellos, aunque a los que van a llegar tarde al trabajo les puede pesar bastante.
Claro, como buen tico, uno siempre busca alternativas. Lo ideal sería buscar otras rutas, tratar de salir temprano o, si es posible, teletrabajar. Pero vamos, sabemos cómo es, algunos simplemente no tienen opción y tendrán que enfrentarse al embotellamiento. ¡Qué sal! La verdad es que estas cosas siempre causan desmadre, pero bueno, por algo hay que sacrificar, ¿no?
Algunos vecinos de la zona han manifestado preocupación por el impacto que esto podría tener en sus negocios. Un señor de la ferretería me comentaba que teme perder clientes si no pueden acceder fácilmente a su local. Otros se quejan de que el ruido de las máquinas será insoportable durante esas horas. Esperemos que la CNFL tome medidas para minimizar estos inconvenientes, aunque eso cuesta encontrarlo.
En fin, parece que el panorama no pinta muy animado para los conductores de Curridabat este jueves. La recomendación es simple: planifiquen su viaje con anticipación, paciencia y, si pueden, eviten la zona afectada. ¡Que tengan un día tranquilo, aunque seguramente no lo será tanto! Estos mantenimientos son necesarios, pero espantan a cualquiera, diay.
Ahora, cuéntenme, ¿qué ruta alternativa les recomendarían a los conductores de Curridabat para evitar el embotellamiento? ¿Creen que la CNFL debería haber avisado con más anticipación sobre el cierre de la calle? Déjenme sus opiniones y experiencias en los comentarios, ¡esta vaina se puso interesante!
La vaina es así: el cierre afecta a la Ruta Nacional Secundaria 210, específicamente en el tramo que va desde el Curri Outlet – ya saben, cerquita del río Tiribí – hasta donde están las oficinas de VM Latino, justo enfrente de la rotonda de Hacienda Vieja. Parece que le tienen que meterle mano a la red eléctrica, un brete bien grande para la CNFL.
Y ojo, porque esto no es cualquier callecita. Es una arteria vital que conecta el centro de Curridabat con la carretera Florencio del Castillo, la usan montones de gente que viene de Tirrases y Desamparados. Imagínate el tráfico... ¡qué torta! Se espera que la zona esté cerrada desde las 7:30 a.m. hasta las 5:30 p.m., así que prepárense para un buen empacho vehicular si andan por esos lados.
Según nos cuentan los expertos de la CNFL, van a estar trabajando en unos 750 metros de vía. Dicen que necesitan hacer algunas mejoras y mantenimiento preventivo para asegurar que la energía llegue sin problemas a todos los hogares y negocios de la zona. Mejor prevenir que lamentar, dicen ellos, aunque a los que van a llegar tarde al trabajo les puede pesar bastante.
Claro, como buen tico, uno siempre busca alternativas. Lo ideal sería buscar otras rutas, tratar de salir temprano o, si es posible, teletrabajar. Pero vamos, sabemos cómo es, algunos simplemente no tienen opción y tendrán que enfrentarse al embotellamiento. ¡Qué sal! La verdad es que estas cosas siempre causan desmadre, pero bueno, por algo hay que sacrificar, ¿no?
Algunos vecinos de la zona han manifestado preocupación por el impacto que esto podría tener en sus negocios. Un señor de la ferretería me comentaba que teme perder clientes si no pueden acceder fácilmente a su local. Otros se quejan de que el ruido de las máquinas será insoportable durante esas horas. Esperemos que la CNFL tome medidas para minimizar estos inconvenientes, aunque eso cuesta encontrarlo.
En fin, parece que el panorama no pinta muy animado para los conductores de Curridabat este jueves. La recomendación es simple: planifiquen su viaje con anticipación, paciencia y, si pueden, eviten la zona afectada. ¡Que tengan un día tranquilo, aunque seguramente no lo será tanto! Estos mantenimientos son necesarios, pero espantan a cualquiera, diay.
Ahora, cuéntenme, ¿qué ruta alternativa les recomendarían a los conductores de Curridabat para evitar el embotellamiento? ¿Creen que la CNFL debería haber avisado con más anticipación sobre el cierre de la calle? Déjenme sus opiniones y experiencias en los comentarios, ¡esta vaina se puso interesante!