¡Ay, Dios mío! Aquí seguimos con movidas en la frontera, pura torta. Esta vez, la Policía de Fronteras agarró a un mae por echarle mano al negocio del tráfico ilícito de personas, justo allá por Los Chiles. Parece que alguien pensó que podía ganar unos billetes extras moviendo gente a través de pasos clandestinos, ¡qué chismera!
Según nos cuentan, el sospechoso, identificado como Córdoba, estaba captando a nicas, hacíéndoles creer que les iba a facilitar la entrada al país. Imagínate la ilusión de esos pobres tipos, buscando un nuevo brete, y terminan cayendo en manos de este… ya saben.
Lo que parece que Córdoba hacía era ofrecerles un “servicio” personalizado, llevándolos por un lugar llamado ‘El Ceviche’, un pasaje que usan los más listos para zafarse de los controles normales. Dicen que este sitio es como un hormiguero, siempre hay alguien queriendo pasar sin papeles, aprovechándose de cualquier agujero que haya en la cerca.
Y aquí viene lo bueno: a cada nicaragüense le cobraba cinco mil colones por el trayecto. ¡Cinco mil colones para moverlos desde el río hasta Los Chiles! Eso sí que es sacar raja, diay. Lo peor de todo es que esas personas, que estaban en condición irregular, confirmaron que pagaron esa suma, dejando claro que Córdoba andaba buscando cómo llenarle los bolsillos.
La policía, muy avispada, decomisó el carro que usaba para estas operaciones. Un Chunche más para la colección de evidencias contra estos abusadores. Así que, ahí quedó el carro, esperando a que los abogados hagan su magia y a ver si Córdoba sale o no de esto airoso. ¿Será que tendrá contactos en Fiscalía?
Ahora mismo, Córdoba está entre rejas, esperando a que los fiscales decidan qué hacer con él. Ellos van a tener que evaluar toda la evidencia y decidir si lo dejan ir o si lo meten a curtir un buen rato. El caso, como pueden imaginar, ha generado bastante revuelo en la zona, porque esto pone de manifiesto la vulnerabilidad de nuestras fronteras y la necesidad urgente de reforzar los controles.
Este tipo de situaciones nos hacen pensar: ¿Cuántos otros ‘Córdobas’ hay operando en la frontera, sacándole provecho a la desesperación de la gente? ¿Qué tan efectivos son realmente nuestros controles fronterizos si siguen pasando cosas como esta? Necesitamos ponerle atención a esto, porque se está aprovechando de la gente vulnerable y eso es una verdadera pena.
En fin, este caso nos deja pensando: Con tanta gente buscando mejorar sus condiciones de vida y arriesgándose a todo, ¿cree usted que deberíamos flexibilizar las políticas migratorias, o seguir endureciendo los controles para evitar este tipo de explotación? Déjenme saber su opinión en los comentarios, quiero leer qué piensan mis compas del foro sobre este asunto espinoso.
Según nos cuentan, el sospechoso, identificado como Córdoba, estaba captando a nicas, hacíéndoles creer que les iba a facilitar la entrada al país. Imagínate la ilusión de esos pobres tipos, buscando un nuevo brete, y terminan cayendo en manos de este… ya saben.
Lo que parece que Córdoba hacía era ofrecerles un “servicio” personalizado, llevándolos por un lugar llamado ‘El Ceviche’, un pasaje que usan los más listos para zafarse de los controles normales. Dicen que este sitio es como un hormiguero, siempre hay alguien queriendo pasar sin papeles, aprovechándose de cualquier agujero que haya en la cerca.
Y aquí viene lo bueno: a cada nicaragüense le cobraba cinco mil colones por el trayecto. ¡Cinco mil colones para moverlos desde el río hasta Los Chiles! Eso sí que es sacar raja, diay. Lo peor de todo es que esas personas, que estaban en condición irregular, confirmaron que pagaron esa suma, dejando claro que Córdoba andaba buscando cómo llenarle los bolsillos.
La policía, muy avispada, decomisó el carro que usaba para estas operaciones. Un Chunche más para la colección de evidencias contra estos abusadores. Así que, ahí quedó el carro, esperando a que los abogados hagan su magia y a ver si Córdoba sale o no de esto airoso. ¿Será que tendrá contactos en Fiscalía?
Ahora mismo, Córdoba está entre rejas, esperando a que los fiscales decidan qué hacer con él. Ellos van a tener que evaluar toda la evidencia y decidir si lo dejan ir o si lo meten a curtir un buen rato. El caso, como pueden imaginar, ha generado bastante revuelo en la zona, porque esto pone de manifiesto la vulnerabilidad de nuestras fronteras y la necesidad urgente de reforzar los controles.
Este tipo de situaciones nos hacen pensar: ¿Cuántos otros ‘Córdobas’ hay operando en la frontera, sacándole provecho a la desesperación de la gente? ¿Qué tan efectivos son realmente nuestros controles fronterizos si siguen pasando cosas como esta? Necesitamos ponerle atención a esto, porque se está aprovechando de la gente vulnerable y eso es una verdadera pena.
En fin, este caso nos deja pensando: Con tanta gente buscando mejorar sus condiciones de vida y arriesgándose a todo, ¿cree usted que deberíamos flexibilizar las políticas migratorias, o seguir endureciendo los controles para evitar este tipo de explotación? Déjenme saber su opinión en los comentarios, quiero leer qué piensan mis compas del foro sobre este asunto espinoso.
